Más platos preparados y menos fruta fresca en la dieta española: cae el consumo un 30% debido al precio de los alimentos y los nuevos hábitos

También ha disminuido la compra de pan, pescado o leche frente a los procesados que aumentan cinco kilos per cápita

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El consumo en la última
El consumo en la última década: un 30 % menos de frutas frescas y más platos preparados (Canva)

En la última década, la dieta de los españoles ha experimentado cambios significativos, reflejados en el descenso del consumo de fruta fresca. De acuerdo con datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), la compra pasó de 90,2 kilos por persona en 2016 a 64,4 kilos en 2025. Este dato representa una disminución del 30% que contrasta con el aumento en la popularidad de los platos preparados en los hogares españoles.

La transformación de los hábitos alimenticios tiene diversas causas, siendo fundamentales la irrupción del teletrabajo, las nuevas tendencias dietéticas y la subida de precios de los alimentos, que ha sido de un 2,9% en el último año hasta marzo de 2025. Este reajuste en la cesta de la compra ha impactado directamente sobre otros productos básicos, revelando tanto ganadores como perdedores en esta evolución. De forma notable, los alimentos frescos han sufrido una disminución en sus niveles de consumo, mientras que algunos productos procesados han logrado consolidar su presencia en la dieta diaria de los españoles.

Los productos menos consumidos

El descenso en el consumo de frutas frescas encabeza la lista de retrocesos alimentarios. Algo más de 25,8 kilos per cápita se han recortado en diez años, según muestran las cifras del MAPA. A este grupo se suman otros productos como el pescado, cuyo consumo ha caído de 14,4 kilos por persona en 2016 a 9,22 kilos, y la leche líquida, que ha registrado una disminución de 10,9 litros por persona en el mismo periodo.

Una mujer realiza la compra
Una mujer realiza la compra y pasa por la sección de frutería.

Además, el consumo de pan ha disminuido en 7,11 kilos por cliente, denotando un cambio cultural y dietético en torno a este alimento básico tradicionalmente presente en la mesa española. Por otro lado, los zumos también han registrado una bajada significativa, de 10,1 litros per cápita a 5,57 litros, casi a la mitad en la última década.

Despunte de nuevos hábitos y consumo

Contrariamente a la tendencia a la baja de ciertos alimentos frescos, los platos preparados han incrementado su consumo, pasando de 12,9 a 17,47 kilos per cápita. Este incremento refleja un aumento de más de 5 kilos, evidenciando cómo la conveniencia y tiempo de preparación pesan cada vez más en la decisión de compra.

Expertos esperan que los precios de las frutas y verduras frescas suban debido a la creciente guerra comercial.

En línea con esta tendencia, los frutos secos y el agua envasada también han visto crecer su presencia en los hogares españoles. Mientras que el agua envasada ha incrementado en 5,3 kilos per cápita, los frutos secos han subido de 2,9 a 3,58 kilos, consolidándose como una opción saludable y práctica en la dieta diaria de muchos españoles. La panorámica actual de los hábitos alimenticios en España refleja la influencia de la vida moderna, los cambios en el estilo de vida y las nuevas demandas nutricionales.

A pesar de estas variaciones, existen productos que han mantenido una estabilidad notable en su consumo. Alimentos como el café, las infusiones, el arroz, la pasta y las legumbres han registrado mínimas fluctuaciones, con incrementos o descensos de apenas unas décimas, e incluso caso como el del arroz, que mantiene los niveles de hace diez años.

*Noticia elaborada con información de EFE