Cómo aprovechar al máximo los nutrientes de la zanahoria para cuidar tu salud visual

Consumir este vegetal aporta nutrientes esenciales que ayudan a prevenir problemas oculares y proteger la vista frente a factores como la luz azul

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El aporte de antioxidantes y
El aporte de antioxidantes y carotenoides en este alimento ayuda a reducir el daño ocular provocado por la exposición a dispositivos electrónicos y la radiación ultravioleta. Foto: (iStock)

El impacto de la zanahoria en la salud visual trasciende su presencia habitual en ensaladas y guarniciones. Este vegetal, de color anaranjado intenso, destaca por su aporte de betacarotenos, vitamina A y antioxidantes, elementos que resultan fundamentales para el cuidado de los ojos y la prevención de enfermedades asociadas a la visión.

El betacaroteno, pigmento vegetal abundante en la zanahoria, es transformado por el organismo en vitamina A. Esta vitamina desempeña un papel esencial en la retina y la córnea, ya que interviene en la producción de pigmentos visuales que permiten percibir la luz, especialmente en ambientes con poca iluminación.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la deficiencia de vitamina A figura entre las principales causas de ceguera prevenible a nivel mundial, afectando sobre todo a niños y adultos mayores. Por este motivo, la inclusión de alimentos como la zanahoria en la dieta diaria puede ayudar a evitar afecciones como la xeroftalmía, la degeneración macular y la fatiga visual.

Las propiedades de la zanahoria
Las propiedades de la zanahoria podrían ayudar a prevenir diversas enfermedades oculares. Foto: (iStock)

Además de su aporte de vitamina A, la zanahoria contiene luteína y zeaxantina, dos antioxidantes naturales que protegen los ojos frente al daño provocado por los rayos ultravioleta y la luz azul de las pantallas electrónicas. Estos compuestos contribuyen a disminuir el riesgo de enfermedades oculares vinculadas al envejecimiento, como las cataratas y la degeneración macular.

La forma de preparación de la zanahoria influye de manera directa en la absorción de sus nutrientes. Ante ello es recomendable cocinarla ligeramente y acompañarla con una pequeña cantidad de grasa saludable, como aceite de oliva o aguacate, para optimizar la asimilación del betacaroteno, ya que este compuesto es liposoluble.

Preparaciones como purés, sopas o guisos con zanahoria cocida al vapor o salteada permiten conservar sus propiedades, siempre que se eviten cocciones prolongadas que destruyan parte de sus vitaminas. Asimismo, combinar la zanahoria con alimentos ricos en vitamina E, como nueces o semillas, potencia su efecto antioxidante.

Los jugos naturales de zanahoria representan otra alternativa apreciada, aunque se aconseja no colar la pulpa, dado que en ella se concentra una parte significativa de la fibra y los fitonutrientes.

Incluir este vegetal en la
Incluir este vegetal en la dieta cotidiana ayuda a combatir diversos malestares oculares y de la salud en general. Foto: (iStock)

Añadir una pequeña porción de grasa vegetal, como una cucharadita de aceite de coco o linaza, favorece la absorción de los carotenoides. Incluir zanahoria en la alimentación diaria —ya sea en ensaladas, licuados, sopas o como snack— constituye una estrategia sencilla y natural para cuidar la salud ocular y mantener el equilibrio del organismo.

El consumo regular de zanahoria no solo aporta beneficios a la vista. Su elevado contenido de fibra, agua y antioxidantes también contribuye a la salud cardiovascular, mejora la digestión y fortalece el sistema inmunológico.

En un contexto donde la exposición a pantallas es cada vez más frecuente, la zanahoria se consolida como un recurso natural para proteger la visión y prevenir el desgaste ocular asociado al estilo de vida actual.