Así actúa el candado molecular que mantiene inactivos los óvulos por años y protege la fertilidad

El hallazgo sobre la función de 4E-T y su interacción con otras proteínas abre nuevas perspectivas para el estudio de la insuficiencia ovárica prematura y otros trastornos reproductivos

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Científicos identifican la proteína 4E-T
Científicos identifican la proteína 4E-T como clave para mantener inactivos los óvulos inmaduros (Imagen Ilustrativa Infobae)

Durante décadas, la biología reproductiva intentó descifrar el mecanismo que permite a los ovocitos —los óvulos inmaduros— conservarse en un estado de latencia durante años dentro del cuerpo femenino, hasta que llega el momento de su maduración fértil. Esta capacidad resulta fundamental para preservar la fertilidad y evitar trastornos como la insuficiencia ovárica prematura.

Un equipo de investigadores de la Universidad de Constanza, en colaboración con la Universidad de Gotinga, logró identificar la proteína 4E-T como el componente decisivo que sostiene este “freno biológico”, un hallazgo que ofrece nuevos caminos para la comprensión y el tratamiento de alteraciones reproductivas. El estudio fue publicado en la revista Nature Communications.

Cómo la proteína 4E-T actúa como guardiana de los óvulos

En el corazón de este proceso se encuentra la proteína 4E-T, responsable de bloquear la “traducción” en los ovocitos que aún no han alcanzado la maduración. En términos sencillos, la traducción es el paso en el que la célula transforma la información del ARN mensajero (ARNm) en proteínas, que son esenciales para la función y el desarrollo celular.

En ese sentido, 4E-T interrumpe este proceso, permitiendo que los ovocitos permanezcan en reposo durante extensos períodos.

Esta singularidad de la biología femenina se inicia en la etapa embrionaria y se mantiene después del nacimiento, a la espera de la señal biológica que, en la pubertad o más adelante, marcará el comienzo del ciclo reproductivo. En este largo intervalo de latencia, es como si los óvulos fueran semillas hibernando, preparadas para germinar únicamente cuando las condiciones del cuerpo lo solicitan.

El hallazgo sobre 4E-T abre
El hallazgo sobre 4E-T abre nuevas perspectivas para tratar la insuficiencia ovárica prematura y otros trastornos reproductivos (Imagen Ilustrativa Infobae)

Hasta el descubrimiento de este grupo alemán, permanecía sin explicación la razón por la que el ARN mensajero acumulado en los ovocitos no derivaba en la fabricación de proteínas de manera anticipada. Según Thomas Mayer, genetista molecular y coordinador de la investigación, el verdadero desafío era entender cómo se lograba ese bloqueo tan efectivo que impide la maduración prematura de los ovocitos.

Experimentos que revelan el “interruptor” de la maduración ovocitaria

Para poner a prueba el papel crucial de 4E-T, los científicos eliminaron esta proteína en ovocitos inmaduros extraídos de ranas y ratones. Sin la presencia de 4E-T, los mensajes almacenados en el ARN comenzaron a transformarse de inmediato en proteínas, desatando una cascada de reguladores que aceleran el desarrollo del óvulo hacia etapas más avanzadas; es equivalente a soltar de golpe el freno de mano de un vehículo, permitiendo que avance bruscamente.

La proteína 4E-T actúa como
La proteína 4E-T actúa como freno biológico, bloqueando la maduración prematura de los ovocitos (Freepik)

Un avance determinante derivó de la colaboración con Florian Stengel, experto en espectrometría de masas, quien ayudó a monitorizar la creación masiva de proteínas tras la ausencia de 4E-T. Así, el equipo constató que controlar cuidadosamente la traducción durante este periodo es clave para mantener la viabilidad de los óvulos y garantizar una fertilidad adecuada cuando llega el momento biológico.

Más allá de su función aislada, 4E-T actúa en conjunto con la proteína PATL2, presente exclusivamente en los óvulos inmaduros. Ambas conforman el núcleo de una sofisticada red de control, al combinarse para unirse a secuencias específicas de ARN y bloquear selectivamente la producción de proteínas.

La interacción de 4E-T y PATL2 funciona como un “candado molecular” que preserva la latencia ovocitaria, solo desbloqueado por señales precisas que indican el inicio de la fertilidad.

Este descubrimiento tiene especial relevancia porque se han detectado mutaciones en el gen que codifica la proteína PATL2 asociadas a infertilidad en mujeres jóvenes, lo que sugiere que el equilibrio entre ambas proteínas es esencial para la salud ovárica y la prevención de fallos reproductivos.

Nuevas perspectivas clínicas: insuficiencia ovárica y preservación de la fertilidad

El equipo alemán también indagó en las consecuencias médicas vinculadas a su hallazgo. Se sabe que alteraciones en el gen que produce 4E-T pueden provocar problemas como la insuficiencia ovárica prematura, caracterizada por una menopausia anticipada y dificultades para concebir antes de los cuarenta años.

La evidencia indica que deficiencias en 4E-T pueden desequilibrar el freno de la maduración ovocitaria, lo que deriva en la pérdida anticipada del potencial fértil femenino.

Este conocimiento podría habilitar el desarrollo de estrategias innovadoras para conservar la reserva ovárica y tratar situaciones de infertilidad originadas en el fallo del mecanismo de latencia ovocitaria. Por ejemplo, en el futuro podrían diseñarse terapias que imiten la acción bloqueadora de 4E-T para proteger los óvulos en contextos médicos críticos, como tratamientos de cáncer o procedimientos avanzados de reproducción asistida.

La interacción entre 4E-T y
La interacción entre 4E-T y PATL2 conforma un candado molecular que preserva la latencia ovocitaria (Freepik)

Un salto adelante en la comprensión de la fertilidad

El aporte de este trabajo es fundamental para comprender los complejos mecanismos que rigen el ciclo reproductivo femenino. Al descifrar la función de 4E-T y su interacción con otras proteínas como PATL2, la ciencia da un paso firme hacia el entendimiento detallado del “reloj biológico” que regula la vida fértil de las mujeres.

Este avance no solo aporta nuevas herramientas para diagnosticar y enfrentar trastornos de fertilidad, sino que permite imaginar estrategias personalizadas para la protección reproductiva, la planificación familiar y la búsqueda de soluciones a casos de insuficiencia ovárica prematura. Descifrar la pausa de los óvulos es mucho más que resolver un enigma biológico: es allanar el camino hacia mejor calidad de vida y nuevas esperanzas para quienes desean ser madres.