Este es el número de tazas de café que debes tomar al día para envejecer de forma saludable

Este efecto puede atribuirse en parte al papel de los antioxidantes presentes en el café

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Unos amigos tomando un café
Unos amigos tomando un café (AdobeStock)

Son numerosos los estudios que han mostrado sólidas evidencias de que el café es un aliado de nuestra salud y bienestar. Consumido con moderación, puede proteger el sistema cardiovascular, nuestra función cognitiva y, según las últimas investigaciones, reducir los síntomas naturales del envejecimiento.

Un reciente estudio financiado por el Instituto de Información Científica sobre el Café (ISIC) y publicado en la European Journal of Nutrition es el primero en analizar la relación entre el consumo del café y los componentes subyacentes de la fragilidad propia del envejecimiento.

Los resultados indican que un mayor consumo habitual de café se asocia con menores probabilidades generales de fragilidad. Estos resultados pueden considerarse junto con la opinión científica de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) de que hasta 400mg de cafeína (3-5 tazas de café) al día es una cantidad moderada y segura. Concretamente. El consumo habitual de café, unas de 4-6 tazas de 125 ml al día, se asocia con un menor riesgo de fragilidad debida al proceso de envejecimiento.

Los investigadores explican que el efecto del café en la reducción de la fragilidad puede atribuirse en parte al papel de los antioxidantes, que pueden ayudar a reducir la inflamación, la sarcopenia (pérdida muscular) y la prevención del daño muscular. El café también puede ayudar a mejorar la regulación de la sensibilidad a la insulina y la captación de glucosa en las personas mayores.

“Beber café es una parte fundamental de la rutina diaria de muchas personas, y a medida que envejecen buscan constantemente formas de mantener su salud. Nuestros hallazgos ponen de relieve la posible asociación beneficiosa entre el consumo diario de café y la reducción del riesgo de fragilidad en edades avanzadas en la población de mayor edad”, señala la autora principal del estudio, Margreet R. Olthof, profesora asociada del Instituto de Investigación en Salud Pública de la Universidad Libre de Ámsterdam (Países Bajos).

“Así pues, el consumo de café puede favorecer un envejecimiento saludable, pero es importante que también exploremos otras intervenciones dietéticas, para garantizar que los adultos mayores puedan seguir viviendo una vida plena”, concluye.

Episodio: ¿El café hace mal?

El efecto del café en la salud cardiovascular

Además de la cafeína, el café contiene una amplia variedad de compuestos bioactivos que pueden influir positivamente en la salud cardiovascular. Entre estos, destacan los antioxidantes, sustancias que combaten el estrés oxidativo en el cuerpo, un proceso que está vinculado al envejecimiento celular y a la aparición de enfermedades crónicas.

Los antioxidantes del café, como los polifenoles y los ácidos clorogénicos, ayudan a reducir la inflamación, mejorar la función de los vasos sanguíneos y prevenir la oxidación del colesterol LDL (el conocido como colesterol “malo”), un factor clave en el desarrollo de la aterosclerosis.

Pese a que la cafeína es un estimulante, es importante señalar que este incremento no suele ser lo suficientemente significativo como para causar problemas a largo plazo en personas con hipertensión bien controlada. De hecho, los expertos de la Federación Española del Corazón (FEC) coinciden en que no hay una razón convincente para prohibir el consumo de café a personas hipertensas siempre que estén bajo tratamiento y control médico adecuado. 

*Con información de Europa Press