La especia que alivia los síntomas de la próstata inflamada y combate el hígado graso con su pulpa de semillas

Entre las repercusiones más frecuentes de la hiperplasia benigna de próstata destacan la dificultad y la frecuencia para orinar, situaciones que alteran la calidad de vida

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La especia que alivia los
La especia que alivia los síntomas de la próstata inflamada y combate el hígado graso con su pulpa de semillas (Foto: Wikipedia)

La búsqueda de opciones naturales para aliviar los síntomas asociados a la próstata inflamada y el hígado graso se ha intensificado en los últimos años. Diversos remedios provenientes de plantas tradicionales ganan terreno en la medicina complementaria, respaldados por siglos de uso ancestral y el creciente interés de la comunidad científica por descubrir nuevas alternativas terapéuticas.

En territorios de América Latina, los conocimientos transmitidos de generación en generación han permitido rescatar ingredientes cotidianos capaces de ofrecer beneficios significativos para la salud masculina y hepática.

Entre las repercusiones más frecuentes de la hiperplasia benigna de próstata (HBP) destacan la dificultad y la frecuencia para orinar, situaciones que alteran la calidad de vida. La Asociación Española de Urología (AEU) reconoce el valor de la fitoterapia a base de diversas plantas como parte de un enfoque integral para el tratamiento de estas afecciones. Paralelamente, el aumento de casos de hígado graso, estrechamente ligado a estilos de vida sedentarios y dietas hipercalóricas, ha disparado la demanda de productos naturales que contribuyan a restaurar la función hepática y controlar la inflamación.

Entre las repercusiones más frecuentes
Entre las repercusiones más frecuentes de la hiperplasia benigna de próstata destacan la dificultad y la frecuencia para orinar, situaciones que alteran la calidad de vida (Freepik)

Un ejemplo destacado proviene de regiones como Amazonas, Cusco, Ayacucho y San Martín, donde una especie vegetal de amplio uso en la medicina tradicional se presenta como aliada en el alivio de los síntomas prostáticos y hepáticos. Este recurso se mantiene vigente gracias a sus propiedades antiinflamatorias y diuréticas, asociadas, según expertos citados por la AEU, a la presencia de esteroides en las hojas y flavonoides que actúan sobre el sistema urogenital, regulando la función renal. Los pobladores de estas regiones han empleado este recurso tanto en infusiones como en preparados con pulpa y semillas, consolidándolo como uno de los más valorados dentro del abanico de plantas medicinales de América Latina.

Cuáles son las propiedades curativas del achiote

El achiote, conocido científicamente como Bixa orellana, es una semilla originaria de América tropical y difundida ampliamente en el Perú y otros países de la región. Esta planta destaca en la medicina tradicional por su capacidad para reducir síntomas de inflamación prostática y favorecer la función del hígado.

El consumo regular de infusiones a base de hojas secas ha mostrado efectos positivos como desinflamante, según reportes de la Asociación Española de Urología (AEU). Así lo confirma su uso tradicional para las vías urinarias, recomendando una preparación con 20 gramos de hojas secas en un litro de agua, la cual puede tomarse a lo largo del día.

Además de sus efectos sobre la próstata, el achiote ha despertado interés por su acción sobre el hígado, en particular en la lucha contra la hepatitis y los trastornos relacionados con la acumulación de grasa. La pulpa de las semillas de este arbusto contiene compuestos activos capaces de favorecer la función hepática. Preparar esta pulpa resulta sencillo: basta remojar las semillas secas durante una hora, aplastarlas y disolver la pulpa coloreada resultante en agua, para luego consumir la mezcla antes de dormir durante ocho días.

Los beneficios del achiote no terminan en el ámbito prostático y hepático. Sus propiedades antiinflamatorias y antibacterianas también se emplean para tratar afecciones oftalmológicas como la conjuntivitis. El método tradicional consiste en remojar las hojas durante dos horas, obteniendo un gel que se aplica para lavar los ojos y combatir la inflamación y las bacterias gracias a sus compuestos bioactivos.

Para quienes deseen incorporar el achiote a su rutina, aquí se detalla una receta básica de infusión y consumo de pulpa:

Infusión de hojas secas de achiote

Cuáles son las propiedades curativas
Cuáles son las propiedades curativas del achiote
  1. Colocar 20 gramos de hojas secas de achiote en un litro de agua.
  2. Hervir durante 10 minutos y dejar enfriar

hasta alcanzar una temperatura tibia.

  1. Colar el líquido y reservarlo en un recipiente limpio.
  2. Beber como agua de tiempo durante el día, dividiendo el litro en varias tomas.

Pulpa de semillas de achiote para el hígado graso

  1. Remojar las semillas secas de achiote en agua durante una hora.
  2. Extraer las semillas, colocar en un recipiente y triturar hasta obtener una pulpa de color rojizo.
  3. Mezclar la pulpa con agua y consumir por las noches, durante 8 días consecutivos.

La aplicación tópica del gel derivado de las hojas, destinado a afecciones oculares como la conjuntivitis, requiere remojar las hojas en medio vaso de agua durante dos horas. El gel resultante sirve para lavar los ojos dos veces al día hasta completar una semana, aprovechando sus propiedades antimicrobianas y desinflamantes.

La Asociación Española de Urología advierte que, si bien la fitoterapia basada en plantas como el achiote representa un complemento valioso para mejorar la calidad de vida de muchos pacientes, su utilización nunca debe reemplazar el consejo médico profesional.

Pulpa de semillas de achiote
Pulpa de semillas de achiote para el hígado graso (Foto: Infobae México/ Jovani Pérez)

La consulta con un urólogo, hepatólogo, nutriólogo o dietista resulta indispensable antes de iniciar cualquier tratamiento tradicional o complementario. Un diagnóstico adecuado, el acompañamiento de una dieta equilibrada y la práctica regular de actividad física resultan fundamentales en la prevención y el control de la hipertrofia prostática y del hígado graso.

La riqueza de la naturaleza continúa proporcionando alternativas que se integran a la medicina moderna, pero el control sanitario y la supervisión de expertos resultan indispensables para garantizar la seguridad y la eficacia en su uso.