El alimento que es rico en vitamina B3, ácido fólico y potasio y se recomienda lo mismo para niños y adultos

Llevar una dieta balanceada siempre representa un reto para las familias mexicanas, pues las encargadas del hogar tienen que buscar opciones en los mercados y recauderías para adquirir los mejores alimentos, y así preparar los guisos adecuados para cubrir las necesidades alimenticias.

Siempre se recomienda un consumo adecuado de vitaminas y minerales para prevenir enfermedades de cualquier tipo. Una de ellas es la vitamina B3, la cual es esencial para el correcto funcionamiento del cuerpo. También participa en múltiples procesos metabólicos, especialmente en la conversión de los alimentos en energía.

El consumo natural de este tipo de vitaminas, así como el consumo de ácido fólico y potasio pueden contribuir a mantener una dieta balanceada, así como una vida saludable. Por ello es importante saber en qué alimentos están presentes estos nutrimientos. Existe un tubérculo con grandes niveles de vitamina B3, ácido fólico y potasio.

La papa es un alimento versátil y ampliamente consumido en el mundo que destaca por sus propiedades nutricionales, de acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, este tubérculo tiene grandes beneficios en la alimentación.

Se trata de una fuente importante de carbohidratos complejos, principalmente almidón, que brindan energía de forma sostenida al organismo. Este tubérculo es naturalmente bajo en grasas, lo que lo convierte en una opción saludable cuando se prepara de manera adecuada.

Si se consume de manera regular y cotidiana se obtienen grandes niveles de nutrientes como vitamina C, B, B3, B6, ácido fólico, magnesio, manganeso, hierro y potasio. También, posee un 20% de almidón y cerca del 70% de agua, su cáscara tiene 2% de fibra.

Este tubérculo es naturalmente bajo en grasas, lo que lo convierte en una opción saludable cuando se prepara de manera adecuada. Entre sus componentes esenciales, la papa es rica en vitamina C, desempeñando un papel clave en el fortalecimiento del sistema inmunológico y en la formación de colágeno para la piel y los tejidos.

Asimismo, contiene importantes minerales como el potasio, indispensable para el equilibrio de los fluidos corporales y la regulación de la presión arterial, y el magnesio, que contribuye al buen funcionamiento muscular y nervioso.

La papa también es una fuente de fibra dietética, especialmente cuando se consume con su piel, ayudando a mejorar la salud digestiva y promoviendo un sistema intestinal saludable. Si bien su contenido proteico es moderado, aporta aminoácidos esenciales que contribuyen a una dieta balanceada. Además, algunas variedades de papa poseen antioxidantes como flavonoides, carotenoides y antocianinas, compuestos que ayudan a combatir el daño oxidativo en las células.

Es importante considerar que el método de preparación influye directamente en el aporte nutricional de la papa. Prepararla hervida, al vapor o al horno potencia sus beneficios, mientras que freírla incrementa significativamente su contenido calórico y de grasas. Por estas razones, la papa destaca como un alimento integral, nutritivo y adaptable a diversas culturas y tradiciones culinarias.