Esta falsa baya podría ser la clave para aliviar el dolor de huesos y articulaciones

El consumo de este fruto aporta nutrientes y compuestos que contribuyen al bienestar general

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Esta falsa baya podría ser
Esta falsa baya podría ser la clave para aliviar el dolor de huesos y articulaciones (Imagen Ilustrativa Infobae)

El interés por alternativas naturales para el alivio del dolor de huesos y articulaciones ha impulsado a la cereza negra a ganar protagonismo entre las recomendaciones de expertos en nutrición. Este fruto, conocido por su color oscuro y sabor particular, contiene compuestos antioxidantes y antiinflamatorios que, según Sabor y Nutrición de las Frutas, pueden contribuir a reducir la inflamación y el malestar articular.

La cereza negra, fruto del Prunus serotina, se caracteriza por su pequeño tamaño, tonalidad casi negra al madurar y una pulpa jugosa que rodea una única semilla dura.

¿La cereza negra es una baya falsa?

Destaca que este fruto es
Destaca que este fruto es fuente de antioxidantes (Imagen Ilustrativa Infobae)

Aunque suele asociarse a la cereza negra con las bayas, la Tabla de Composición de Alimentos aclara que se trata de una drupa, es decir, una fruta de hueso o carozo, como el durazno o la ciruela. Esta clasificación botánica se debe a la presencia de un endocarpio duro que protege la semilla central, a diferencia de las bayas verdaderas, que contienen múltiples semillas dispersas en la pulpa.

El valor nutricional de la cereza negra va más allá de su sabor, destaca que este fruto es fuente de antioxidantes, compuestos que ayudan a proteger las células frente a los radicales libres.

Además, su elevado contenido de agua favorece la hidratación, un aspecto fundamental para el funcionamiento adecuado de las articulaciones. Los azúcares naturales presentes en la cereza negra aportan energía de rápida asimilación, lo que la convierte en una opción saludable para quienes buscan mejorar su bienestar general.

La cereza negra ayuda al dolor de articulaciones

La cereza negra tiene compuestos
La cereza negra tiene compuestos antiinflamatorios para combatir el dolor (Imagen Ilustrativa Infobae)

El principal atractivo de la cereza negra en el contexto del dolor articular y óseo radica en su capacidad antiinflamatoria. De acuerdo con Sabor y Nutrición de las Frutas, los compuestos fenólicos y las antocianinas presentes en la fruta ejercen una acción que inhibe mediadores proinflamatorios en el organismo.

Esta propiedad puede contribuir a disminuir la inflamación en las articulaciones, un factor clave en la aparición de dolor y molestias. Además, el efecto antioxidante de la cereza negra protege las células del daño provocado por los radicales libres, proceso que también se relaciona con la inflamación articular.

El mecanismo de acción de la cereza negra se apoya en la presencia de compuestos fenólicos y antocianinas, responsables de su color oscuro y de su actividad antiinflamatoria. Sabor y Nutrición de las Frutas señala que estos compuestos ayudan a reducir la producción de sustancias que favorecen la inflamación, lo que puede traducirse en un alivio de los síntomas articulares.

A esto se suma el aporte de potasio y vitamina C, nutrientes que apoyan las funciones celulares y la recuperación de los tejidos, reforzando así el potencial beneficio de la cereza negra para quienes sufren molestias en huesos y articulaciones.

Para aprovechar estos beneficios, la cereza negra puede consumirse fresca, en jugos, mermeladas o postres. Sin embargo, la Tabla de Composición de Alimentos advierte sobre la necesidad de moderar su ingesta en personas con afecciones renales, debido a su contenido en potasio. Asimismo, quienes presentan antecedentes de alergia a frutas de carozo deben evitar su consumo para prevenir reacciones adversas.