El alimento que un hombre de 101 años recomienda evitar para una mayor longevidad: “Si quiero picar algo...”

Roy Cohen es un centenario estadounidense cuyos hábitos alimenticios le han asegurado una mayor esperanza de vida

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Un hombre cocinando verduras en
Un hombre cocinando verduras en una sartén (AdobeStock)

A sus 101 años, Roy Cohen es mucho más que un ejemplo de longevidad. Este ex director ejecutivo estadounidense ha captado la atención de científicos, nutricionistas y del público en general por una razón concreta: su estilo de vida. La clave, según él, está en su devoción por la dieta mediterránea.

Aunque es bastante probable que su longevidad responda en buena medida a un componente genético (su padre y su madre fallecieron a los 86 y 90 años, respectivamente), sus hábitos alimenticios han sostenido su esperanza de vida. Según relevó en una entrevista en Business Insider, su dieta se basa en verduras frescas, frutas, legumbres, cereales integrales, pescado y, por supuesto, aceite de oliva virgen extra, el oro líquido de la dieta mediterránea y de la que Andalucía es su productora estrella.

La dieta mediterránea, a la que Roy Cohen se aferra con disciplina, ha sido objeto de múltiples estudios que la relacionan con una vida más larga y saludable. Este patrón alimentario, tradicional de países como Italia, Grecia y España, se caracteriza por el alto consumo de alimentos frescos, mínimamente procesados, y por un equilibrio entre macronutrientes que favorece la salud cardiovascular y metabólica.

Tan importante lo que se come como lo que no

Sin embargo, para Cohen, lo importante no es solo lo que se come, sino también lo que se decide no incluir en la dieta. Por ello, este centenario optó por eliminar la carne roja. Desde entonces, asegura, su salud se ha mantenido estable y su calidad de vida supera incluso la de muchos más jóvenes.

La carne roja es rica
La carne roja es rica en hierro hemo (Shutterstock España)

La elección de Roy Cohen de evitar la carne roja no responde a una moda reciente ni a una tendencia alimentaria pasajera, ya que se basa en una filosofía de vida que pone en el centro la salud a largo plazo y el respeto por la naturaleza del cuerpo humano. Al evitar la carne de res, Cohen no solo reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer, como han demostrado varios estudios científicos, sino que también apuesta por una alimentación más sostenible y menos dañina para el medio ambiente.

La carne roja, si bien es una fuente rica de proteínas y hierro, ha sido asociada con efectos negativos cuando se consume en exceso, especialmente si se trata de carne procesada o cocinada a altas temperaturas. Las personas con colesterol alto deben tener cuidado con el consumo de carne roja, ya que puede elevar los niveles de colesterol en la sangre, lo que incrementa el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas. La carne roja, especialmente las variedades más grasas, contiene altos niveles de grasas saturadas que pueden aumentar el colesterol LDL, conocido como “colesterol malo”. Este tipo de colesterol puede acumularse en las arterias, lo que contribuye a la formación de placas que estrechan y endurecen las arterias, un proceso conocido como aterosclerosis.

Episodio: ¿Son malas las carnes procesadas?.

Cohen lo sabe, y por eso opta por fuentes de proteínas más saludables, como el pescado, las legumbres y los frutos secos. De hecho, para aplacar el hambre entre horas, este centenario elige snacks saludables que aumentan su esperanza de vida: “Si quiero picar algo, como un trozo de coliflor, una zanahoria o un pimiento rojo”.