Qué efecto tienen las fotos de animales en los vínculos digitales, según un estudio

Una investigación reveló que estas imágenes podrían cumplir un papel clave en la forma en que las personas se relacionan

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Compartir imágenes de animales adorables
Compartir imágenes de animales adorables en redes sociales cumple una función social (Imagen Ilustrativa Infobae)

Mandar la foto de un gato con cara graciosa o un perro disfrazado puede parecer un gesto trivial, pero según una nueva investigación, realizada por la Universidad Concordia detalla que enviar o publicar fotos de animales tiernos en redes sociales tiene un peso emocional más profundo del que imaginamos: funciona como un mecanismo para mantener y profundizar las relaciones personales.

El artículo titulado Digital Affective Encounters: The Relational Role of Content Circulation on Social Media, publicado en el Journal of Consumer Research editado por Oxford University, analiza cómo la creación y circulación de contenido digital —particularmente el centrado en animales— genera flujos afectivos que sostienen y transforman las relaciones entre consumidores, tanto interpersonales como parasociales, es decir, vínculos unilaterales con figuras o cuentas mediáticas.

Imágenes de animales para comunicar emociones

Para explicar este fenómeno, los investigadores introdujeron el concepto de “pebbling digital”, una expresión que describe cómo compartir imágenes de animales adorables en redes sociales cumple una función social análoga a la de los pingüinos que entregan piedras a sus parejas como símbolo de compromiso.

Los especialistas explican que, así como los pingüinos seleccionan piedras para expresar cuidado y afecto, los humanos utilizarían contenido animal para comunicar emociones en el entorno virtual. Según consignó Newsweek, esta práctica digital refuerza los lazos entre usuarios y fortalece las comunidades en línea, más allá de su aparente carácter superficial.

Compartir fotos y videos de
Compartir fotos y videos de animales es una experiencia que provoca emociones positivas y fortalece vínculos (Imagen Ilustrativa Infobae)

El informe también revela que aproximadamente el 50% de los usuarios globales de redes sociales utiliza estas plataformas principalmente para mantenerse en contacto con familiares y amigos. Este dato, citado por Newsweek, resalta la importancia de los contenidos emocionales en la vida digital cotidiana.

El proceso de circulación de imágenes de animales

El estudio describe un proceso en tres etapas que explica cómo circula el contenido animal en línea. La primera es la “indexicalización”, donde se toma una imagen, GIF o video de un animal y se le añade un componente simbólico, como un hashtag o una leyenda, que expresa una relación personal con el contenido.

Luego ocurre la “reindexicalización”, cuando el contenido es compartido dentro de un grupo específico, generando un “encuentro tecnoafectivo”. Esta etapa agrega nuevas capas emocionales al mensaje y contribuye a la construcción de una comprensión compartida e identidad grupal.

Finalmente, en la “descontextualización”, el contenido pierde su vínculo personalizado y se transforma en memes o publicaciones universales, aptas para un público amplio. Así, lo que comenzó como un mensaje íntimo se convierte en un fenómeno viral. Según Newsweek, este proceso demuestra el papel activo de los animales en la creación de comunidades virtuales.

El estudio describe un proceso
El estudio describe un proceso en tres etapas que explica cómo circula el contenido animal en línea (Imagen Ilustrativa Infobae)

La circulación de fotos de animales, en un fenómeno social

Sobre el artículo, que se basa en la tesis de maestría de Ghalia Shamayleh, profesora adjunta en la ESSEC Business School de Francia; la coautora del estudio, Zeynep Arsel, profesora en la Escuela de Negocios John Molson, destacó: “La creación, el consumo y la circulación de fotos de animales se ha convertido en un fenómeno social. Ha trascendido con creces la publicidad de animales y productos animales”.

Asimismo, el estudio concluye que compartir fotos y videos de animales —frecuentemente acompañados de etiquetas tiernas o textos humorísticos— genera un “encuentro afectivo digital”: una experiencia que provoca emociones positivas y fortalece vínculos.

Los investigadores entrevistaron a creadores de contenido, administradores de páginas temáticas y seguidores, y se basaron también en experiencias personales con sus propios animales para ilustrar cómo estas imágenes se expanden en una red afectiva digital.

La coautora del estudio añadió que el marco conceptual planteado no se limita a los animales, y asegura que “es aplicable a otros tipos de contenido, como fotos de comida o de niños adorables. Explica algo que hacemos con frecuencia sin darnos cuenta: compartir para conectar”.