Pollo alla cacciatora in bianco: un clásico de la cocina italiana donde predominan los ingredientes del campo

Este guiso prescinde de tomate, lo que consigue que se disfrute al máximo el sabor del pollo y los vegetales que lo acompañan

Guardar
Pollo alla cacciatora in bianco.
Pollo alla cacciatora in bianco. (Adobe Stock)

El Pollo alla Cacciatora in Bianco encarna la esencia de la cocina casera italiana: sabores profundos, técnicas sencillas y productos locales de gran calidad. Esta versión “in bianco” se distingue por su ausencia total de tomate, logrando un guiso fragante donde predominan el vino blanco, las hierbas y los vegetales, lo que permite saborear la carne en toda su pureza. Su nombre proviene del término “cacciatore”, que significa cazador, y sugiere que este plato nació en las cocinas rurales del norte y centro de Italia, donde los ingredientes del campo son protagonistas.

A diferencia de la variante con tomate tan popular en las regiones del sur, el Pollo alla Cacciatora in Bianco se cocina principalmente en Toscana y Umbría. Suele servirse con polenta o pan rústico, y no es extraño encontrarlo en las mesas familiares durante los meses otoñales. Opcionalmente, en algunas zonas se agregan aceitunas negras o alcaparras para un toque más intenso.

Receta de Pollo alla Cacciatora in Bianco

La receta del Pollo alla Cacciatora in Bianco utiliza una técnica de guisado lento, donde el pollo se dora primero y luego se perfuma con verduras aromáticas y vino blanco seco. El resultado es un plato jugoso, con una salsa clara y untuosa que resalta los aromas del romero y laurel frescos.

Tiempo de preparación

  • Preparación de ingredientes: 15 minutos
  • Dorado y sofrito: 15 minutos
  • Cocción lenta: 40-50 minutos
  • Tiempo total estimado: 1 hora 20 minutos

Ingredientes

  • 1 pollo entero troceado (pueden usarse muslos y contramuslos)
  • 3-4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • 2 dientes de ajo, pelados
  • 1 cebolla grande
  • 2-3 ramas de apio
  • 2 zanahorias
  • 1 vaso de vino blanco seco (aprox. 200 ml)
  • 2-3 ramitas de romero fresco
  • 2 hojas de laurel
  • Sal y pimienta negra al gusto
  • Aceitunas negras (opcional)
  • Alcaparras (opcional)

Cómo hacer Pollo alla Cacciatora in Bianco, paso a paso

Pollo alla Cacciatora (Adobe Stock)
Pollo alla Cacciatora (Adobe Stock)
  1. Lava y seca bien el pollo. Corta la cebolla, el apio y la zanahoria en trozos pequeños.
  2. En una cazuela amplia, calienta el aceite de oliva a fuego medio-alto. Añade los trozos de pollo y dóralos por todos lados durante unos 10 minutos. Asegúrate de sellar bien el pollo para conservar sus jugos.
  3. Retira el pollo y resérvalo. Si es necesario, añade un poco más de aceite. Sofríe la cebolla, el ajo, el apio y la zanahoria hasta que estén blandos y ligeramente dorados.
  4. Incorpora nuevamente el pollo, añade el romero, el laurel, sal y pimienta al gusto. Remueve para integrar los sabores.
  5. Sube el fuego y desglasa la cazuela con el vino blanco. Remueve mientras evapora el alcohol durante 2-3 minutos.
  6. Baja el fuego al mínimo, tapa la cazuela y cocina durante 40-50 minutos. Remueve ocasionalmente y añade un poco de agua o caldo si la salsa se reduce demasiado.
  7. En los últimos 10 minutos, puedes añadir aceitunas negras y/o alcaparras para potenciar el sabor.
  8. Sirve el pollo caliente, regado con la salsa, acompañado de pan rústico o polenta.

¿Cuántas porciones rinde esta receta?

Esta receta rinde aproximadamente para 4 personas adultas.

¿Cuál es el valor nutricional de cada porción de esta receta?

  • Calorías aproximadas: 450 kcal
  • Proteínas: 35 g
  • Grasas: 25 g
  • Carbohidratos: 8 g
  • Azúcares: 3 g
  • Sodio: 600 mg
  • Fibra: 2 g

Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.

¿Cuánto tiempo se puede conservar esta preparación?

Puedes conservar el Pollo alla Cacciatora in Bianco en recipiente hermético en la nevera por hasta tres días. También puede congelarse ya cocinado por un máximo de dos meses. Al recalentarlo, es recomendable hacerlo a fuego suave y añadir un poco de agua o caldo si la salsa se ha espesado demasiado.