Descubren en Japón una nueva especie de pterosaurio que vivió hace 90 millones de años

Un fósil hallado en la isla de Kyushu permite identificar un linaje inédito de reptiles voladores, resultado de una colaboración internacional y técnicas científicas avanzadas

Guardar
Paleontólogos han descubierto una nueva
Paleontólogos han descubierto una nueva especie de pterosaurio del Cretácico Superior de Japón, la primera vez que un pterosaurio recibe su nombre a partir de fósiles corporales hallados en el país

El primer pterosaurio identificado formalmente en Japón ha sido revelado por un equipo internacional de científicos, marcando un hito sin precedentes en la paleontología del país asiático.

Según un estudio publicado en Cretaceous Research, el hallazgo se basa en una vértebra cervical parcial descubierta originalmente en la década de 1990 en la formación geológica del Grupo Mifune, ubicada en la prefectura de Kumamoto, al sur de la isla de Kyushu.

La especie, bautizada como Nipponopterus mifunensis, representa un nuevo género y especie dentro de la familia Azhdarchidae, conocida por albergar a algunos de los reptiles voladores más grandes que hayan existido en la historia del planeta.

De acuerdo con Cretaceous Research, se trata del primer pterosaurio que recibe un nombre científico basado en restos óseos descubiertos en territorio japonés, lo que representa un aporte fundamental al estudio de la fauna mesozoica en Asia Oriental.

Un linaje inédito para la ciencia japonesa

Hasta ahora, no se habían identificado formalmente pterosaurios en Japón a partir de fósiles corporales completos o parciales, lo que limitaba la comprensión científica de la diversidad de estos animales en la región. El descubrimiento de Nipponopterus mifunensis cambia ese escenario. El ejemplar habría vivido durante el Cretácico Superior, concretamente entre las etapas Turoniano y Coniaciano, hace aproximadamente 90 millones de años.

Hallado en la prefectura de
Hallado en la prefectura de Kumamoto, Nipponopterus mifunensis perteneció a la familia de gigantescos reptiles voladores Azhdarchidae (Imagen Ilustrativa Infobae)

Según Cretaceous Research, esta nueva especie habría alcanzado una envergadura estimada de entre 3 y 3,5 metros, ubicándose dentro del rango medio de tamaño para los miembros de su familia.

Aunque no alcanza las dimensiones colosales de especies como Quetzalcoatlus, uno de sus parientes más famosos, su morfología sugiere que Nipponopterus era un reptil volador altamente especializado, posiblemente adaptado para planear sobre ambientes costeros o fluviales.

Análisis anatómico: una vértebra que cuenta una historia

El fósil que permitió la descripción de esta nueva especie corresponde a la sexta vértebra cervical, una pieza clave en el esqueleto de los pterosaurios azdárquidos. El análisis detallado de esta pieza reveló varias características anatómicas que no se han observado en otros representantes conocidos de la familia.

Entre los rasgos más distintivos se encuentra una quilla dorsal prominente y elevada, que se extiende desde la epífisis hasta cubrir completamente el pedúnculo postexapófisario. Esta estructura ósea podría haber proporcionado estabilidad y soporte muscular, aspectos esenciales para el vuelo.

La vértebra cervical que permitió
La vértebra cervical que permitió describir la nueva especie revela rasgos anatómicos únicos esenciales para el vuelo (Imagen Ilustrativa Infobae)

Además, la vértebra presenta un surco ventral alargado en la parte inferior, un cóndilo de forma subtriangular y postexapófisis ubicadas lateralmente que se proyectan hacia los costados. Estas particularidades morfológicas fueron determinantes para ubicar a Nipponopterus mifunensis dentro de la subfamilia Quetzalcoatlinae, lo que lo convierte en un pariente próximo tanto del poco conocido “azdárquido Burkhant” de Mongolia como del gigantesco Quetzalcoatlus de América del Norte.

Colaboración científica internacional

El estudio fue el resultado de un trabajo coordinado entre investigadores de múltiples instituciones académicas. Participaron expertos de la Universidad de Shihezi (China), el Museo de Zoología de la Universidad de São Paulo (Brasil), así como científicos japoneses del Museo de Dinosaurios Mifune, la Universidad de Kumamoto y la Universidad de Hokkaido.

