Doctor Alexandre Olmos, especialista en medicina interna: “Los gases intestinales frecuentes pueden ser el primer síntoma de que algo no va bien en tu intestino”

El especialista advierte de que la presencia frecuente de flatulencias, acompañadas de dolor abdominal o mal olor, puede indicar un desequilibrio entre bacterias beneficiosas y fermentadoras en el sistema digestivo

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Una persona con dolor de
Una persona con dolor de estómago. (Adobe Stock)

Los gases intestinales suelen considerarse una molestia cotidiana, pero en ocasiones pueden ser señal de que algo no funciona correctamente dentro del sistema digestivo. Para el doctor Alexandre Olmos, especialista en medicina interna y epigenética, estos pueden ser indicadores clave de desequilibrios y de patologías difíciles de detectar.

A través de su cuenta de TikTok (@dr.alexandreolmos) desde donde hace divulgación médica, Olmos advierte sobre la importancia de prestar atención a estos síntomas. “Los gases no son solo algo molesto o vergonzoso, son una señal fisiológica de que tu sistema digestivo puede estar alterado y muchas veces el primer síntoma de que algo no va bien en tu intestino”, explica en uno de sus videos.

El especialista detalla que la frecuencia de los gases, junto al dolor abdominal o el mal olor, podría estar relacionado con una alteración en la microbiota intestinal pues “las bacterias buenas están en desventaja y las que fermentan ganando espacio”. El desequilibrio entre las bacterias beneficiosas y las que causan fermentación puede favorecer la aparición de síntomas digestivos que indican un trastorno subyacente.

SIBO o intolerancias alimentarias

La presencia constante de gases después de consumir alimentos considerados saludables podría indicar cuadros más complejos. “Si aparecen después de comer alimentos sanos como frutas, verduras o legumbres, podrías tener un sobrecrecimiento bacteriano conocido como SIBO o intolerancias alimentarias, también incluso inflamación intestinal crónica”, sostiene Olmos. El sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado (SIBO, por su sigla en inglés) y las intolerancias alimentarias son condiciones que requieren diagnóstico y seguimiento médico.

Además, el especialista resalta la relación entre las molestias digestivas y la absorción de nutrientes. “Y si además sientes hinchazón, fatiga o digestión lenta, no estás absorbiendo bien esos nutrientes y eso impacta directamente en tu metabolismo, tus hormonas y tu energía diaria”.

Episodio: SIBO.

Cómo se diagnostica el SIBO

El Dr. Gonzalo Gómez, jefe de Servicio del Aparato Digestivo en el Hospital Quirónsalud San José, brinda información sobre el SIBO en un artículo publicado en la web de la compañía sanitaria. Gómez explica los síntomas principales del esta afección incluyen molestias o dolor abdominal, distensión, flatulencias, diarrea, estreñimiento y malabsorción de ciertos nutrientes. La dificultad del diagnóstico se debe a que estos signos pueden confundirse con otras afecciones gastrointestinales de origen funcional.

Entre los factores de riesgo más frecuentes se incluyen determinados medicamentos, alteraciones anatómicas, problemas de motilidad intestinal, enfermedades sistémicas y afecciones del sistema inmune. El SIBO también se asocia a otras patologías funcionales como la dispepsia y el síndrome del intestino irritable. El diagnóstico del SIBO se realiza mediante un test que emplea soluciones de lactulosa o glucosa para identificar la presencia de metano e hidrógeno en el aire espirado por el paciente. Las bacterias en exceso generan estos gases al metabolizar los carbohidratos de la dieta. Estos estudios pueden producir resultados falsos positivos o negativos, por lo que su interpretación debe hacerse en el contexto clínico adecuado.

El tratamiento se basa en el uso de antibióticos. La Rifaximina esuno de los más utilizados. Si se identifica una causa subyacente, debe tratarse de forma específica. Existen también alternativas dietéticas, como una alimentación baja en FODMAP (oligosacáridos, disacáridos, monosacáridos y polioles fermentables), que ayuda a reducir los síntomas.