El platillo mexicano que refuerza el sistema inmune y beneficia a múltiples órganos del cuerpo

Esta preparación tradicional incluye múltiples ingredientes naturales que pueden ayudar a distintos sistemas del organismo

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Este platillo podría tener múltiples
Este platillo podría tener múltiples beneficios para el organismo. Foto: (Jesús Tovar Sosa/Infobae)

El mole, un platillo emblemático de la gastronomía mexicana, no solo destaca por su sabor y tradición, sino también por los beneficios que puede aportar al organismo cuando se consume de manera moderada y como parte de una dieta equilibrada.

Los ingredientes naturales que componen este alimento, como chiles, especias, semillas y, en algunos casos, chocolate, contienen nutrientes que pueden favorecer la salud de diversos órganos y sistemas del cuerpo.

El sistema inmunológico puede beneficiarse indirectamente de los compuestos bioactivos presentes en el mole. Ingredientes como los chiles, ricos en vitamina C y capsaicina, contribuyen a fortalecer las defensas del cuerpo gracias a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

Por su parte, el cacao o chocolate oscuro, si está incluido en la receta, aporta flavonoides y magnesio, esenciales para reducir el estrés oxidativo y mejorar el funcionamiento de los glóbulos blancos.

Plato de mole con pollo,
Plato de mole con pollo, un clásico de la cocina mexicana lleno de sabores intensos y especiados. - (Imagen Ilustrativa Infobae)

Asimismo, las semillas como el ajonjolí, las nueces y las almendras contienen vitamina E, grasas saludables y zinc, nutrientes clave para la producción de células inmunológicas. Las especias como la canela, el clavo y el comino también juegan un papel importante al ofrecer propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias que ayudan a regular la respuesta inmunitaria.

Además de su impacto en el sistema inmunológico, el mole puede beneficiar otros órganos. Según los especialistas, el cerebro se ve favorecido por los antioxidantes y las grasas saludables presentes en el chocolate y las semillas, que protegen las células cerebrales del daño oxidativo. El chocolate oscuro, en particular, contiene teobromina y flavonoides que pueden mejorar la función cerebral a corto plazo.

En cuanto al corazón y el sistema circulatorio, las grasas insaturadas de las semillas y nueces ayudan a reducir el colesterol LDL, mientras que la capsaicina de los chiles mejora la circulación sanguínea y reduce la inflamación.

El hígado también puede beneficiarse de ciertos ingredientes del mole, como el ajo y las especias, que poseen propiedades antioxidantes y estimulan las enzimas digestivas, facilitando la función metabólica de este órgano.

Por otro lado, el sistema digestivo se ve favorecido por especias como el comino, el clavo y la canela, que estimulan la digestión. Sin embargo, los chiles, aunque útiles en la producción de jugos gástricos, pueden no ser bien tolerados por todos los estómagos.

La cocina mexicana cuenta con
La cocina mexicana cuenta con cuenta con múltiples ingredientes que son beneficiosos para el organismo. Foto: (Imagen Ilustrativa Infobae)

A pesar de sus beneficios potenciales, el consumo de mole debe ser moderado, ya que puede ser alto en calorías, grasas y azúcares, especialmente si incluye chocolate con azúcar añadida o si se acompaña con alimentos grasosos como tortillas fritas, arroz graso o carnes con alto contenido de grasa. Estas combinaciones pueden disminuir su valor nutritivo y sobrecargar órganos como el hígado o el páncreas.

En tanto, la calidad de los ingredientes y el método de preparación son factores determinantes para que el mole conserve sus propiedades beneficiosas. Las versiones caseras, elaboradas con ingredientes naturales y sin excesos de azúcar o grasas, son las más recomendables para aprovechar sus nutrientes.

Aunque no se considera un “superalimento” ni un refuerzo inmunológico directo, el mole puede formar parte de una dieta que contribuya al fortalecimiento de las defensas y al bienestar general del organismo.