Estos son los efectos positivos de darte de la mano con alguien: “Regula las emociones”

Según los expertos, este pequeño acto de intimidad puede llegar a sincronizar los cerebros entre las personas, aportando calma y conexión real

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Una divulgadora de neurociencia informa
Una divulgadora de neurociencia informa sobre psicología emocional en TikTok (Montaje Canva Infobae)

¿Alguna vez te has preguntado lo que le sucede a tu cerebro cuando das la mano a tu pareja, a tu hijo o a un familiar? La comunicadora Raquel Mascaraque (@raquelmascaraque), ha informado sobre los efectos que tienen este pequeño gesto cotidiano en nuestro cuerpo. La creadora de contenido, especializada en la divulgación neurocientífica, publicó un vídeo en TikTok comunicando sobre los beneficios ocultos que proporciona la intimidad compartida entre las personas. Rápidamente, el vídeo acumuló likes y comentarios, abriendo un debate sobre los afectos y la importancia del contacto físico en las relaciones interpersonales.

Un refugio frente al dolor

Según la divulgadora, darte la mano con alguien mientras paseas puede llegar a sincronizar los cerebros. Se trata de un gesto muy íntimo que hacemos con las personas con las que hemos cultivado una intimidad especial. Hijos, pareja, familiares cercanos, amigos de toda la vida. El contacto físico nos vincula al resto de una manera más profunda y esto tiene consecuencias muy positivas para nuestro cerebro.

Las personas son refugio para
Las personas son refugio para otras ante el dolor y la adversidad (Imagen Ilustrativa Infobae)

La influencer recoge un estudio donde, a través del análisis de la afectividad física entre las personas, se descubre que el contacto físico entre amigos y familiares puede ayudar a reducir el dolor emocional, profundamente arraigado en el cuerpo. Sobre todo, en el caso de la pareja, si estamos experimentando dolor, un contacto físico real, como dar la mano, puede aliviar la presión o el peso psicológico. Los resultados del estudio, de los que informa la divulgadora, explican que en un experimento clínico supervisado se expuso de forma continuada a una persona a estímulos dolorosos. Durante el proceso, cuando esa persona tomaba la mano de un ser querido, se observaba una reducción de las molestias y un aumento de la sincronía entre ambos, tanto a nivel fisiológico como cerebral. Esto es, según la neurociencia, lo que se denomina “acoplamiento cerebro-cerebro” y es una de las bases fisiológicas, según los especialistas, de la empatía profunda.

Como gran parte de los estudios, informa la comunicadora, esta investigación también presenta sus limitaciones ya que solo se realizó en parejas heterosexuales a través de una inducción del dolor de tipo térmica. No obstante, puede ayudarnos a entender todos los beneficios que tiene el contacto físico con respecto al bagaje emocional de las personas.

El contacto físico forma parte de la supervivencia humana

Desde que somos bebés, buscamos el contacto físico de la madre, para generar un estado de confianza, reflejo de la voluntad de sobrevivir. Esto además presenta otros beneficios: calma frente el estrés y la ansiedad, regula el mundo emocional interno y nos ayuda a atravesar mejor momentos vitales dolorosos. Por ello, esta búsqueda del contacto físico se reproduce en multiplicidad de escenarios adultos, por ejemplo durante un parto o ante un momento de inquietud. Sostener la mano de tu amigo o pareja equivale a decir “estoy aquí contigo” sin necesidad de articular palabra. Es una manera de participar del dolor del otro y hacer entender a nuestro ser querido que no se encuentra solo ante el dolor. Los estudios, según la influencer, determinan también que este tipo de contacto físico - sostener la mano con fuerza - es el ideal y el que mejor transmite calma durante el acompañamiento.

Buscamos el contacto físico de
Buscamos el contacto físico de la madre desde que somos pequeños (Instagram)

Redes de afectos

Por otro lado, aunque esta sincronía es mucho más fuerte entre familiares o personas con una historia vital conjunta, darse la mano con alguien, puede tratarse de un gesto político o cultural. Es decir, se constituye como un lenguaje no verbal que, sin necesidad de palabras, denota fuerza y compañía ante posibles problemas sociales. De esta manera los cerebros entretejen una red afectiva que trasciende lo meramente familiar hasta convertirse en un auténtico acto de colectividad política. Este tipo de interpretaciones se han dado a lo largo de la historia en distintos escenarios de reivindicación socio-política. A lo largo del S.XX, por ejemplo, en las manifestaciones obreras y vecinales, durante la segunda ola feminista y en la actualidad, desde las manifestaciones del 8M hasta las cadenas humanas ante el genocidio de Gaza.

Cientos de personas durante una
Cientos de personas durante una manifestación a favor de Palestina, de Atocha a Sol, a 5 de octubre de 2024, en Madrid (España). Matias Chiofalo - Europa Press