Receta de guiso de fideos con pollo, rápida y fácil

El guiso de fideos con pollo es un platillo sencillo, lleno de sabor y muy reconfortante, ideal para esos días fríos o cuando se busca algo rápido y nutritivo. Su aroma al cocerse es inconfundible, y el contraste entre el pollo jugoso, los fideos tiernos y el caldo sabroso es perfecto.

Esta receta es un clásico de muchas casas latinoamericanas, donde se prepara de diferentes maneras según la región, pero siempre con el toque de cariño que lo convierte en una comida reconfortante.

El guiso de fideos con pollo tiene raíces muy profundas en las tradiciones culinarias de Latinoamérica y España, donde se suele cocinar con caldo casero o de pollo para intensificar los sabores. Dependiendo del país, se pueden agregar otros ingredientes como verduras, papas o incluso algún toque picante.

Este plato es versátil, rápido y económico, lo que lo convierte en una opción perfecta para el día a día, pero también es ideal para compartir en familia. Se puede acompañar con una ensalada fresca o unas rodajas de pan crujiente para completar la comida.

Este guiso de fideos con pollo es muy sencillo de preparar, ya que solo se necesitan unos pocos ingredientes para lograr un plato delicioso. El primer paso consiste en dorar el pollo en una olla grande, para luego añadir el caldo, las verduras y, finalmente, los fideos. Este guiso se cocina a fuego lento para que los sabores se mezclen perfectamente y los fideos absorban todo el caldo.

La clave de este guiso es lograr una buena cocción del pollo, que quede jugoso, y que los fideos no se pasen de cocción. Además, se puede ajustar los ingredientes al gusto de cada uno, añadiendo más o menos caldo, o incluso agregando algún ingrediente extra como zanahorias, legumbres o pimientos.

Este guiso de fideos con pollo es rápido y se prepara en aproximadamente 45 minutos:

• Preparación de ingredientes: 10 minutos
• Cocción del pollo y las verduras: 20 minutos
• Cocción de los fideos: 10 minutos

La mayoría de ese tiempo se dedica a cocer el pollo y los fideos a fuego lento para que todo se impregne de sabor.

• 4 muslos de pollo (o pechugas, según preferencia)
• 200 g de fideos (tipo cabello de ángel o fideos cortos)
• 1 cebolla mediana, picada
• 2 dientes de ajo, picados
• 2 zanahorias, peladas y cortadas en rodajas
• 1 papa, pelada y cortada en cubos (opcional)
• 1 tomate, pelado y picado
• 1 litro de caldo de pollo (puedes usar agua con caldo en cubo)
• 2 cucharadas de aceite de oliva
• Sal y pimienta al gusto
• 1 hoja de laurel (opcional)

1. En una olla grande, calentar el aceite de oliva a fuego medio. Agregar el pollo y sazónalo con sal y pimienta. Dorar el pollo por todos los lados durante unos 5-7 minutos.
2. Añadir la cebolla, el ajo, las zanahorias y la papa (si la usas). Cocinar todo junto por unos 5 minutos, removiendo de vez en cuando.
3. Incorporar el tomate picado y cocinar por 3-4 minutos más, hasta que se deshaga un poco.
4. Verter el caldo de pollo (o agua con el cubo de caldo) en la olla, agregar la hoja de laurel (si la usas) y llevar a ebullición. Reducir el fuego y dejar que todo se cocine a fuego lento durante unos 15 minutos, hasta que el pollo esté bien cocido.
5. Agregar los fideos a la olla y cocinar a fuego medio durante unos 10 minutos, o hasta que los fideos estén cocidos al gusto. Si es necesario, ajustar el caldo añadiendo un poco más de agua si se evapora demasiado.
6. Rectificar el sabor con sal y pimienta, y sirve caliente.

Con esta receta de guiso de fideos con pollo, obtendrás aproximadamente 4 porciones, dependiendo del tamaño de las raciones.

Cada porción de este guiso de fideos con pollo contiene aproximadamente:

• Calorías: 350
• Grasas: 10 g
• Grasas saturadas: 2 g
• Carbohidratos: 40 g
• Azúcares: 5 g
• Proteínas: 25 g

Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.

El guiso de fideos con pollo se puede conservar en la heladera por hasta 3 días. Asegurarse de guardarlo en un recipiente hermético para mantener su frescura. Si lo deseas, también se puede congelarlo hasta por 1 mes.