Un español en Copenhague enseña “el desayuno más caro de su vida”: “Casi 40 euros, esperemos que esté bueno”

La comida más importante del día no siempre está al alcance de todos los viajeros, aunque haya multitud de combinaciones dulces y saladas

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Un desayuno en Copenhague. /
Un desayuno en Copenhague. / Freepick

Tres son las comidas diarias esenciales que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). No obstante, para muchos, el desayuno es la más importante por ser la primera y la que precede a cualquier actividad física e intelectual. Desayuno, esmorzar (de forquilla), brunch, almorzo... reciba el nombre que sea, esta primera digestión promete infinidad de combinaciones de dulce y salado que la hacen irresistible dentro y fuera de casa. Sin embargo, no siempre está al alcance de todos los bolsillos. Aún menos si supera los 40 euros.

“Puede ser que estemos hablando del desayuno más caro de mi vida, quillo", afirma Jesús Ansal en su cuenta de TikTok. “Estamos aquí por Copenhague: doscientas ochenta coronas danesas”, explica entre risas Ansal en el vídeo de la red social. En este, el joven relata su experiencia durante un viaje de ocio en el país nórdico en el cual su desayuno le costó el equivalente a 40 euros. Ansal fue más allá y mientras probaba una variedad de pasteles tradicionales sentenció: “Todos los dulces buenos que están aquí por España, vienen todos de Dinamarca”.

El creador de contenidos mencionó que pagó cerca de cuarenta euros por el desayuno, un precio que le resultó elevado. “No te puedo decir cuánto me ha costado cada uno porque es que prefiero no saberlo”, comentó Ansal al mostrar la bandeja con pasteles, cinnamon roll y pequeños dulces, todos ellos típicos de Dinamarca. Entre todas estas degustaciones, Ansal destacó la presencia del cardamomo en los productos de pastelería mientras miraba fijamente a la cámara: “A ti te gusta mucho el cardamomo”. También mencionó una galleta con coco que no fue de su agrado: “No me gusta el coco. Prefiero la de la caja metálica”, dijo, en referencia a la caja icónica asociada a las galletas danesas.

El recorrido incluyó la prueba de pasteles rellenos y dulces típicos: “Está relleno de algo que sabe como a Nutella”. Junto a otra persona que lo acompañaba, siguió degustando productos durante el almuerzo. Pese a los cuarenta euros que abonó por la comida, Ansal afirmó que había alguno de estos dulces que “era más grande que tu cara”, por lo que las raciones eran considerables para tratarse del desayuno.

En otra cafetería, el creador andaluz comentó: “Aquí me he venido aquí a otro y se acaban de cobrar ciento ochenta coronas danesas, aquí me voy a dejar el sueldo”. En el menú por el que pagó tal cantidad, probó el croissant de pistacho y el 'cardamom’ brioche, productos típicos de la repostería local, según explicó en el vídeo de la red social. “El pistacho ha llegado hasta Copenhague”, dijo en alusión a la presencia universalizada del pistacho en muchas recetas a día de hoy. No obstante, el andaluz no perdió oportunidad de valorar el coste, o sobre coste, que había pagado. “Más le vale que esté bueno”, concluyó Ansal durante su recorrido gastronómico por Dinamarca.

Dónde encontrar el café más caro con el que desayunar

En la capital de Islandia, Reikiavik, el precio del café alcanza los 7 euros por taza, posicionándose como el más elevado de Europa donde beber café. Este dato, revelado por un ranking de la plataforma británica de comparación de precios Finder, destaca que la ciudad islandesa supera a capitales como Oslo y Copenhague, donde el café también muestra precios notoriamente altos.

Así es la hamburguesa que Dabiz Muñoz ha creado para Burger King: pan de croissant, ternera Angus y salsa chutney de tomate.

Fuera de estos países nórdicos, el estudio señala que tanto Roma como París presentan costos considerablemente inferiores por el mismo producto. El informe de Finder atribuye las diferencias de precio a factores como la política fiscal local, el salario medio y el nivel de vida de cada ciudad, lo que hace que el café en las urbes del norte europeo tenga un valor hasta un 60% más alto que en los países mediterráneos.