El restaurante madrileño en el que Jeff Bezos celebró su despedida de soltero: un lugar “donde ver, dejarse ver y sentirse guapo”

El multimillonario Jeff Bezos ultima ya los preparativos para su boda con la presentadora de televisión Lauren Sánchez, que tendrá lugar este mes de junio, en la ciudad italiana de Venecia. Pero, antes, el empresario ha querido celebrar sus últimos días de soltería junto a sus amigos más cercanos, en un viaje que ha tenido a España como principal escenario.

El magnate estadounidense eligió Madrid para celebrar su despedida de soltero, haciendo toda una ruta por algunos de los locales más exclusivos de la capital. En una de sus paradas, Bezos y sus acompañantes cenaron en el que es uno de los restaurantes de moda de la capital: el Ten con Ten, sito en el número 6 de la calle Ayala, en el exclusivo barrio de Salamanca.

Bajo la batuta del chef Sandro Silva y Marta Seco, Ten con Ten lleva años siendo uno de los place to be más solicitados de la capital, un restaurante donde cuesta conseguir mesa, un lugar de encuentro, para las relaciones sociales y para ‘ver y ser visto’. Tanto es así que el propio local se define en su web como “punto de partida donde ver, dejarse ver y sentirse guapo”. El prestigio de su cocina, sus cócteles, su elegante y cosmopolita ambiente y su decoración explican su duradero éxito, que a día de hoy se consolida con visitas como esta.

Ubicado en la calle Ayala, muy cerca del Paseo de la Castellana, Ten con Ten abrió sus puertas en 2011, cuando se postuló como uno de los primeros gastrobares en triunfar en Madrid. Fue el segundo negocio que abrieron Marta Seco y Sandro Silva, nacido como alternativa casual a lo que ofrecían en El Paraguas, su buque insignia y meca de la cocina asturiana en la capital. El proyecto de esta pareja siguió creciendo hasta ser ahora uno de los grupos gastronómicos más importantes del país, con ocho locales de éxito bajo su ‘paraguas’ y nombres como Ultramarinos Quintín, Amazónico, Numa Pompilio, Aarde u Origen.

Más de diez años después de su apertura, Ten con Ten sigue llamando la atención y llenando su sala, fines de semana y días laborables, comidas y cenas. Sin lugar a dudas, el ambiente es una de las razones que explican el éxito longevo de este local, y también uno de los motivos que hizo al empresario elegir este destino. Solo hay que echar un ojo a sus reseñas para observar que sus clientes aprecian el ambiente actual y divertido aunque elegante y la agradable música de sus DJs que acompañan a las comidas en Ten con Ten.

En Ten con Ten apuestan por una cocina moderna y global, con influencias de variadas partes del mundo, pero que se mantiene en las líneas tradicionales de la cocina española, con Asturias como referencia de fondo en muchos de sus platos. La carta comienza con una propuesta de aperitivos para compartir, perfectos para abrir boca o para disfrutar en su barra. En esta lista se encuentran algunos de sus platos más conocidos, entre ellos el famoso falso risotto de sémola con trufa, un icono del restaurante. Lo acompañan otros entrantes como las milhojas de foie con queso de cabra, los langostinos rebozados en panko o el arroz salvaje de pato.

La carta de Ten con Ten continúa con platos fríos entre los que se encuentran ensaladas como la de Higos con Burrata, picoteos frescos como las anchoas con tomates secos y aguacate o el carpaccio de wagyu con parmesano y tartares con el producto como protagonista, como el de salmón con caviar. Como en esta carta hay algo para todos, no pueden faltar tres secciones básicas en cualquier restaurante: pastas, como el canelón de faisán o la lasaña de alcachofas; platos del mar, como las vieiras con humus de espinacas y maracuyá o el tataki de atún; y carnes como el cochinillo confitado o la picaña braseada con yuca y plátano frito. En cuanto al precio, el coste de su ticket suele ir desde los 70 hasta los 100 € en promedio.

Las bebidas acompañan a la cocina de Silva, pero no pierden su parte de protagonismo. En su bodega se pueden encontrar desde vinos jóvenes y frescos, hasta vinos de guarda y añejos y de ella se extrae una exclusiva selección del sommelier que marida cada una de las elaboraciones recién salidas de cocina. No se puede finalizar la velada sin probar uno de los cócteles que hacen conocida a la barra de alcoholes de Ten con Ten. Entre sus opciones más curiosas, un ‘Spicy Paloma’ a base de mezcal y zumo de pomelo rosa; un ‘Almond Sweet’ con coñac, licor de chocolate, licor de almendra, nata y chocolate rallado; o un ‘Brisas de un ángel’, con pisco, vermut seco, clara de huevo, zumo de limón natural y sirope de lavanda.

Pero la noche no terminó para Bezos con esta exclusiva cena, sino que, desde allí, se fue directo a otro establecimiento del grupo de Silva y Seco para seguir disfrutando de sus últimas noches como soltero. En concreto, el millonario se dejó ver en La Destilería, la coctelería del Amazónico. Más tarde, el empresario terminó la noche en Blondie Club, uno de los clubs nocturnos más populares del barrio de Salamanca. Su escapado no finalizó allí, pues, al día siguiente, pasó por el club de ocio nocturno Castellana 8 y acabó en la discoteca Gunilla, otro de los clubes más famosos de la capital, donde disfrutó de unas copas con sus acompañantes.