Cuáles son los beneficios de incluir en tu dieta licuado de mango con manzana

Como bien sabemos los licuados con formas sencillas y efectivas de obtener varios nutrientes y beneficios con una sola toma.

Es por eso que siempre se recomienda tener diferentes opciones de licuados para conocer cuáles son las mejores combinaciones de ingredientes según los objetivos que buscamos obtener.

En este caso traemos para ti la recomendación de un batido que combina dos ingredientes de elevado valor nutricional, como lo son el mango y las manzanas y que puedes usar particularmente en momentos en que necesites energía como una opción más saludable a bebidas azucaradas u otros postres. Aquí te contamos un poco sobre su valor nutricional.

A pesar de que no se recomienda como una opción para el día a día, debido a que puede ser elevado en azúcar, sí es una gran opción para momentos en que requieras energía extra de manera natural. Los siguientes son algunos de sus beneficios:

1. Aporte de vitaminas y minerales: El mango es rico en vitamina C y vitamina A, mientras que la manzana aporta fibra, antioxidantes y pequeñas cantidades de vitamina C y potasio. Esto favorece el sistema inmunológico, la piel y la salud general.
2. Propiedades antioxidantes: Ambos frutos contienen compuestos antioxidantes que ayudan a combatir el estrés oxidativo y proteger las células.
3. Mejora de la digestión: La fibra natural de ambos frutos ayuda a regular el tránsito intestinal y a prevenir el estreñimiento.
4. Energía natural: La combinación proporciona azúcares naturales que aportan energía, ideal para empezar el día o como refrigerio.
5. Hidratación: Por su alto contenido de agua, este licuado contribuye a mantener el cuerpo hidratado.

Ingredientes:

• 1 manzana (de preferencia roja o gala)
• 1 mango maduro (tipo ataulfo o el de tu elección)
• 1 vaso de agua (250 ml) o leche (puede ser entera, vegetal o deslactosada)
• Opcional: hielo al gusto
• Opcional: una cucharadita de miel (si deseas endulzar, aunque no es necesario)

Instrucciones:

1. Lava bien la manzana y el mango. Si prefieres, puedes pelar la manzana, aunque su cáscara aporta fibra beneficiosa.
2. Pela el mango y corta su pulpa en trozos. Retira el hueso.
3. Corta la manzana en trozos, retirando el corazón y las semillas.
4. Coloca los trozos de mango y manzana en una licuadora.
5. Añade el vaso de agua o leche según tu preferencia. Si deseas un licuado más espeso, utiliza menos líquido.
6. Agrega hielo para un efecto refrescante, si lo deseas.
7. Licúa todo hasta obtener una mezcla homogénea y suave.
8. Prueba el licuado. Si deseas un toque más dulce, añade una pequeña cantidad de miel y mezcla nuevamente.
9. Sirve inmediatamente para disfrutar todas sus propiedades frescas.

Recomendaciones de consumo:

Consume el licuado sin añadir azúcar ni endulzantes y combina el mango y la manzana con otras frutas o ingredientes, como espinacas, avena o semillas, para diversificar la ingesta nutricional.

La cantidad ideal sería una porción moderada (aproximadamente un vaso de 250 ml) debido a que puede ser elevado en azúcares y calorías. Si tienes condiciones de salud específicas, consulta con un profesional antes de incluirlo de forma diaria.