Qué debes tener en cuenta a la hora de elegir un café de cápsulas

Son muchos los que no pueden empezar el día sin tomar su taza de café. Pero cada quien elige cuál es la forma en la que quiere consumirlo. Por un lado, están los que prefieren bajar al bar de la esquina, los que abrazan la cafetera italiana y, por otro, los que han cambiado a esta última por una cafetera de cápsulas. Y es que la tecnología también ha revolucionado el mundo del café.

A día de hoy, basta con apretar un botón para disfrutar de un café en casa, caliente y lleno de sabor. Además, el mercado está lleno de cápsulas de todo tipo de variedades. Sin embargo, no vale cualquier opción.

No todos los cafés de cápsulas son iguales. Existen diferencias evidentes en cuanto al sabor, la intensidad, el tueste y el origen del grano. Cada fabricante emplea distintas técnicas de envasado, presión de extracción y materiales, lo que influye en el resultado y en la calidad final.

Además, mientras que algunas cápsulas contienen café 100 % arábica, otras combinan arábica y robusta para aportar mayor cuerpo y cafeína. Por otro lado, el método de sellado y la frescura del café molido dentro de la cápsula afectan el aroma y la crema que se obtiene al prepararlo.

La calidad de las cápsulas también varía según el proceso de producción y los ingredientes utilizados. Algunas marcas premium seleccionan granos de origen único y aplican técnicas de tostado más precisas, mientras que otras emplean mezclas más genéricas.

Para elegir un buen café de cápsula, es fundamental considerar varios factores, como el tipo de grano, el nivel de tueste y la compatibilidad con la cafetera. En general, los cafés de mayor calidad suelen estar elaborados con granos 100 % arábica, conocidos por su sabor más suave y aromático. Sin embargo, algunas mezclas incluyen robusta, que aporta más cuerpo y un mayor contenido de cafeína.

El nivel de tueste es otro aspecto clave que influye en el resultado final en la taza. Los tuestes claros conservan mejor las notas afrutadas y florales del grano, mientras que los oscuros generan un sabor más intenso y con toques amargos. En este sentido, la elección dependerá de las preferencias de cada consumidor. Además, la calidad de la extracción también varía según el tipo de cápsula. Aunque las originales de marcas como Nespresso o L’Or suelen garantizar mejores resultados, algunas opciones compatibles también ofrecen un buen desempeño. De hecho, según estudios de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), no siempre las cápsulas originales son las mejor valoradas.

Otro aspecto a tener en cuenta es la composición del café. Conviene evitar las cápsulas que incluyen ingredientes añadidos, como azúcar o saborizantes artificiales, ya que pueden modificar el sabor original del café. También es importante prestar atención a los materiales de las cápsulas, pues algunas opciones de plástico pueden afectar la calidad de la extracción y el impacto ambiental. Una buena elección debe equilibrar sabor, aroma y sostenibilidad.