Qué es el colágeno hidrolizado: beneficios y contraindicaciones

El colágeno es la proteína más abundante en el cuerpo humano y es un elemento estructural de la piel, ayuda a darle firmeza y elasticidad. Pese a representar el 30% de las proteínas que tenemos, su eficacia no dura eternamente: según pasan los años, el colágeno se pierde y provoca flacidez y adelgazamiento, así como el desarrollo de arrugas. Por su importante papel, la industria cosmética enfocada al antienvejecimiento se ha centrado en ofrecer productos que ayuden a mantener o a regenerar el colágeno en el cuerpo.

En este mercado surgen los suplementos de colágeno, complementos alimenticios en forma de cápsulas o polvo que prometen revertir los efectos del envejecimiento. Entre los más populares está el colágeno hidrolizado, pues parece tener resultados más rápidos y efectivos contra la pérdida de esta proteína.

El colágeno hidrolizado recibe ese nombre porque ha sido sometido a un proceso de hidrólisis, que descompone las proteínas en fragmentos más pequeños, conocidos como péptidos de colágeno, que son más sencillos de digerir y absorber por el cuerpo. Este colágeno se extrae normalmente de fuentes animales, como huesos y cartílagos de ganado.

A diferencia del colágeno estándar, los péptidos de colágeno se absorben más fácilmente en el intestino delgado y puede ser transportado a los tejidos que los necesitan en el cuerpo. Así, este suele destinarse para combatir la piel seca o envejecida, pero también contra la osteoporosis, la osteoartritis o para la fuerza muscular, entre otros. En cambio, el colágeno estándar es útil en aplicaciones médicas como la cirugía reconstructiva, donde se pueden usar parches o tiras de colágeno estándar para reparar tejidos dañados.

El colágeno hidrolizado es seguro cuando se toma por vía oral, siempre que no se superen las dosis recomendadas. La evidencia científica señala que es seguro consumirlo en dosis de hasta 10 gramos diarios durante un máximo de 6 meses, siendo inusual que se produzcan efectos secundarios.

Sin embargo, no hay suficiente información para saber si los péptidos de colágeno son seguros de usar durante el embarazo o la lactancia.

Los productos con colágeno han adquirido una gran popularidad en los últimos años, hasta el punto de vender cerca de 2.000 millones de euros en 2021 en Estados Unidos. Pese a su amplia popularidad, la doctora Dawn Marie R. Davis, dermatóloga de la clínica Mayo, asegura que “los estudios son inciertos en cuanto a los beneficios de consumir colágeno por vía oral".

En una revisión de 19 estudios, que contó con 1.125 personas, investigadores de Brasil hallaron indicios de que la suplementación de colágeno reducía las arrugas y mejoraba la elasticidad y la hidratación de la piel. Sin embargo, todos los suplementos analizados incluían otros ingredientes que podrían haber contribuido a esos resultados. “No sabemos si la complementación tópica u oral de colágeno es beneficiosa para fines antienvejecimiento. No existe una píldora mágica para revertir el envejecimiento”, concluye la experta. Sin embargo, en dermatología y cirugía plástica, su incorporación en inyecciones sí ha mostrado resultados contra el envejecimiento y para aportar más volumen a las capas más profundas de la piel.

Respecto a otras aplicaciones, algunas investigaciones han relacionado los suplementos de colágeno con mejoras en la movilidad articular y el dolor de rodillas y articulaciones en atletas, así como en personas con osteoartritis, pero todavía es necesario seguir investigando para conocer los detalles.