Cómo las estafas de trabajo en línea logran engañar a miles de personas en la búsqueda de empleo cada día

Expertos en ciberseguridad de Eset advierten sobre tácticas cada vez más complejas, desde la gamificación hasta la suplantación de identidad, que dificultan distinguir entre una oferta legítima y un engaño

Guardar
Las estafas de tareas en
Las estafas de tareas en línea se multiplican y generan millones en pérdidas para quienes buscan empleo. - (Imagen Ilustrativa Infobae)

Una nueva advertencia mundial está haciendo la compañía de ciberseguridad, Eset, sobre estafas laborales que logran persuadir a quienes buscan ingresos adicionales o mejores oportunidades de empleo. Ahora, los ciberdelincuentes han perfeccionado sus métodos para aprovecharse de quienes buscan empleo.

“Todo termina, en general, en un pedido de transferencia de dinero a los estafadores, con la excusa de que es necesario ese paso para ‘liberar’ el cobro de la supuesta remuneración. Puede parecer increíble. Pero es más fácil caer en la trampa de lo que se piensa, y en ocasiones, hemos visto como los estafadores, hacen pagos parciales, para convencer a la víctima de que es un trabajo legítimo”, advirtió Camilo Gutiérrez Amaya, jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica.

Las cifras recientes ilustran la magnitud del problema. Solo en 2024, las estafas de empleo falso denunciadas al FBI generaron más de 264 millones de dólares en ganancias para los defraudadores, según datos recopilados por ESET.

El auge de los fraudes
El auge de los fraudes laborales digitales obliga a extremar precauciones y verificar la legitimidad de las ofertas. (Imagen ilustrativa Infobae)

Este fenómeno, lejos de ser aislado, se ha expandido a través de nuevas modalidades, entre las que destacan las llamadas “estafas de tareas”. En estos fraudes, los delincuentes ofrecen supuestos trabajos que consisten en realizar acciones simples en línea, como dar vistas a creadores de contenido en plataformas como YouTube o TikTok, o comentar en publicaciones de productos en sitios como Amazon o MercadoLibre. La promesa de ganancias rápidas y tentadoras es el anzuelo principal.

Estafas de tareas o trabajos sencillos con un SMS

El auge de las estafas de tareas ha sido vertiginoso. De acuerdo con la Comisión Federal de Comercio (FTC), durante la primera mitad de 2024 se registraron 20.000 casos de este tipo de fraude, una cifra que cuadruplica los 5.000 casos reportados en todo 2023.

ESET detalla que estas estafas suelen comenzar con un mensaje de texto no solicitado, ya sea a través de WhatsApp, Telegram, SMS o redes sociales. El mensaje promete dinero fácil a cambio de tareas sencillas en línea, como “tareas de promoción de productos” u “optimización de aplicaciones”, aunque rara vez se ofrecen detalles concretos sobre el supuesto empleo.

Expertos en ciberseguridad advierten sobre
Expertos en ciberseguridad advierten sobre nuevas modalidades de engaño que utilizan plataformas y criptomonedas. - (Imagen Ilustrativa Infobae)

El proceso de engaño está cuidadosamente diseñado. Una vez que la víctima muestra interés, se le solicita que realice tareas mundanas, como dar “me gusta” a contenidos en línea o hacer clic en combinaciones de botones en un sitio o aplicación, que muchas veces resulta ser una versión falsa de una plataforma legítima, como Temu.

A medida que la persona avanza, puede observar cómo sus “ganancias” aumentan en la interfaz del sitio o la aplicación. Sin embargo, en algún punto, el sistema exige que la víctima “cargue” o “suba de nivel” su cuenta, o que “desbloquee las ganancias” ingresando dinero, generalmente a través de criptomonedas.

“En esto consiste realmente toda la estafa. Una vez que se realiza el pago, el dinero desaparece y no habrá forma de recuperar esas ganancias falsas”, explicó Gutiérrez.

Las víctimas de estafas laborales
Las víctimas de estafas laborales sufren pérdidas económicas y emocionales, según datos de ESET y organismos oficiales. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Cómo engañan los estafadores invitando a trabajar

El engaño puede sofisticarse aún más: los estafadores suelen invitar a la víctima a un chat grupal donde supuestos compañeros comparten historias de éxito y ganancias, pero en realidad, todos forman parte de la red de fraude. Esta estrategia busca reforzar la credibilidad del esquema y persuadir a la víctima para que entregue sus fondos.

El fenómeno de las estafas de tareas no es el único método que emplean los ciberdelincuentes para captar víctimas en el ámbito laboral. Existen otras variantes igualmente peligrosas. Una de ellas son los anuncios de empleo falsos, que a menudo aparecen incluso en sitios de contratación legítimos. Estos anuncios buscan atraer la atención de los candidatos y obtener sus datos personales, además de solicitar dinero bajo pretextos como gastos administrativos, formación o controles policiales.

Otra táctica frecuente consiste en el envío de mensajes no solicitados que ofrecen atractivas oportunidades laborales, haciéndose pasar por agentes de contratación. El objetivo, nuevamente, es obtener información personal y, en muchos casos, dinero. Incluso la publicación de un currículum en un portal de empleo puede convertirse en una puerta de entrada para los estafadores, quienes contactan a las víctimas aparentando ser reclutadores legítimos.

Se recomienda nunca responder a
Se recomienda nunca responder a ofertas de trabajo no solicitadas. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Señales de alerta para evitar estafas laborales

ESET ha identificado una serie de señales de advertencia que pueden ayudar a las personas a protegerse de estos fraudes. Entre las recomendaciones más importantes se encuentran: nunca responder a ofertas de trabajo no solicitadas, ya que los reclutadores legítimos utilizan canales formales para contactar a los candidatos; investigar a fondo la empresa o el agente de contratación si se recibe un contacto tras publicar un currículum en un sitio de empleo; y desconfiar de cualquier oferta que parezca demasiado buena para ser cierta.

“Recordar que si una oferta de trabajo es demasiado buena para ser verdad, probablemente lo sea”, afirmó Gutiérrez; la ausencia de un proceso formal de entrevista es otra señal de alerta, así como cualquier solicitud de pago por adelantado para acceder a un supuesto empleo. Los reclutadores legítimos nunca exigen dinero a los candidatos como condición para ser contratados.

La protección de la información personal y financiera es fundamental. Se recomienda no compartir datos confidenciales con “reclutadores” que se comuniquen a través de canales no oficiales, ya que estos datos pueden ser vendidos a otros estafadores o utilizados para suplantar la identidad de la víctima. La compañía subraya que la prevención y la cautela son las mejores herramientas para evitar caer en este tipo de trampas.