Cómo preparar gelatina alta en proteína para aumentar la masa muscular con dos cucharadas de colágeno

Los postres proteicos son preparaciones balanceadas que combinan ingredientes como el yogur griego o el colágeno hidrolizado, los cuales, además de aportar dichos nutrientes, también favorecen funciones del organismo como la digestión, la salud ósea y el mantenimiento muscular, por ello, este tipo de preparaciones representa una opción práctica para quienes buscan cuidar su alimentación sin dejar de lado el sabor ni la variedad en su dieta diaria.

Un buen ejemplo es la gelatina alta en proteína, ideal para complementar un plan alimenticio orientado al desarrollo de la masa muscular. Su base es el yogur griego, un ingrediente valorado por su elevado contenido proteico y bajo nivel de azúcares, además, según la revista digital Mejor con Salud, favorece la digestión, protege el sistema cardiovascular y ayuda a fortalecer los huesos.

Además de su valor nutricional, el yogur griego destaca por su proceso de elaboración, pues a diferencia del tradicional, pasa por etapas adicionales de fermentación y filtrado, lo que le otorga una textura más espesa y cremosa, al tiempo que concentra proteínas y calcio, técnica que también reduce el contenido de agua y lactosa, haciéndolo más tolerable para personas con sensibilidad digestiva o diabetes.

En este contexto, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos informa que 100 gramos de yogur griego entero contienen 94 calorías, 8.78 gramos de proteína, 4.39 gramos de grasa, 4.75 gramos de carbohidratos y 111 miligramos de calcio, entre otros nutrientes, por lo que su consumo habitual aporta micronutrientes que muchas veces son insuficientes en la alimentación diaria.

Además de adaptarse fácilmente a objetivos específicos como el desarrollo muscular, esta preparación que aporta un perfil nutricional completo puede personalizarse con salsas de frutas naturales, como moras, frambuesas o mango, según el gusto y las necesidades de cada persona.

Compartida en Instagram por la coach de vida saludable Aura Marina Figueroa, esta gelatina es una opción nutritiva, baja en azúcar y rica en proteína, ideal para incluir como snack o postre en una dieta equilibrada.

Ingredientes:

• 1 taza de leche de almendras sin azúcar
• 1 taza de yogur griego natural (sin azúcar ni saborizantes)
• 2 sobres de gelatina sin sabor
• 2 cucharadas de colágeno hidrolizado
• Stevia o monk fruit al gusto
• ½ taza de moras congeladas
• 2 cucharadas de agua
• Unas gotas de limón

Procedimiento:

1. En una licuadora, mezcla la leche de almendras con el yogur griego hasta que quede homogéneo.
2. Agrega el colágeno hidrolizado y licúa nuevamente.
3. En otro recipiente, hidrata los dos sobres de gelatina sin sabor con dos o tres cucharadas de agua. Deja reposar dos minutos y luego derrítela a baño María o en microondas (unos segundos).
4. Agrega la gelatina disuelta a la mezcla de la licuadora.
5. Endulza con stevia o monk fruit al gusto, licúa todo por última vez.
6. Vierte en moldes y lleva a refrigerar mínimo tres horas.

Para la salsa de moras:

1. Calienta las moras con el agua, unas gotas de limón y stevia al gusto. Cocina a fuego medio hasta que se forme una compota ligera.
2. Una vez la gelatina esté firme, sirve con la salsa de moras por encima.

Una de las propiedades más reconocidas de este ingrediente es su capacidad para promover la saciedad gracias a su balance entre proteínas y grasas, lo cual resulta especialmente útil para quienes buscan controlar su peso, ya que puede ayudar a reducir la ingesta calórica total al generar una sensación de plenitud más duradera. Sin embargo, como aclara Mejor con Salud, el yogur griego no debe considerarse un agente directo para perder peso, sino un complemento dentro de un plan alimenticio equilibrado.

Sumado a ello, este producto contiene probióticos, es decir, bacterias beneficiosas que ayudan a equilibrar la microbiota intestinal y fortalecer el sistema inmunológico. De acuerdo con la publicación especializada, una flora en buen estado mejora la digestión, protege la mucosa intestinal y favorece la absorción de nutrientes.

Por último, el yogur griego ofrece beneficios cardiovasculares como se comprobó en un estudio publicado en la Revista Estadounidense de Hipertensión, citada por Mejor con Salud, la cual indica que su consumo frecuente puede reducir el riesgo de accidentes cerebrovasculares e infartos de miocardio, en especial entre personas con hipertensión.

A su vez, investigaciones de la Escuela Médica de Harvard destacan que existe una conexión directa a través del eje intestino-cerebro, una vía de comunicación influida por la microbiota intestinal, la cual puede mantenerse en equilibrio mediante el consumo regular de alimentos fermentados como el yogur griego.