Lee Byung-hun y el impacto cultural de El Juego del Calamar: “Se siente como un movimiento global”

El actor surcoreano compartió detalles sobre su experiencia en la exitosa serie de Netflix, los desafíos de interpretar múltiples identidades y el reconocimiento internacional que transformó su carrera

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La tercera temporada promete llevar la tensión al máximo con cambios radicales en el juego (Crédito: YouTube - Netflix)

Lee Byung-hun, protagonista de El Juego del Calamar, reflexionó sobre su papel como el líder en la serie de Netflix. Antes de interpretar al misterioso personaje enmascarado, ya era una figura destacada del cine surcoreano, con roles en Joint Security, I Saw the Devil, All In, Iris y Mr. Sunshine. En Hollywood participó en Terminator Genisys y G.I. Joe.

Conocido por su voz característica y su versatilidad, fue galardonado en múltiples ocasiones a lo largo de más de tres décadas de carrera. No obstante, el fenómeno global de El Juego del Calamar lo catapultó a una nueva dimensión de notoriedad.

Recientemente participó en The Tonight Show Starring Jimmy Fallon, donde dejó entrever detalles de la tercera temporada, cuyo estreno está previsto para el 27 de junio.

Cómo llegó al papel del líder

La oportunidad de interpretar al líder surgió a partir de su relación profesional con el director Hwang Dong-hyuk, con quien trabajó previamente en la película The Fortress.

Según explicó Lee a Forbes, recibió la propuesta mientras filmaba el drama Mr. Sunshine. El director le comentó que el personaje tendría una aparición breve y que solo requeriría una semana de rodaje. “Gracias a mi relación con el director, acepté. Y así empezó todo”, recordó.

En la segunda temporada se
En la segunda temporada se revela que El Líder es Hwang In-ho, un antiguo ganador de los juegos (Crédito: Netflix)

En ese momento, nadie anticipaba el alcance del proyecto. Al leer los guiones de los primeros seis episodios, el actor los consideró “muy originales, únicos y divertidos”, aunque también los percibió como arriesgados. “Pensé que podría tener mucho éxito o ser muy mal recibido por el público. Me pareció una propuesta arriesgada”, reconoció.

Cuando se le preguntó si el director había pensado desde el inicio en alguien de su perfil, Lee reveló que probablemente no. “Tal vez al principio no planeaban contratar a un actor conocido. Pero por alguna razón, el director pensó en mí y me ofreció el papel”.

A pesar de su breve aparición en la primera temporada, el actor exigió conocer a profundidad el trasfondo del personaje. “Quizás se arrepintió de haberme elegido porque le hice demasiadas preguntas”, comentó entre risas a Forbes.

De proyecto único a fenómeno global

Después de rodar la primera temporada, el director expresó su negativa a continuar. “Dijo que era su primera vez en una serie de televisión y que no quería volver a hacer algo así”, relató Lee.

Hwang Dong-hyuk llegó a perder siete dientes por el estrés de la producción. “Sumando dos más de la segunda temporada, fueron nueve”, agregó el actor.

Según Lee, el director perdió
Según Lee, el director perdió nueve dientes entre la primera y segunda temporada debido a la presión del rodaje (REUTERS/Jeenah Moon)

Sin embargo, el entusiasmo global y la presión del entorno motivaron al director a cambiar de postura. “Pasar de no tener absolutamente nada planeado para una historia futura a lograr crear algo tan entretenido demuestra su extraordinario talento”, afirmó Lee.

El desafío de interpretar tres roles

Uno de los aspectos más exigentes para Lee Byung-hun fue dar vida a tres identidades distintas: el líder, Hwang In-ho y Oh Young-il. “El hecho de que El Líder participara personalmente en los juegos con un nombre falso me pareció una idea realmente novedosa”, señaló. La sorpresa fue tal que incluso el propio actor no esperaba que su personaje se infiltrara.

El actor y el director mantuvieron numerosas conversaciones para definir el tono y la profundidad emocional de cada escena. En las primeras tomas, adoptó un enfoque sutil, intentando integrarse con los jugadores.

Lee Byung-hun destacó la complejidad
Lee Byung-hun destacó la complejidad de su papel como tres personajes en uno dentro de El Juego del Calamar (Crédito: Netflix)

Pero el director le pidió mayor expresividad. “No me sentía bien actuando así; se sentía raro. Pero al ver el monitor, pensé: ‘Bueno, esto sí que es interesante’. Así que decidí dejarme llevar, como si me hubiera hipnotizado el juego”.

En sus palabras: “Aunque El Líder tiene un objetivo mayor, debía permitirme sentir la tensión, celebrar con los compañeros cuando sobrevivíamos. Disfrutar ese momento como parte de la farsa”.

Escenas clave de la segunda temporada

Consultado por sus escenas favoritas, mencionó dos momentos que, a su juicio, sintetizan la complejidad de su personaje. El primero ocurre durante el juego Mingle, cuando debe ejecutar a otro jugador en una habitación cerrada.

Tuve que alternar entre los tres personajes. Esperaba que los espectadores sintieran cierta ambigüedad: ¿a quién están viendo realmente cuando estrangulo a alguien?”, comentó.

Lee destacó como una de
Lee destacó como una de sus favoritas la escena en que su personaje ejecuta a un jugador, obligándolo a alternar entre identidades (Captura de video: YouTube - Netflix K-Content)

La segunda escena se desarrolla cuando Gi-hun plantea una rebelión y El Líder le pregunta si deberían sacrificar a algunos por el bien común. “Cuando esboza una sutil sonrisa, sentí que ese era el momento que había estado esperando. Como si dijera: ‘Ahora tú también empiezas a pensar como yo’”.

El significado de El Juego del Calamar en su carrera

Para Lee Byung-hun, el impacto de la serie es aún difícil de dimensionar. “Todavía no puedo definir claramente qué significa para mí. Pero fue una experiencia completamente nueva”, reconoció.

Según declaró a Forbes, “el éxito de El Juego del Calamar va más allá de batir récords; se siente como un movimiento global”.

Recordó especialmente un evento en Los Ángeles, donde 2.000 fanáticos vestidos con los característicos chándales verdes lo ovacionaron fuera de un estadio. “Había trabajado en Hollywood, pero nunca había vivido algo así. Y que me recibieran de esa forma por una obra de mi país fue profundamente conmovedor”.

En una reflexión final, añadió que “ambos (El Líder y Gi-hun) pasamos por un infierno, pero tomamos caminos opuestos. Tal vez, en el fondo, una parte de mí deseaba que él tuviera razón. Que aún exista decencia humana en este mundo”.