Las tortitas soufflé, el postre favorito de Lady Di, según el que fue cocinero de la casa real: “Las adoraba”

Aunque ya han pasado casi 30 años desde su trágica muerte, la princesa Diana sigue siendo un personaje muy querido, así como una de las figuras más misteriosas y admiradas de la cultura inglesa. Sobre su vida, sus gustos y manías se ha dicho mucho, tanto que, ahora, conocemos incluso cuáles eran sus gustos culinarios. Lady Di tenía muy claras sus preferencias a la hora de disfrutar de platos dulces y salados, aunque no siempre podía degustarlos durante sus visitas al Palacio de Buckingham.

Un estricto protocolo regía las cenas en el Palacio de Buckingham, banquetes en los que la reina Isabel imponía su menú noche tras noche. No obstante, durante estas cenas, la princesa Diana encontró un inesperado aliado en la figura del chef Darren McGrady, quien durante años fue el cocinero oficial de la familia real británica. Ahora, McGrady comparte todas las anécdotas de sus largos años en las cocinas reales, así como las curiosidades e intimidades culinarias de sus miembros, a través de un canal de YouTube, en el que ha compartido cuál era el postre preferido de Lady Di.

Así, en uno de los episodios de su canal, el cocinero desveló su receta de las tortitas soufflé eran el postre favorito de la princesa Diana. “Las adoraba”, explica McGrady. Sin embargo, disfrutar de este plato no era tarea sencilla, ya que el menú estaba bajo el control absoluto de la reina Isabel II, quien imponía su autoridad incluso en los detalles culinarios. “No os creerías los obstáculos por los que pasé para poner estas crepes soufflé d’abricots en el menú de la Princesa Diana en la vida real”, comienza contando el cocinero en su vídeo.

Según lo explicado por McGrady, la reina Isabel solía elegir entre dos opciones de postres, generalmente de estilo pudin inglés. Para asegurarse de que Diana pudiera disfrutar de su dulce preferido, el chef diseñaba una estrategia: colocaba las tortitas soufflé como una de las opciones junto a otro postre que sabía que la reina detestaba. De esta manera, la elección de la monarca quedaba descartada y la princesa podía saborear su plato favorito sin contratiempos.

Aunque la princesa disfrutaba de este plato en la mesa, el protocolo y la etiqueta le impedían pedir una segunda ración. Sin embargo, al finalizar las cenas, Diana solía dirigirse a las cocinas, donde McGrady siempre le tenía preparada una porción adicional para disfrutar de un segundo plato de esta delicia dulce mientras charlaban en las cocinas de palacio.

McGrady no solo ha compartido esta anécdota, sino que también ha revelado la receta de las tortitas soufflé que tanto disfrutaba la princesa. Se trata de un paso a paso sencillo, basada en una esponjosa masa que el cocinero inglés cocina al horno en unos aros metálicos que le dan su característica forma. Estas tortitas se acompañan de una deliciosa mermelada de albaricoque, calentada y licuada hasta obtener la textura perfecta.

Antes de empezar a preparar la masa, debemos precalentar el horno a 200 °C. Además, engrasaremos unos moldes redondeados y los colocaremos en una bandeja en el interior del horno, para que estén calientes en el momento de verter la masa. “Hay que calentar mucho la bandeja para que, cuando entre la masa, empiece a cocerse enseguida. Si se salta esta parte, la masa se escapa por el fondo del horno”, explica McGrady.

Para preparar la masa de esta tortita, batiremos 7 yemas de huevo junto con 2 huevos enteros, a los que se añaden 4 cucharadas de mantequilla derretida, 60 mililitros de leche, 100 gramos de azúcar, 10 cucharadas de harina y 600 mililitros de nata espesa. El siguiente paso es batir 7 claras de huevo hasta alcanzar el punto de nieve. Una vez listas, incorporamos las claras cuidadosamente a la mezcla preparada anteriormente, asegurando que no pierdan su volumen. Este paso es esencial para obtener la textura ligera y aireada que caracteriza a un buen soufflé.

Una vez lista la masa, verteremos la mezcla en los moldes y hornearemos de 8 a 10 minutos (si utiliza moldes de 10 cm) o de 20 a 25 minutos (si utiliza un molde más grande), hasta que el soufflé haya subido y obtenga un delicioso color dorado.

Finalmente y mientras el soufflé se hornea, prepararemos el glaseado que lo acompañará. Según detalló McGrady, tendremos que calentar la mermelada de albaricoque en un cazo hasta que alcance el punto de ebullición. Posteriormente, se pasa por un colador de malla fina para eliminar cualquier trozo sólido, obteniendo así un glaseado suave y uniforme. En este sentido, el chef ha destacado además la flexibilidad de esta receta: aunque la mermelada de albaricoque es la opción tradicional, podemos sustituirla por sabores como frambuesa, melocotón o fresa.

Finalmente, solo quedará montar este postre, colocando las tortitas en un plato y coronándolas con un buen chorro de esta mermelada, creando así un plato vistoso y elegante, digno de la realeza.