Estos dos ingredientes realzan el sabor de los huevos fritos: no es la sal ni el comino

El huevo es un alimento que se adapta a diferentes formas de preparación. El huevo frito es una de las más apreciadas por su sencillez. Al freírlo, se crea una capa dorada y crujiente que rodea la yema, que permanece suave.

Este tipo de huevo es especialmente popular en las primeras horas del día, cuando se busca una comida rápida y nutritiva. Es común acompañarlo con pan o arroz, y su versatilidad lo convierte en un plato fácil de integrar en diversas comidas.

Para intensificar su sabor, algunos añaden una pizca de sal y pimienta o especias como el pimentón. Otros incorporan un poco de queso rallado o hierbas frescas, que, al fundirse sobre la yema caliente, enriquecen el perfil del plato y ofrecen una textura aún más interesante.

Emma Laperruque, experta culinaria, ha compartido un truco para realzar el sabor del huevo frito. Según ella, el secreto está en usar aceite de oliva extra virgen junto con hierbas aromáticas, una combinación que realza el sabor y lleva este plato a otro nivel.

La chef sugiere que las hierbas pueden variar según el gusto individual de cada persona. Por ejemplo, los amantes de la cocina pueden freír un huevo con menta, eneldo, orégano, tomillo o cebolleta. Es preciso señalar que la receta original recomienda salvia.

Según comenta, la clave está en experimentar con diversas combinaciones para encontrar la mezcla que mejor se ajuste a las preferencias personales.

En cuanto al aceite de oliva extra virgen, se puede usar cualquier marca, ya que lo importante es que sea de buena calidad. La riqueza de su sabor, junto con sus propiedades saludables, contribuye a realzar el huevo frito sin necesidad de marcas específicas.

Los huevos fritos son un clásico que nunca pasa de moda, pero con un toque de creatividad, pueden elevarse a nuevas alturas. Una forma sencilla de mejorar su sabor es utilizar ingredientes que intensifiquen su aroma y textura. A continuación, te mostramos cómo preparar un huevo frito con aceite de oliva extra virgen y hierbas aromáticas.

Comienza calentando una sartén pequeña a fuego alto. Añade el aceite de oliva extra virgen y deja que se caliente hasta que adquiera un brillo característico. Luego, incorpora las hierbas seleccionadas y fríelas por unos segundos, permitiendo que liberen sus aromas.

Reduce el fuego a medio-alto y añade el huevo a la sartén, dejándolo cocinar en la mezcla de aceite y hierbas. Esto asegurará que el huevo se impregne de los sabores.

Muchas personas intentan evitar que el huevo frito se pegue a la sartén con trucos comunes, como agregar mucho aceite o mantequilla, o calentar la sartén a fuego bajo. Otros prefieren usar espátulas de silicona o incluso cubrir la sartén con papel encerado. Sin embargo, estos métodos no siempre funcionan. Por eso, existe una forma más efectiva de evitar que los huevos se peguen.

Primero, calienta la sartén a fuego medio, asegurándote de que esté lo suficientemente caliente para cocinar bien el huevo, pero sin llegar a sobrecalentarse. Luego, añade una pequeña cantidad de aceite, justo lo suficiente para cubrir el fondo de la sartén.

Después, espolvorea una capa fina de harina de trigo sobre el aceite, distribuyéndola de manera uniforme. Coloca el huevo con cuidado sobre la harina, sin moverlo durante unos minutos, para que se cocine de manera pareja.

Finalmente, podrás retirar el huevo fácilmente con una espátula, sin que se rompa ni se quede pegado. Al final, notarás que la sartén queda limpia y no tendrás problemas para manipular el huevo.