Receta de salsa blanca sin harina ni manteca, rápida y fácil

La salsa blanca, o bechamel, es una de las preparaciones más clásicas y versátiles en la cocina. Normalmente, se elabora con una base de harina y manteca, pero si buscas una versión más ligera, sin estos ingredientes, hay alternativas que resultan igual de deliciosas.

Esta salsa es perfecta para acompañar pastas, verduras, lasañas o incluso como base para algunas sopas. Y lo mejor es que, al ser más ligera, puedes disfrutarla sin remordimientos.

Esta receta de salsa blanca sin harina ni manteca se basa en la combinación de leche y almidón de maíz (fécula de maíz), lo que permite crear una textura cremosa y espesa sin necesidad de utilizar ingredientes pesados. Es ideal para personas que buscan reducir el consumo de grasas o aquellos con intolerancias al gluten. Además, en menos de 10 minutos, tendrás una salsa suave y deliciosa que se adapta a diversas preparaciones.

La receta de salsa blanca sin harina ni manteca comienza con la disolución del almidón de maíz en leche fría. A continuación, la mezcla se lleva al fuego y se cocina, revolviendo constantemente, hasta que espese y adquiera la consistencia deseada. Esta es una versión simplificada de la tradicional salsa bechamel, pero sin perder su textura cremosa ni su sabor suave y delicado.

Esta salsa blanca sin harina ni manteca se prepara rápidamente en aproximadamente 10 minutos. El tiempo total incluye unos 2 minutos para disolver el almidón de maíz en la leche fría y unos 5 a 7 minutos de cocción para obtener la textura cremosa.

1. 500 ml de leche (puedes usar leche vegetal como alternativa).
2. 2 cucharadas de almidón de maíz (fécula de maíz).
3. 1 cucharadita de aceite de oliva o el aceite de tu preferencia.
4. Sal al gusto.
5. Pimienta blanca al gusto.
6. Nuez moscada (opcional, para un toque de sabor).

1. En un bol pequeño, disolver las 2 cucharadas de almidón de maíz en un poco de leche fría (aproximadamente 100 ml) hasta que no queden grumos.
2. En una cacerola, calentar el resto de la leche (400 ml) junto con el aceite a fuego medio.
3. Cuando la leche esté caliente, agregar la mezcla de almidón disuelto y revolver constantemente con un batidor de varillas.
4. Cocinar durante 5 a 7 minutos, sin dejar de mover, hasta que la salsa espese y adquiera la consistencia deseada.
5. Añadir sal, pimienta y nuez moscada al gusto. Revolver bien para integrar los sabores.

Con esta cantidad de ingredientes, la receta de salsa blanca sin harina ni manteca rinde aproximadamente 4 porciones.

Cada porción de salsa blanca sin harina ni manteca contiene aproximadamente:

• Calorías: 80
• Grasas: 4 g
• Grasas saturadas: 0.5 g
• Carbohidratos: 8 g
• Azúcares: 5 g
• Proteínas: 3 g

Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.

La salsa blanca sin harina ni manteca se puede conservar en la heladera por hasta 2 días, siempre y cuando se mantenga bien cubierta en un recipiente hermético. Al recalentarla, es posible que necesites añadir un poco de leche para devolverle su textura cremosa.