Alex Russell, de The Bear a Lurker: “Solo quería completar un guion de cien páginas, no tenía otro plan”

Por primera vez en su carrera, Alex Russell enfrentó el desafío de dirigir un largometraje sin experiencia previa en el set.

A sus 34 años, el guionista y productor de series como The Bear y Beef dio el salto al cine con Lurker, un thriller psicológico ambientado en la escena musical de Los Ángeles.

La película tuvo su estreno mundial en el Festival de Sundance, donde recibió elogios de la crítica y fue adquirida por Mubi en una disputada negociación.

Ahora, tras su estreno en Berlín, Russell reflexiona con Variety sobre el proceso de creación de la cinta y su inesperada entrada en la dirección.

El germen de Lurker surgió en la primera semana de la pandemia de 2020. Con la industria del entretenimiento paralizada, Russell decidió aprovechar la pausa para escribir su primer guion de largometraje.

“Fue un proceso catártico, sentí que estaba purgando algo sobre mi entorno”, explica el director. Sin embargo, la idea inicial no contemplaba llevar la historia a la pantalla: “Solo quería completar un guion de 100 páginas. No había un plan para que se hiciera”.

La trama sigue a Matthew (Théodore Pellerin), un empleado de tienda que entra en el círculo íntimo de Oliver (Archie Madekwe), un cantante pop en ascenso.

A medida que su relación se profundiza, la historia toma un giro oscuro, explorando la dinámica de poder y competencia dentro del mundo musical. Russell asegura que, aunque la historia está dramatizada, las situaciones que plantea son verosímiles.

“Algunas personas me han dicho que la película es demasiado realista, mientras que otras piensan que es inverosímil. Pero si dices que esto es imposible, es porque no conoces este mundo”.

El proceso de casting fue crucial para transmitir la tensión psicológica de la historia. Para el papel de Oliver, el director buscaba a alguien con carisma, pero también con vulnerabilidad.

“Si solo parecía una estrella pop arrogante, la película se quedaría plana. Archie tiene una cualidad que te atrae, te hace querer gustarle”, explica Russell sobre Madekwe, quien recientemente se destacó en Saltburn.

El personaje de Oliver está inspirado en varios músicos contemporáneos de la escena indie y pop alternativo, entre ellos Kevin Abstract (Brockhampton), Dijon, Rex Orange County y Dominic Fike.

De hecho, Dijon y Rex Orange County escribieron una de las canciones de la película, reforzando la autenticidad del personaje. La decisión de que Oliver fuera británico surgió tras elegir a Madekwe.

“Nos preguntamos si cambiar su nacionalidad afectaba la historia y nos dimos cuenta de que la hacía aún más interesante”.

Por otro lado, Pellerin fue el primer actor en enviar una audición para Matthew y, según Russell, su interpretación lo convenció de inmediato.

“Tiene algo fascinante. Puedes ver lo que está pensando, pero nunca sabes exactamente qué hará después. Su actuación mantiene el misterio y la ambigüedad que queríamos para el personaje”.

Más allá del thriller psicológico, Lurker es un retrato de las dinámicas de poder en la escena musical de Los Ángeles.

Russell, quien ha estado inmerso en ese mundo, quiso exponer la competitividad y los juegos de influencia que rigen el ascenso al estrellato.

“Es un microcosmos donde las jerarquías se crean arbitrariamente, como en una fraternidad o un programa de posgrado. Todos luchan por posicionarse”.

Para reforzar la autenticidad, el director contó con la colaboración de Zack Fox y Kenny Beats, ambos figuras reconocidas en la escena musical. Fox, amigo cercano de Russell, aporta humor y realismo con su participación en el elenco.

Kenny Beats, por su parte, se encargó de la banda sonora y la música original, trabajando de manera espontánea en el estudio con otros músicos invitados.

“Fue un proceso muy natural”, recuerda Russell. “Le dije a Kenny: ‘Necesitamos unas canciones para Archie’, y dos días después ya teníamos la versión final”.

La banda sonora no solo complementa la historia, sino que también refleja el estilo DIY (hazlo tú mismo) de la música que Oliver representa.

Tras su aclamado estreno en Sundance, Lurker entró en una batalla de ofertas entre distribuidoras. Finalmente, Mubi se quedó con los derechos de la película por una cifra de siete cifras.

Russell explica que la decisión se basó en la visión que la compañía tenía para el filme. “No queríamos que se comercializara como una película de terror cuando no lo es. Mubi entendió que la historia es más compleja de lo que parece en la superficie”.

De cara al futuro, Russell planea tomarse el 2025 para escribir su próximo proyecto. “Ahora que entiendo lo que significa dirigir, el próximo puede ser un desastre total”, bromea.

Sin embargo, está seguro de que seguirá explorando un tono similar al de Lurker. “No quiero alejarme demasiado de lo que acabo de descubrir”.

Con su primera película, Alex Russell ha demostrado ser una voz emergente en el cine independiente.

Lurker no solo ha puesto su nombre en el mapa, sino que también ha abierto una conversación sobre la competitividad, la manipulación y el costo del éxito en la industria musical. Su futuro en el cine apenas comienza.