Este es el truco para congelar el pan y que luego esté crujiente

Un método que pocas personas conocen y que conseguirá que el pan se mantenga tan crujiente como el primer día

Guardar
Pan - VisualesIA
Pan - VisualesIA

Congelar el pan suele ser una solución práctica para evitar desperdicios, pero pocas veces se logra conservar su textura y sabor original. Sin embargo, un truco sencillo y al alcance de todos está revolucionando la forma de preservar el pan en casa: envolverlo en un paño de cocina ligeramente húmedo antes de guardarlo en el congelador.

El pan es uno de los alimentos que más fácilmente pierde su frescura. Una vez cortado o expuesto al aire, su miga se seca y su corteza pierde el atractivo crujiente que tanto gusta. Aunque los métodos más comunes de congelación —envolverlo en plástico o papel de aluminio— pueden protegerlo de las quemaduras del congelador, suelen dar como resultado una corteza blanda y húmeda al descongelarlo.

En consecuencia, muchas personas terminan desechando pan que no se consume a tiempo. “Recuerdo haber tirado media hogaza después de comprar más de la que podíamos comer en un día porque simplemente no se conservaba fresca”, cuenta una usuaria que asegura haber cambiado sus hábitos gracias a este método.

Cómo hacer masa madre para preparar nuestro propio pan en casa, siguiendo los consejos de los panaderos.

Cómo funciona el nuevo truco de congelación

El secreto está en la preparación previa. En lugar de usar materiales plásticos, se envuelve el pan en un paño limpio y apenas humedecido, lo suficiente para mantener la humedad adecuada sin provocar condensación. A continuación, se introduce en una bolsa de congelación con cierre hermético, dejando una pequeña abertura para permitir la circulación del aire.

Esta técnica logra un equilibrio perfecto: evita tanto el resecamiento como la formación de hielo en la superficie. Además, no requiere elementos adicionales ni materiales contaminantes. Basta con lo que ya tenemos en casa.

Paso a paso para congelar el pan

  • Selecciona un pan denso o artesanal. Panes como los de masa madre, de estilo rústico o con corteza gruesa funcionan especialmente bien.
  • Humedece un paño de cocina limpio, escurriéndolo bien hasta que esté apenas húmedo, sin gotear.
  • Envuelve el pan completamente con el paño, cubriendo todas sus superficies.
  • Introduce el pan en una bolsa para congelador, saca la mayor cantidad de aire posible y deja una pequeña apertura sin cerrar por completo.
  • Coloca la bolsa plana en el congelador. Cuando vayas a consumirlo, solo tendrás que retirarlo, desenvolverlo y dejarlo descongelar a temperatura ambiente. Si lo deseas aún más crujiente, puedes darle un toque rápido en el horno.
Una canasta rústica con pan
Una canasta rústica con pan vienés de chipotle, crujiente por fuera y suave por dentro, sobre una mesa de madera. - (Imagen Ilustrativa Infobae)

Opiniones de los usuarios

Dorothy Clippingdale, madre de tres hijos y entusiasta de la cocina casera, explica su experiencia: “Durante años luché por mantener el pan fresco hasta que probé este truco. Ahora, mi pan sale del congelador casi tan crujiente como el día que lo compré”.

Este método no solo mejora la calidad del pan congelado, sino que contribuye a reducir el desperdicio alimentario y el uso de materiales no reciclables como el film transparente o el papel de aluminio. Además, permite conservar productos horneados durante más tiempo sin alterar su sabor ni textura.

El método en otros alimentos

Este truco no se limita solo al pan. También puede aplicarse a otros productos de bollería, como croissants, panecillos o pasteles caseros, ajustando la humedad del paño según la densidad del alimento.

Es una solución ideal tanto para quienes cocinan grandes cantidades en casa como para quienes desean planificar sus comidas semanales con antelación.