Cómo puedes dejar de roncar, según una bióloga: “Entrena tus músculos faciales”

El problema de los ronquidos suele asumirse como irreparable. El acompañante siempre busca millones de alternativas para poder conciliar el sueño, hacer ruidos para que pare el ronquido, tapones o auriculares con ruido blanco. Aunque pueda parecer que la alternativa está en el que no ronca, frenar el sonido tan molesto es posible y una bióloga explica cómo.

Se ronca cuando el paso del aire a través de la boca y la nariz se obstruye, haciendo que los tejidos blandos de la garganta vibren durante el sueño. Esta obstrucción puede deberse a factores como la posición al dormir, la relajación de los músculos, la anatomía de las vías respiratorias (como amígdalas grandes o tabique desviado), y hábitos como el consumo de alcohol, sobrepeso o alergias.

Entre un 40 y un 50% de la población adulta ronca, lo que puede parecer una lotería tiene detrás la explicación científica pero además el remedio para poder disfrutar de unas noches tranquilas de aquellos que duermen acompañados. A través de un vídeo compartido en TikTok por la bióloga Carolina, tenemos todos los remedios definitivos.

“Existen varias formas de calmar a la bestia”. El primer punto podría ser el peso, reducir la grasa del cuerpo puede ayudar a tus ronquidos porque hay menos tejido en el cuello y el aire pasa más fácilmente. Otro punto a evitar es la posición: “dormir boca arriba es como ponerle un altavoz al ronquido”, explica Carolina que lo mejor es tumbarse de lado. El consumo de alcohol antes de dormir también es muy importante evitarlo, pues relaja demasiado los músculos y eso genera la vibración del ronquido aún más potente.

La clave definitiva es entrenar los músculos faciales, de esta manera se pondrán fuertes y no se relajarán tanto cuando vayas a dormir. Es algo que pasa por alto pero si entrenas el rostro los resultados serán definitivos y un alivio para el que te rodea. Está claro que es un conjunto de factores y que cuánto más te cuides menos ronquidos tendrás. La alimentación y el consumo de tabaco también tiene mucho que ver.

La bióloga explica que para fortalecer los músculos faciales es tan sencillo como presionar la lengua contra el paladar o sacarla hacia fuera para así tonificarla. “Hazlo unos minutos al día y verás como tus ronquidos empiezan a calmarse”, concluye. Otra de las prácticas recomendadas es acompañar el movimiento con los dedos. También la técnica de poner la boca en forma de “o”, manteniendo durante un rato la mandíbula tensa y aspirando.

Con estos ejercicios poco a poco se irán disminuyendo los ronquidos, sobre todo la cantidad y el volumen. Tu cuerpo dejará menos espacio a la relajación que causa ese espacio de aire, pudiendo asó descansar todo el mundo con total tranquilidad. En definitivo, con ejercicios y cambiando de hábitos se puede dejar de roncar. Sobre todo también como alternativa antes de recurrir a la medicación ya que puedes ahorrarte en salud y en economía solamente modificando tus hábitos.