Una azafata de vuelo renuncia a su trabajo tras ser captada 12 veces por encima del límite de alcoholemia: “Me siento muy avergonzada”

Los síntomas evidenciaron los graves problemas que llevaba arrastrando con el alcohol

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Una azafata colocando una maleta
Una azafata colocando una maleta en un avión. (Shutterstock España)

Jessica Kostakopoulou, empleada de Scandinavian Air, llegó un día a trabajar oliendo a alcohol. Además, parecía inestable y fuera de sí. Una persona del equipo de asistencia de vuelo alarmó a toda la terminal. “Tenía dificultad para caminar o terminar una frase”, han declarado los testigos. La azafata declaró estar sobria para poder abordar el vuelo en la terminal 2 de Londres-Heathrow. La mujer defendía con firmeza ante el equipo de seguridad que no había tomado ningún tipo de sustancia ni contenido alcohólico. Pero, según informa el periódico británico The Indepent, “estaba muy borracha”.

Tras esto llegó la policía. A pesar de las negativas de la azafata por demostrar que no estaba ebria, las autoridades le realizaron un test al instante. La prueba de alcoholemia arrojó un resultado que no sorprendió a nadie de los presentes. Kostakopoulou tenía una tasa de alcohol en sangre de 0,25 g/L, 12 veces superior al límite autorizado para el personal de la aerolínea (0,02 g/L).

La mujer de 43 años ha trabajado a lo largo de dos décadas en el sector de la aviación. En la empresa actual acababa de cumplir dos años de contrato sin problemas anteriores. Tras el incidente fue ella misma la que renunció a su puesto de auxiliar de vuelo y declaró que se sentía muy avergonzada por lo sucedido ante el tribunal. En el juicio, se demostró que no se causaron daños a terceros y que su arrepentimiento era “genuino”. La buena reputación de la trabajadora y las declaraciones de compañeros redujeron el valor de la multa. Un total de 623 libras esterlinas, que al cambio con euros equivale a 720. Sin embargo, además de la cantidad económica establecida como sanción, se le suman los costos legales a pagar en cuotas mensuales.

Imagen creada con IA de
Imagen creada con IA de un avión volando por el cielo.

Mirada hacia el futuro

Son numerosos casos los de personas que han perdido el trabajo de toda la vida por un mal día. “Estoy intentando cambiar mi vida y empezar un nuevo trabajo. Lo siento mucho”, confesó ante el tribunal la acusada, que se declaró culpable de todos los cargos. Ahora ha dejado toda su carrera atrás para empezar en un sector nuevo y focalizada en cambiar esos hábitos que ya han hecho que pierda una parte fundamental de su vida. La actitud positiva y la voluntad de modificar su conducta han hecho que los cargos disminuyeran, pero las consecuencias han seguido siendo muy graves.

Dos jóvenes hackean las televisiones de un avión para jugar al Mario Kart. (TikTok/Les French Twins)

Ahora, a sus 43 años su vida ha dado un giro de 180 grados y aunque se mantiene en la privacidad, la exazafata se encuentra por lo menos al margen de problemas legales. La compañía ha continuado volando con normalidad después del incidente y todo ha vuelto poco a poco a una rutina ordinaria. El debate público hizo eco y visibilizó una vez más lo peligroso que es superar los límites de las bebidas alcohólicas. Los comentarios en redes sociales se han llenado de anécdotas e historias parecidas donde parece ser que la azafata solo ha puesto nombre a un problema existente.