De acuerdo con el artículo de Cretaceous Research, la reevaluación del fósil fue posible gracias a la implementación de tomografías computarizadas avanzadas, realizadas por el equipo de la Universidad de Kumamoto. Estas técnicas permitieron analizar la microestructura del hueso sin dañarlo, revelando detalles cruciales sobre su morfología.

Científicos de Japón, China y
Científicos de Japón, China y Brasil colaboraron para reevaluar el fósil usando técnicas de tomografía computarizada (Imagen Ilustrativa Infobae)

Los resultados fueron posteriormente integrados en un análisis filogenético, con el objetivo de determinar la ubicación precisa del espécimen dentro del árbol evolutivo de los pterosaurios. Esta combinación de tecnología de imágenes, modelado computacional y conocimientos paleontológicos permitió confirmar que se trataba de una especie hasta entonces desconocida.

“Este es un gran avance para la paleontología japonesa”, declaró el Dr. Naoki Ikegami, paleontólogo del Museo de Dinosaurios de Mifune, en declaraciones recogidas por el estudio. “Hasta ahora, ningún pterosaurio había recibido un nombre formal a partir de restos óseos hallados en Japón. Este descubrimiento proporciona una perspectiva crucial sobre la diversidad y la evolución de los pterosaurios en Asia Oriental”, expresó.

Por su parte, el profesor Toshifumi Mukunoki, de la Facultad de Ciencia y Tecnología Avanzadas de la Universidad de Kumamoto, destacó el valor del trabajo conjunto. “Es un hermoso ejemplo de cómo la ciencia trasciende fronteras”, señaló, subrayando la importancia de la colaboración internacional en el avance del conocimiento científico.

Un fósil para el público japonés

El fósil de Nipponopterus mifunensis
El fósil de Nipponopterus mifunensis ya se exhibe al público en el Museo de Dinosaurios Mifune, en Kumamoto (Imagen Ilustrativa Infobae)

El fósil de Nipponopterus mifunensis se encuentra actualmente en exhibición pública en el Museo de Dinosaurios Mifune, en la prefectura de Kumamoto.

Este museo se ha convertido en uno de los principales centros de divulgación paleontológica en Japón, y la incorporación de este espécimen a su colección permitirá a los visitantes acercarse de manera directa a un fragmento poco conocido del pasado prehistórico del archipiélago.

El hallazgo de Nipponopterus no solo amplía el registro fósil de Japón, sino que también ofrece nuevas claves sobre la distribución biogeográfica de los azdárquidos, así como sobre su morfología y evolución.

Últimas Noticias

¿Mito o realidad? El efecto mariposa no es lo que se cree y la ciencia tiene la respuesta

Desde el laboratorio de Edward Lorenz hasta las redes sociales, este fenómeno cautivó a científicos y curiosos. Qué esconde esta idea y por qué advierten que es mucho más compleja y sorprendente que las suposiciones previas, según National Geographic

¿Mito o realidad? El efecto

Diez estudiantes argentinos ganaron el mundial aeroespacial organizado por la NASA

Representaron al ITBA en la final del certamen internacional CanSat 2025 en Virginia, Estados Unidos. El equipo diseñó y lanzó un satélite en miniatura que cumplió con éxito una misión simulada, superando a 39 universidades de todo el mundo

Diez estudiantes argentinos ganaron el

Cuál es la verdadera edad de los milenarios rollos del Mar Muerto: la IA reescribe lo que se creía sobre su origen

El marco histórico de los manuscritos de Qumrán, hallados a mediados del siglo pasado, está siendo revisado a partir de técnicas avanzadas de redes neuronales y abren interrogantes sobre la transmisión bíblica

Cuál es la verdadera edad

Brian Armstrong financia la primera startup de edición genética de embriones humanos

El respaldo millonario del CEO de Coinbase impulsa una disruptiva y polémica iniciativa biotecnológica en Estados Unidos, cuya misión desafía límites científicos y morales, tal como destaca MIT Technology Review

Brian Armstrong financia la primera

Beber café reorganiza la conectividad cerebral y mejora la función ejecutiva

Investigadores surcoreanos demuestran que la popular bebida favorece la eficiencia de las redes neuronales, lo que se asocia a mejores resultados en pruebas cognitivas y memoria de trabajo

Beber café reorganiza la conectividad