Un español que se fue a Irlanda sin idioma ni experiencia revela cuánto cobra: “Se me metió en la cabeza que me quería ir de España”

Muchos jóvenes españoles emigran a otros países en busca de mejores condiciones laborales, pero también por ambiciones de crecimiento personal

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Un español que se fue
Un español que se fue a Irlanda sin idioma ni experiencia revela cuánto cobra: “Se me metió en la cabeza que me quería ir de España”. (Montaje Infobae España con imágenes de Canva y TikTok)

Muchos jóvenes de España emigran a otros países en busca de mejores condiciones laborales, pero también por ambiciones de crecimiento personal. Este fenómeno, marcado por la movilidad y la internacionalización del mercado de trabajo, se hace cada vez más grande, y más españoles deciden a dar el paso de mudarse lejos de su lugar de origen. Entre ellos está Guillermo Cadalso, quien desde Irlanda explica en redes sociales (@guillecadarso) cómo fue su profeso, después de haber conseguido un trabajo en el que cobrara más de 4.000 euros, a pesar de no tener experiencia ni saber el idioma local.

Su decisión de dejar España fue el punto de partida para Guillermo. Después, tuvo que enfrentarse al proceso de emigrar sin contar con una base sólida de inglés ni con experiencia profesional en el sector de la hostelería internacional. “Hace cosa de un año se me metió en la cabeza que me quería ir de España sí o sí”, empieza contando Cadalso en un vídeo compartido en redes sociales.

“Lo primero de todo, me hice un currículum en inglés”

El primer paso para mudarse consistió en preparar algunas herramientas básicas que le ayudarían a su inserción laboral en el extranjero. “Lo primero de todo, me hice un currículum en inglés”, explica Cadalso. A partir de ese momento, la clave fue la perseverancia. “Miré todos los portales de empleo que había en países europeos que me interesaba ir y empecé a inscribirme en todas las ofertas que había, pero en todas”, aclara. Entre las posiciones a las que aplicó se encontraban camarero, limpieza y jardinero.

El dominio del idioma era uno de los principales obstáculos para Guillermo, por lo que estuvo durante un mes entero estudiando inglés. “Me puse a estudiar inglés muchísimo porque no tenía ni idea y sobre todo me puse a estudiar cómo pasar entrevistas en inglés”, afirma, añadiendo que “una vez entras en un trabajo, ya te pueden echar una mano los compañeros, pero lo importante es saber pasar la entrevista”.

La gran pérdida de la clase trabajadora: sus salarios rozan el poder adquisitivo de 2019, pero ni se acercan al de hace 15 años.

Pero, por suerte, las oportunidades no tardaron en llegar. “No habían pasado ni dos semanas desde que me hice el currículum en inglés y ya me habían llamado de un hotel”, relata Cadalso. Además, el momento de la llamada fue totalmente inesperado: “Estaba volviendo de fiesta, a las siete de la mañana, un viernes, y me llamó mi jefe en Irlanda”.

Durante la conversación telefónica, le preguntaron por su experiencia como coctelero y barista, tareas que nunca había desempeñado antes. “He sido camarero muchos años en España, pero que no lo había hecho eso nunca”, reconoce. Sin embargo, optó por mostrarse confiado: “Aun así, yo le dije que yo sabía, que tal, que todo perfecto”.

“Una vez entres al trabajo intentas aprender lo máximo en los menos días posibles”

Después de esa charla, el proceso se desarrolló con rapidez. Tras superar esa primera entrevista, todo comenzó a rodar: “Me preguntó que cuándo podía ir a Irlanda, y yo le dije que para el miércoles siguiente podía estar ahí”. Todo su entorno se sorprendió ante esta inmediatez, ya que, según recuerda Cadalso, “mi familia flipando diciendo como: ‘Pero si no has pensado nada, no has planificado nada, ¿te vas a ir así de repente?’ Y yo: ‘Pues yes’”.

De igual manera, la mudanza requirió una inversión de sus ahorros y buscar de manera urgente un alojamiento, algo que consiguió antes de viajar a Irlanda. “Simplemente echándole ganas y aunque no tengas experiencia ni sepas el idioma, te pones a estudiar por tu cuenta y una vez entres al trabajo intentas aprender lo máximo posible en los menos días posibles”, declara Cadalso. Por último, concluye dejando claro que siempre merece la pena arriesgarse: “¿Qué es lo peor que puede salir? Que no te cojan, que te despidan y que tengas que buscar otro trabajo… Si ya estás en otro país, ya te toca echar para adelante”.