Receta de empedrat, la ensalada de alubias y bacalao típica de Cataluña que es ideal para los meses de calor

La cocina mediterránea está repleta de platos frescos, saludables y ricos que nos ayudan a sobrevivir en los días de calor veraniegos. El empedrat de mongetes, una ensalada de legumbres propia de la gastronomía catalana, es uno de ellos. Las judías blancas y el bacalao son las dos grandes estrellas de esta receta, complementada con hortalizas frescas y aromáticas para dar como resultado un plato fresco ideal para el verano.

La preparación de esta receta parte de una buena base de alubias cocidas (mejor si son fesols de Santa Pau) que se mezclan con bacalao desmigado y desalado, y una serie de hortalizas: pimiento verde, cebolla morada, tomate maduro y aceitunas negras. Todo ello se adereza al gusto con aceite de oliva virgen extra, vinagre de vino blanco, sal y pimienta.

El nombre de esta tradicional receta procede del aspecto final de su elaboración: las judías que protagonizan el plato son como unas piedras entre las que encontramos, mezclados en pequeños pedazos, otros ingredientes. Es un plato que parece un mosaico, atractivo a la vista y lleno de diferentes colores y texturas.

Por encima de todo esto, el empedrat es también una elaboración dietéticamente muy completa, por lo que puede servirse como plato único, ya sea en una cena de entre semana o en una comida de verano. Mientras que las alubias blancas nos aportarán proteína vegetal y fibra, mientras que el bacalao funcionará como fuente de ácidos grasos omega-3. Todo ello, sumado a las vitaminas propias de las verduras y a la grasa saludable del aceite, da como resultado una receta de lo más equilibrada.

Además, esta ensalada se sirve en frío, lo que no solo la hace ideal para días calurosos, sino que además nos permite prepararla con antelación. De hecho, el empedrat de mongetes es una de esas recetas que sale beneficiada del tiempo de reposo, pues, durante las horas que la guardemos en la nevera, sus sabores se van mezclando e intensificando progresivamente, dejándonos como resultado una mezcla deliciosa de aromas frescos y deliciosos.

Esta ensalada admite variantes, como la inclusión de huevo duro, atún en lugar de bacalao, o incluso la adición de pepino y perejil para darle un toque más refrescante. Es ideal como parte de un menú de verano, ideal como guarnición pero también como plato único.

El empedrat se puede tener listo en unos 30 a 40 minutos:

• 10 minutos para cortar los ingredientes.
• 20 minutos para desalar (en caso de utilizar bacalao previamente desalado, se ahorra tiempo).
• 10 minutos para montar y aliñar la ensalada.

• 400 g de alubias blancas cocidas (pueden ser de bote, bien enjuagadas)
• 200 g de bacalao desalado desmigado
• 1 tomate grande maduro
• 1 pimiento verde
• 1/2 cebolla morada
• 50 g de aceitunas negras sin hueso
• 2 huevos duros (opcional)
• Aceite de oliva virgen extra
• Vinagre de vino blanco o jugo de limón
• Sal y pimienta al gusto

1. Si no usas bacalao desalado, desálalo durante al menos 24 horas cambiando el agua cada 8 horas. Luego desmenúzalo.
2. Lava bien las alubias si son de bote, y escúrrelas.
3. Corta el tomate, el pimiento y la cebolla en dados pequeños.
4. Mezcla en un bol las alubias, el bacalao, el tomate, el pimiento, la cebolla y las aceitunas.
5. Si decides usar huevo, cuécelo durante 10 minutos, enfría, pela y corta en cuartos o rodajas.
6. Prepara una vinagreta con 3 cucharadas de aceite de oliva, 1 cucharada de vinagre, sal y pimienta.
7. Vierte la vinagreta sobre la ensalada y mezcla con cuidado.
8. Reserva en la nevera al menos 30 minutos antes de servir, para que se integren los sabores.

Esta receta de empedrat rinde 4 porciones generosas como plato principal, o 6 si se sirve como entrante o acompañamiento.

Cada porción contiene aproximadamente:

• Calorías: 320
• Grasas: 15 g
• Grasas saturadas: 2 g
• Carbohidratos: 25 g
• Azúcares: 4 g
• Proteínas: 20 g

Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.

El empedrat se puede conservar en la nevera durante 2 a 3 días, bien tapado. De hecho, muchas veces está más sabroso al día siguiente de su preparación.