El truco para que la lechuga dure más tiempo y no se estropee: sólo necesitas este artículo de la cocina

Con la llegada del buen clima, las ensaladas comienzan a volverse protagonistas. Sin embargo, uno de los desafíos comunes al preparar estas frescas comidas es que la lechuga se mantenga crujiente y en buen estado el mayor tiempo posible. Este alimento, debido a su alto contenido de agua, tiende a ponerse marrón y marchitarse rápidamente y, en muchas ocasiones, llegamos a jugar una batalla contrarreloj con este producto, intentando consumirlo antes de que perezca. Sin embargo, gracias a este truco, podrás olvidarte de este problema.

Un error frecuente al guardar lechuga es hacerlo en bolsas o recipientes de plástico sin una protección adecuada. Este tipo de almacenamiento propicia un ambiente húmedo que acelera el proceso de descomposición y puede incluso fomentar el crecimiento de moho. Afortunadamente, hay una solución sencilla y eficaz que puede prolongar la vida útil de la lechuga, manteniéndola fresca por más tiempo. La clave está en el papel absorbente.

Susanne, cocinera y fundadora de New South Charm, le ha explicado al medio británico Express que el truco consiste en envolver este alimento en papel de cocina antes de guardarla. Este simple paso puede absorber el exceso de humedad, evitando que las hojas se vuelvan blandas.

Lavarla bien

Antes de guardarla, es importante lavar las hojas para eliminar cualquier suciedad y reducir la presencia de bacterias. Esto no solo ayuda a preservar la frescura, sino también a prolongar su vida útil hasta una semana.

Dejarla reposar en agua fría

Llena un recipiente con agua fría y deja reposar la lechuga durante cinco minutos. Algunas personas optan por añadir una gota de vinagre, por sus propiedades antibacterianas, aunque eso es algo opcional.

Dejar secar

Escurre bien la lechuga y colócala sobre toallas de papel limpias hasta que se seque completamente. Este paso es crucial para evitar la acumulación de humedad.

Uso de una centrifugadora

Para acelerar el secado, puedes emplear una centrifugadora de ensaladas.

Almacenamiento correcto

Una vez seca, enrolla la lechuga en toallas de papel limpias y guárdala en una bolsa con cierre hermético o un recipiente (táper). Aunque el uso de una de vidrio es más recomendable, no pasa nasa si se emplea uno de plástico.

El lugar donde se guarda este alimento en la nevera también es importante. Siempre hay que dejarla en el cajón de las verduras. Este espacio está diseñado para mantener un nivel de humedad equilibrado, esencial para alargar la frescura de estos alimentos.

Existen otros métodos para alargar la frescura de la lechuga, entre ellos:

• Utilizar Vinagre Blanco o Limón: antes de almacenar, sumerge las hojas en una mezcla de agua con una pequeña cantidad de vinagre blanco o jugo de limón. Esto puede ayudar a eliminar bacterias y prolongar la frescura.
• Hojas de hierbas o laurel: colocar hojas de hierbas frescas como laurel dentro del contenedor puede actuar como un conservante natural debido a sus propiedades antimicrobianas.
• Evitar el contacto con frutas maduras: algunas frutas, como las manzanas y los plátanos, emiten etileno, que acelera la maduración de las verduras. Mantener la lechuga alejada de estos puede ser beneficioso.