Cómo hacer dulce de leche casero: los pasos, los tiempos y el truco para lograr la textura soñada

El dulce de leche es un manjar característico de la gastronomía de América Latina y si hay un país que lo adora es, sin duda, Argentina. Tanto es así que en 2012 marcó el récord mundial por ser el estado que más consumía este producto, llegando a alcanzar los 3 kilos por habitante al año.

Las primeras referencias documentadas al dulce de leche datan del siglo XIX, aunque su origen preciso continúa siendo motivo de debate. Diversas teorías apuntan a escenarios que van desde entornos rurales hasta cocinas aristocráticas. Entre las versiones más extendidas figuran:

• Argentina: una historia habitual sostiene que en 1829, en la provincia de Buenos Aires, una criada habría dejado una olla de leche al fuego por descuido, dando origen al dulce.
• Uruguay: en este país, se le atribuye un origen vinculado a la tradición gaucha y al folclore local.
• México: existe una preparación similar conocida como caqueta, elaborada también con leche y azúcar, cuya antigüedad se considera comparable a la de otras versiones latinoamericanas.

El contexto del siglo XIX en América Latina, marcado por la presencia de colonizadores europeos y un mayor acceso a ingredientes como el azúcar y la leche gracias al comercio, favoreció la difusión y consolidación de este producto.

La receta de dulce de leche promete una salsa suave y untuosa, perfecta para múltiples usos. La técnica básica consiste en calentar una mezcla de leche y azúcar hasta espesar y caramelizar, obteniendo así su característico color y sabor.

El tiempo total de preparación es de aproximadamente 2 horas, repartidas de la siguiente manera:

• Preparación inicial: 10 minutos.
• Cocción lenta y reducción: 1 hora y 50 minutos.

• 1 litro de leche.
• 350 gramos de azúcar.
• 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio.

1. En una cacerola grande, coloca la leche, el azúcar y bicarbonato de sodio.
2. Lleva la mezcla a fuego medio y remueve constantemente para evitar que se pegue y forme grumos.
3. Cuando comience a hervir, baja el fuego al mínimo. Es fundamental mantener el fuego bajo para evitar que la mezcla se derrame o queme.
4. Continúa removiendo de manera frecuente, sobre todo, a medida que la preparación se espese y adquiera un tono marrón claro. Este proceso suele durar entre 1 hora y 1 hora y 30 minutos.
5. Cuando hayas logrado una consistencia espesa, cremosa y un color caramelo, retira del fuego. . Puedes comprobar si está listo colocando una pequeña cantidad sobre un plato frío: si al pasar el dedo la huella queda marcada y no se junta, está en su punto.
6. Deja enfriar y envasa en frascos de vidrio limpios. Asegura el cierre hermético de los frascos si prevés almacenar el dulce durante varios días.

Con esta receta conseguiremos unos 500 gramos de dulce de leche, lo que equivale a unas 10 o 12 porciones de unos 40 gramos cada una.

• Calorías: 130
• Hidratos de carbono: 24 g
• Grasas: 2,5 g
• Proteínas: 2,8 g

Es importante señalar que estas son estimaciones y que los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.

Envasado en frascos esterilizados y bien cerrados, el dulce de leche puede conservarse en la nevera hasta dos semanas.