Blanca Contreras, experta en vino, revela la clave para elegir el que más te guste: “Piensa en frutas”

Pese a que el mundo vinícola puede resultar complejo, existe un método sencillo para descubrir cuál es el mejor vino blanco y escoger entre el albariño, el verdejo y el godello

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España es uno de los países más reconocidos cuando se trata de la calidad de sus vinos. Aquí tienes los mejores.

Ya sea en una comida o cena especial, para acompañar unos aperitivos o, incluso, para relajarse y darse un respiro, el vino se ha convertido en el acompañante perfecto en un sinfín de situaciones. Pero lo cierto es que esta bebida no suele ser del gusto de todos, a menudo, porque no es fácil elegir el que más te gusta. Precisamente, sobre esta cuestión reflexiona la experta Blanca Contreras, quien trata de esclarecer el mundo vinícola, que suele resultar complejo, al estar repleto de tecnicismos y sabores que no siempre son sencillos de descifrar.

La especialista en vino comparte en un vídeo publicado en Instagram, a través de la cuenta @lacrimaterrae, una guía práctica y accesible para distinguir entre tres reconocidas variedades de vinos blancos: albariño, verdejo y godello. Contreras invita a acercarse al mundo vinícola sin presiones, fomentando la curiosidad y la exploración personal, para descubrir preferencias y transformar cada copa en un momento placentero. Y es que mensaje central destaca que el propósito fundamental de esta bebida es el disfrute.

¿Albariño, verdejo o godello? El truco para elegir el mejor vino blanco

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Existen tres reconocidas variedades de vinos blancos: albariño, verdejo y godello. (Freepik)

De acuerdo con Blanca Contreras, elegir un vino blanco adecuado puede parecer una tarea compleja. La experta comparte un método sencillo: “Siempre que llego a un bar y pido un vino, el camarero pregunta: ‘¿Albariño, verdejo o godello?’ Y mi respuesta era: ‘el que esté más bueno’. Hasta que descubrí la clave: pensar en frutas. El albariño recuerda a la manzana verde, resulta muy refrescante y tiene un punto cítrico. El verdejo también aporta ese matiz cítrico, pero resulta un poco más dulce. Y el godello se asemeja a una pera, destaca por su suavidad, menor acidez y menor dulzura”.

Albariño, con origen en Rías Baixas (Galicia), resalta por su marcada acidez y una frescura que lo vuelve ideal junto a pescados y mariscos. Por su parte, el verdejo, característico de la DO Rueda, combina notas dulces y herbáceas con una frescura persistente, lo que aporta complejidad aromática y equilibrio. El godello, presente sobre todo en el noroeste español, propone una sensación suave y redondeada, menos ácida, que acompaña sin dificultad desde pescados hasta carnes blancas.

Dentro del mundo vinícola, el vino blanco figura entre las alternativas más versátiles y ligeras, gracias a aromas afrutados y frescos, resultado de una fermentación controlada sin contacto con las pieles. Elaborado principalmente con uva blanca, aunque a veces también con uvas tintas de piel clara, se distingue por su claridad y baja intensidad, cualidades que lo hacen ideal para quienes prefieren sabores más sutiles. Además, es la elección predilecta en verano y para maridar con platos ligeros como mariscos, ensaladas o pescado.

Cómo tiene que servirse el vino

Un buen queso marida a
Un buen queso marida a la perfección con un vino blanco. (Cortesía/Iván Martínez Photo)

La temperatura al servirlo resulta fundamental para experimentar plenamente los matices de un vino blanco: lo recomendable oscila entre 8 ℃ y 12 ℃, rango que permite disfrutar sus aromas y frescura. El tipo de copa también influye: lo ideal es optar por una de volumen medio y boca estrecha, que potencia la concentración aromática y preserva el carácter ligero. Si la botella permanece abierta, la mejor práctica es taparla bien y guardarla en el frigorífico, donde conservará su calidad uno o dos días adicionales.

Con el método que propone Blanca Contreras—apoyado en asociar cada vino a una fruta y en reconocer matices individuales—, la próxima elección entre albariño, verdejo o godello se transforma en una oportunidad de descubrir cuál armoniza mejor con cada momento y preferencia. Así, cada sorbo encuentra su espacio para disfrutarse sin prisa, guiado por la curiosidad y la seguridad de entender las diferencias esenciales entre estas variedades.