Un abogado explica qué es la “estafa del buen empleado”: “Te ponen bajo presión y utilizan elementos bastante buenos para engañarte”

El TSJ de Canarias avaló la improcedencia del despido de una empleada estafada por delincuentes que se hicieron pasar por su supervisor y le exigieron un pago urgente

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Qué es la “estafa del
Qué es la “estafa del buen empleado”. (Montaje Infobae España/TikTok/Canva)

En la era digital, las estafas que se realizan a través de llamadas o mensajes se han convertido en una amenaza constante, y ahora hasta han llegado al ámbito laboral. Tanto empleados como empresas deben prestar atención a cualquier comunicación inesperada, sobre todo cuando les soliciten dinero, datos confidenciales o les pidan que realicen pagos urgentes. Muchos fraudes se camuflan como gestiones rutinarias de trabajo, lo que los hace aún más difíciles de detectar.

Uno de estos engaños, conocido como la “estafa del buen empleado”, ha llegado hasta los tribunales en España. El abogado laboralista, popularmente conocido en redes sociales como Un Tío Legal (@laboral_tips), advierte de un caso reciente resuelto por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias. Según detalla el letrado, “la estafa del buen empleado” se produce cuando una persona externa se hace pasar por un superior jerárquico de la empresa e instruye al trabajador para que realice un pago urgente y supuestamente necesario para la compañía.

“Te dicen que existe un gasto muy importante que hacer en la empresa”

“El sistema consiste en que a los trabajadores les suelen llamar telefónicamente y se hacen pasar por su superior”, explica el experto. La estrategia de los estafadores está muy estudiada y se basa en la presión psicológica y la urgencia. “Son bastante concienzudos y lo que te dicen es que existe un gasto muy importante que hacer en la empresa. Puede ser por impuestos, por algo de la gestoría, por unos equipos informáticos que van a llegar. En este caso quería recargar unas tarjetas PIN”, describe.

Las consecuencias pueden afectar gravemente tanto al trabajador como a la empresa. En el caso analizado por el TSJ de Canarias, una empleada fue despedida tras haber entregado 250 euros a quien creía que era su supervisor, víctima de una estafa detallada y convincente. No obstante, el despido fue declarado improcedente por el tribunal. El abogado señala: “Y me dirás, ¿Cómo puede ser improcedente? Pues porque el tribunal ha considerado lo primero que existía un engaño suficiente”.

El experto destaca los factores que los magistrados tuvieron en cuenta al juzgar el caso. Por un lado, el engaño estuvo bien orquestado y el trabajador se vio obligado a actuar bajo presión. Según él, “el modus operandi de los engaños suele ser telefónicamente. Te ponen bajo presión, utilizan elementos bastante buenos para engañarte. Incluso hay veces que han utilizado la voz de algunos jefes para poder convencerte”.

La Policía Nacional difunde un nuevo vídeo con consejos para el ciudadano, esta vez frente a las estafas.

Además, el tribunal ponderó el puesto de trabajo de la afectada. “El grado de responsabilidad no es el mismo que el que fuera un responsable, un coordinador. Por lo tanto, se valora qué cargo tenía y cómo actuó. Y lo más importante también, no se han contravenido las normas de la empresa”, apunta el letrado. En empresas en las que no exista una prohibición expresa sobre la realización de pagos o gestiones económicas por parte de los empleados, la responsabilidad del trabajador puede ser limitada.

“Si te llaman diciendo que se tiene que hacer un pago, no lo hagas o cuelga y llama a tu supervisor”

El abogado insta a estar preparados para afrontar este tipo de situaciones y ofrece recomendaciones clave: “Ante todo si te llaman diciendo que se tiene que hacer un pago, no lo hagas o cuelga y llama a tu supervisor, el que tú tengas contacto”. En caso de haber sido víctima de la estafa, aconseja denunciarlo de inmediato: “Si lo has hecho, denuncia en cuanto te des cuenta de que es una estafa. Ve a la policía y pon una denuncia”.

El experto subraya la importancia de las instrucciones internas en la empresa. Si la compañía ha comunicado explícitamente que ningún trabajador está autorizado a efectuar pagos, un despido derivado de este tipo de error podría considerarse procedente por los tribunales. “Luego, para que se declare improcedente, se tendrá que valorar el cargo que tienes en la empresa. Y luego si existían instrucciones expresas sobre si tú podías hacer pagos o no. Si existen correos electrónicos, circulares en la que dicen que nadie está autorizado a hacer algún pago, te puedo asegurar que el despido va a ser procedente”.

El caso resuelto por la justicia canaria pone el foco sobre la vulnerabilidad de los empleados ante fraudes que aprovechan la rutina y la buena fe en el entorno laboral. Según el abogado, el perjuicio económico fue bajo, pero la sentencia reconoce “la falta de culpabilidad de la trabajadora y por qué la engañaron”.