
Nuevamente el Gobierno argentino volvió a condenar a Israel sin mencionar a las organizaciones terroristas de la Yihad Islámica y Hamás, que lanzaron más de 600 misiles en menos de 48 hs hacia territorio israelí.
Por su parte, las organizaciones centrales de la comunidad judía repudiaron rápida y fuertemente el comunicado.
La Cancillería igualó a la única democracia en Medio Oriente con organizaciones terroristas en su comunicado.
A esta altura no sorprende el tenor del comunicado del Gobierno, ya que es coherente con las distintas publicaciones que viene haciendo a través del tiempo en cada conflicto.
No ocurre lo mismo con cada uno de los atentados terroristas que se suceden a diario en Israel, que destruyeron familias enteras cuando asesinaron a dos hermanas y su madre, a un soldado en una parada de colectivo, a turistas italianos en una playa o a jóvenes que estaban tomando una cerveza en un bar, entre tantos otros. Allí no hubo condena ni repudio.
Te puede interesar: Enérgico repudio de la Embajada de Israel a la Cancillería: “Ninguna democracia dejaría pasar en silencio el lanzamiento de misiles”
Israel defiende su territorio y quiere vivir en paz. Los terroristas quieren la destrucción de Israel. Si nos basamos en esos dos principios, no hay discusión posible.
Cuando las fuerzas israelíes ingresan a Gaza por tierra o por aire, lo hacen para eliminar riesgos para su país y su pueblo. Las detenciones selectivas (muchas veces se transforman en eliminación por el ataque a las fuerzas por parte de los líderes terroristas) apuntan directamente a las cúpulas terroristas y la llevan a cabo. No a los civiles como sí hacen las organizaciones terroristas.
En cambio, cuando un terrorista palestino ingresa a Israel, lo hace para matar al que se le cruce en el camino.
Si nos basamos en esto, no hay discusión posible.
Te puede interesar: Qué es la Yihad Islámica Palestina y en qué se diferencia de Hamas
Cuando escuchamos o vemos insultos o pintadas contra los judíos o Israel (como sucede muchas veces con aquellos que copian y pegan o repiten como loros) atribuimos en muchas oportunidades a la ignorancia. De la misma manera que los cánticos antisemitas “tribuneros” en el fútbol. No saber lo que se dice o se hace.
Pero cuando proviene de un gobierno nacional en el que antisionismo es notorio en muchos de sus funcionarios, cuando se está alineado con Irán y Venezuela, cuando se exime a las organizaciones terroristas de responsabilidad en el conflicto, cuando sólo se condena a Israel en sus comunicados, o desde la banca de la legislatura se pide la «disolución del Estado de Israel», no es ignorancia, es antisemitismo. Y en esto, no hay discusión posible.
Seguir leyendo:
Últimas Noticias
El Estado, a contramano a los usuarios
La autogeneración de energía eléctrica beneficia al usuario y al sistema nacional, pero el Estado castiga al inversor en lugar de incentivarlo

El Genocidio armenio: un crimen sin fin
La persecución sistemática y la destrucción cultural iniciada en 1915 continúan resonando como un llamado de conciencia internacional frente a la impunidad

Una elección para sobrevivir
La multiplicación de listas revela la crisis interna de los principales partidos. El PRO, que supo ser fuerza dominante, enfrenta en su bastión una amenaza que pone en juego su futuro como estructura nacional

Hispanoamérica atrapada en el fuego cruzado de Trump y Xi
El avance de proyectos chinos y la presión diplomática estadounidense reavivan viejas tensiones y abren interrogantes sobre el futuro estratégico de la región

El tiempo en la era digital y el servicio de justicia
En un mundo donde las decisiones se toman a la velocidad del click, el sistema judicial, aún sujeto a estructuras del siglo XIX, resulta cada vez más incompatible con las expectativas sociales
