La dieta mediterránea puede proteger de la depresión, según una experta

Al mismo tiempo la dieta occidental puede empeorar la salud cerebral y mental

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Alimentos de la dieta mediterránea
Alimentos de la dieta mediterránea (Shutterstock)

Llevar una alimentación basada en la dieta mediterránea puede prevenir el desarrollo de una depresión. Al mismo tiempo, la dieta occidental aumenta su riesgo. Así lo ha asegurado Eva Garnica, psiquiatra y jefa de estudios de la Unidad Docente de la Red de Salud Mental de Vizcaya durante el XXXIII Curso Nacional de Actualización en Psiquiatría.

La dieta mediterránea se caracteriza por un alto consumo de frutas y verduras, cereales integrales, legumbres, frutos secos, pescado y aceites monoinsaturados o poliinsaturados, pero con una ingesta limitada de alimentos muy procesados. Estas dietas son ricas en vitaminas B, antioxidantes, ácidos grasos poliinsaturados omega-3 y fibra, y bajas en grasas saturadas, azúcar y sodio.

Diversos estudios han apuntado que las personas con este trastorno mental tienden a alimentarse con comidas más calóricas y altas en azúcar, como los ultraprocesados, lo que a su vez empeora la salud cerebral. “Curiosamente, se ha visto que en psicosis temprana hay ya una relación de gravedad de los síntomas con mayor ingesta de calorías y menor de proteínas”, ha añadido.

Existen diferentes hipótesis que explican el motivo por el que la dieta puede ser dañina para la salud mental, “desde la inflamación, a la modificación de la microbiota, las alteraciones metabólicas y otros”. En concreto, ha profundizado sobre la inflamación, respecto a la que ha recordado que hay evidencia que ha demostrado su presencia en personas con trastorno mental grave a través de marcadores sanguíneos. A este respecto, ha señalado que las dietas altas en carbohidratos refinados, azúcar, ultraprocesados y grasas ‘trans’ aumentan la inflamación sistémica.

Conociendo esta relación entre inflamación dietética y salud, así como los beneficios de las intervenciones dietéticas para la salud física en trastorno mental grave, Garnica ha indicado que “es razonable explorar la inflamación dietética en algunas de las desigualdades en salud (obesidad, diabetes, riesgo cardiovascular) de las personas con estas patologías psiquiátricas”.

La psiquiatra ha detallado que, en los últimos años, está habiendo “mucha investigación” sobre el eje microbiota-intestino-cerebro y se está empezando a demostrar la eficacia de algunas intervenciones basadas en el estilo de vida -alimentación y ejercicio físico-, los psicobióticos o incluso el trasplante fecal.

En esta línea, la psiquiatra ha indicado que ya hay profesionales que están enfocando sus tratamientos a nivel metabólico, es decir, que tratan de mejorar los trastornos cerebrales y mentales abordando la obesidad o prescribiendo la denominada neurocetoterapia, que consiste en el uso de dieta cetogénica y/o ayuno intermitente para mejorar trastornos cerebrales y mentales.

Episodio: Dieta Mediterránea.

El impacto de la depresión en España

Más de dos millones de personas sufren depresión en España (aproximadamente el 4,1% de la población), según los datos ofrecidos por el Ministerio de Sanidad. De todas ellas, unas 230.000 sufren una depresión grave. Las mujeres y las personas de más edad son el sector de la población más vulnerable a la enfermedad. Además, la Confederación de Salud Mental España señala que el 42,1% de los españoles ha experimentado una depresión en algún momento de su vida.

*Con información de Europa Press