Un estudio japonés revela cómo ciertas variantes en el ADN influyen en la comunicación vocal y el comportamiento social de los felinos, abriendo nuevas vías para comprender mejor a las mascotas y su relación con los humanos.
Un reciente avance científico promete arrojar luz sobre uno de los comportamientos más característicos de los gatos domésticos: el ronroneo.
Investigadores japoneses han identificado una posible base genética para este fenómeno, lo que podría explicar no solo por qué los gatos ronronean, sino también cómo la domesticación y la crianza selectiva han moldeado su comportamiento.
Según Newsweek, el hallazgo se centra en variaciones del gen del receptor de andrógenos, un elemento que podría ser clave para entender las diferencias entre los gatos domésticos y otras especies felinas.

El estudio, liderado por Yume Okamoto y su equipo del Centro de Investigación de Vida Silvestre de la Universidad de Kioto, se publicó el 30 de mayo de 2025 y ha captado la atención tanto de la comunidad científica como del público general.
Okamoto expresó que el objetivo de la investigación es “profundizar nuestra comprensión de los gatos y contribuir a construir relaciones más felices entre gatos y humanos”, según recogió Newsweek.
Metodología y participación
Para llevar a cabo la investigación, el equipo de la Universidad de Kioto trabajó con una muestra de 280 gatos domésticos de razas mixtas, todos ellos castrados o esterilizados y mantenidos como mascotas de interior. Los científicos solicitaron la colaboración de dueños de gatos de todo Japón, quienes respondieron con entusiasmo.
De acuerdo con Newsweek, Okamoto señaló que “cuando convocamos a participantes, nos conmovió recibir respuestas de 265 dueños de gatos de todo Japón en un solo día, y recibimos mensajes amables”.

El procedimiento incluyó evaluaciones de comportamiento realizadas por los investigadores y la recolección de muestras de ADN. Esta combinación permitió comparar las variantes del gen del receptor de andrógenos presentes en los gatos domésticos con las de otras especies de la familia Felidae.
Resultados principales
Los hallazgos respaldan la hipótesis de que existe una base genética para el ronroneo y otras formas de comunicación vocal en los gatos. Según Newsweek, los dueños informaron que los gatos con la variante “de tipo corto” del gen del receptor de andrógenos ronroneaban con mayor frecuencia que aquellos con la variante “de tipo largo”.

Además, se observaron diferencias de comportamiento según el sexo de los animales. Los gatos machos con la variante corta tendían a ser más vocales con los humanos, mientras que las hembras con la misma variante mostraban una mayor agresividad hacia extraños. Estos resultados sugieren que el gen influye tanto en el ronroneo como en otros aspectos del comportamiento social.
Comparación con otras especies y domesticación
El equipo amplió la investigación al comparar el ADN de los gatos domésticos con el de 11 especies de la familia Felidae, incluidos guepardos, leopardos y tigres. Newsweek informó que los gatos domésticos presentan variantes “de tipo más largo” del gen, una característica ausente en los grandes felinos.
También se observó que especies cercanas a los gatos domésticos solo tienen la versión corta del gen. Esto sugiere que las variantes largas podrían haber surgido a través de la domesticación y la crianza selectiva.

Además, los investigadores destacaron que los gatos criados por humanos desde temprana edad, especialmente los de raza pura, tienden a depender menos de la comunicación vocal.
Investigaciones previas citadas por Newsweek indican que los gatos de raza pura suelen portar la variante larga, mientras que muchos de los gatos de raza mixta eran anteriormente callejeros, lo que podría explicar una mayor vocalización en estos últimos.
Perspectivas futuras
Tras finalizar el estudio inicial, el equipo de la Universidad de Kioto anunció su intención de ampliar la investigación a otras especies de la familia Felidae. Según Newsweek, esto permitirá explorar si las variantes genéticas halladas también están presentes en otros felinos y cómo podrían haber evolucionado durante la domesticación.

Okamoto reafirmó el compromiso de su equipo con el estudio del comportamiento felino. La información publicada indica que los próximos trabajos podrían aportar datos valiosos para la biología, la genética y el bienestar animal, además de reforzar el vínculo entre humanos y gatos.
La investigación sobre el ronroneo y el gen del receptor de andrógenos representa un avance significativo en la comprensión del comportamiento felino y sus raíces genéticas. El interés de la comunidad científica y del público general sugiere que este campo seguirá ofreciendo nuevas perspectivas sobre la relación entre los gatos y las personas.
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