Cómo funciona el Phantom MK-1, el robot soldado controlado por humanos que promete revolucionar la defensa y la logística

La compañía Foundation presentó un prototipo inspirado en Star Wars, diseñado para tareas de reconocimiento y desactivación de explosivos, que podría transformar la seguridad en el campo de batalla y la industria manufacturera

Guardar
El Phantom MK-1 es el
El Phantom MK-1 es el primer robot humanoide diseñado específicamente para uso militar, según la compañía estadounidense Foundation (Captura de video: YouTube)

La idea de un robot soldado evocaba hasta ahora escenas de ciencia ficción y sagas cinematográficas. Sin embargo, la compañía estadounidense Foundation, con sede en San Francisco, intenta concretar esas imágenes futuristas mediante el desarrollo del Phantom MK-1.

De acuerdo con National Geographic, este robot es el primer prototipo humanoide concebido y fabricado para uso en conflictos militares, que diluye la frontera entre ficción e innovación tecnológica.

El nacimiento de este robot, inspirado abiertamente en el universo de Star Wars de George Lucas, marca el inicio de una nueva etapa en la integración de inteligencia artificial y maquinaria avanzada en el entorno militar.

El diseño del Phantom MK-1
El diseño del Phantom MK-1 prioriza resistencia, movimiento fluido y capacidad de carga de hasta 20 kilogramos (Captura de video: YouTube)

Sankaet Pathak, CEO de Foundation, afirmó en una entrevista a News Nation: “El futuro de la guerra son los videojuegos de la vida real”. De este modo, la compañía plantea incorporar robots humanoides en tareas de defensa y seguridad.

Características técnicas y diseño del Phantom MK-1

El Phantom MK-1 posee un diseño humanoide, mide 1,75 metros y pesa cerca de 80 kilogramos; sus dimensiones imitan a las de un adulto promedio. La estructura está desarrollada para priorizar resistencia y movimiento fluido, logrando una integración natural en entornos donde existen interacciones con seres humanos.

En el torso, que actúa como núcleo funcional, se alojan las unidades de cómputo, cámaras, baterías y sensores avanzados. Esta arquitectura le permite realizar numerosas tareas, desde actividades domésticas hasta funciones industriales.

Las piernas robóticas le otorgan la capacidad de subir escaleras, circular por terrenos irregulares y desplazarse en espacios angostos. Esto amplía su rango de acción tanto en fábricas como en misiones militares.

El Phantom MK-1 será controlado
El Phantom MK-1 será controlado por operadores humanos, mientras la inteligencia artificial gestiona navegación y cálculo de trayectorias (Captura de video: YouTube)

Una de las características más sobresalientes es la capacidad para transportar hasta 20 kilogramos de carga útil. El diseño, de cuerpo aerodinámico y hombros anchos, incluye un rostro sin rasgos distintivos, lo que recuerda a los droides de combate de Star Wars. Este detalle no pasó inadvertido para ingenieros y entusiastas de la saga.

Aplicaciones previstas: del campo de batalla a la industria

La prioridad inicial del Phantom MK-1 reside en el uso militar, diferenciándolo de otros robots concebidos principalmente para entornos civiles o empresariales.

Según Pathak, el propósito es que actúe como unidad terrestre de primera línea, concentrado en tareas de reconocimiento y desactivación de explosivos, lo que puede disminuir la exposición de los soldados humanos a misiones peligrosas.

Foundation también estudia aplicaciones en la industria: optimización de cadenas de montaje y procesos logísticos. El sitio web oficial de la empresa precisa que la tecnología que desarrolla es resultado de años de investigación en robótica humanoide, y que su construcción resistente facilita su adopción en una diversidad de entornos.

El robot Phantom MK-1 puede
El robot Phantom MK-1 puede operar en entornos militares e industriales, desde desactivación de explosivos hasta optimización logística (Imagen Ilustrativa Infobae)

Aunque no se menciona en el portal su uso directo en áreas de combate, Pathak confirmó la vocación bélica del proyecto en declaraciones públicas.

La operatividad del Phantom MK-1 no será autónoma. El CEO detalló que un operador humano controlará el robot y decidirá sobre el empleo de armamento, mientras que la inteligencia artificial realizará funciones de navegación y cálculo de trayectorias, garantizando supervisión constante sobre cada acción relevante en operaciones reales.

Producción, proyecciones y reacciones

Foundation prevé fabricar 10.000 unidades del Phantom MK-1 para el año 2026. Según National Geographic, esta cifra evidencia una apuesta por la adopción masiva de la tecnología, tanto en fuerzas armadas como en la industria manufacturera.

En la versión actual, el robot utiliza una mano mecánica recubierta con guantes, aunque la compañía planea integrar hardware más avanzado en futuras versiones para aumentar la funcionalidad y el rendimiento en ambientes hostiles.

Foundation proyecta expandir la tecnología
Foundation proyecta expandir la tecnología del Phantom MK-1 a la exploración espacial, en colaboración con SpaceX para misiones en Marte (Captura de video: YouTube)

Pathak describió al Phantom MK-1 como “más rápido, más fuerte y armado para ser más letal”, resaltando la capacidad de adaptación y robustez del modelo. El diseño prescinde de sensores LiDAR: emplea exclusivamente cámaras, incrementando la fiabilidad y la integración de la información a la vez que simplifica la red de sensores y cables internos.

Las imágenes y videos difundidos del Phantom MK-1 generaron numerosas reacciones en línea. Diversos usuarios manifestaron preocupación ante la idea de una máquina humanoide diseñada para la guerra y recordaron la figura de “Terminator” y relatos de inteligencia artificial hostil.

Con vistas al futuro, la empresa tecnológica proyecta expandir el empleo de su tecnología a la exploración espacial, en particular mediante colaboración con SpaceX para diseñar sistemas autónomos destinados a misiones en Marte, de acuerdo con los objetivos expresados por el fundador de la compañía.