Alberto Chicote revela cómo es la relación con sus padres: “Se sienten muy orgullosos de mí y no es porque salgo en la tele”

El famoso chef y presentador de televisión se sincera en el podcast de “Tengo un plan” y habla de la relación con sus padres

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Alberto Chicote en una fotografía
Alberto Chicote en una fotografía de archivo (WEB Puertaisol)

Alberto Chicote nació a principios del verano de 1969 en Madrid. Vecino del barrio de Carabanchel Alto, confiesa sentirse muy vinculado a este lugar, por las huellas que dejó en su persona. Durante sus primeros 30 años habitó las calles del barrio, donde descubrió su amor y pasión por la cocina. Fue con 17 años que empezó a formarse en el arte de la gastronomía.

Desde muy pequeño tuvo muy claro que quería dedicarse a ello. Casi como si hubiera estado siempre ahí, una pasión que trascendía cualquier otra y a la que estaba dispuesto a entregarse por completo. Se matriculó en la Escuela de Hostelería y Turismo de Madrid y aprendió de grandes referentes suyos del mundo de la cocina, a los que continúa admirando.

Pero no solo estuvo en España, viajó a otras partes del mundo como Suiza, donde pudo perfeccionar su técnica. En 1995 volvió a nuestro país donde trabajó como chef del restaurante El cenachero. Aquí se enfrentó a un gran reto: reinterpretar la cocina de Andalucía. En 1999 se puso al frente del restaurante NODO en dónde, fusionó la cocina tradicional española con la cocina japonesa.

En 2012 fue el año dónde saltó a la televisión con Pesadilla en la cocina, un programa que no solo lo catapultó a la fama, sino que también marcó el inicio de una fructífera trayectoria en el medio. Un año más tarde, en 2013, consolidó su presencia en la pequeña pantalla con Top Chef, convirtiéndose en una de las caras más reconocibles del panorama televisivo español. Dos años más tarde, en 2014, Alberto Chicote cumplió uno de los grandes sueños de todo chef: abrir su propio restaurante en Madrid. Así nació Yakitoro, un innovador concepto gastronómico que fusiona la tradición japonesa con el sabor español. En 2016, dio un paso más en su carrera al inaugurar, junto a Pedro Olmo, la Taberna PuertalSol.

Alberto Chicote en la grabación
Alberto Chicote en la grabación del programa 6 de Batalla de Restaurantes (ATRESMEDIA)

Un Chicote más íntimo

Recientemente, Alberto Chicote fue invitado al podcast “Tengo un plan” presentado por Sergio Beguería y Juan Domínguez. Se trata de una de las últimas propuestas audiovisuales de emprendimiento y crecimiento personal. El propósito del podcast es inspirar a los oyentes a trazar sus propios objetivos y dar pasos concretos para alcanzarlos, a través de consejos y testimonios reales de quienes ya han recorrido ese camino. Chicote era un ejemplo perfecto de emprendedor que, gracias a su formación continuada y persistente, había acumulado un éxito capaz de motivar y dar ejemplo a otros.

Invitado al podcast "Tengo un
Invitado al podcast "Tengo un plan" donde habla de su trayectoria y de su familia (Fuente: TikTok)

En el podcast habló de su trayectoria y su ímpetu por buscar oportunidades. “He sido un tipo inquieto siempre, me han pasado cosas desde que era un chaval, he estado buscando que me ocurran cosas”, declaró en el podcast confirmando un espíritu enérgico y proactivo. Explicó que ese deseo por hacer cosas es el que le ha permitido, no solo vivir experiencias extraordinarias y diferentes, sino también tener éxito en el mundo de la cocina. Siempre ha sido una persona llena de inquietudes que, ha medida que iba creciendo, cambiaban, permitiéndole enfrentar nuevos desafíos.

El episodio se puso más emotivo cuando Chicote habló de su familia, concretamente de sus padres. Confesó que hablaba mucho con ellos, en primer lugar, porque siempre lo había hecho. Además, reconoció que se sentían muy orgullosos de él, pero no porque saliera en la tele o tuviera varios restaurantes a su nombre, sino porque se había convertido en la persona que ellos siempre habían querido y deseado que fuese. “Eso, poniendo las cosas en orden, hace que te sientas bien, muy bien”, concluyó satisfecho.