Gobierno de Michoacán destaca participación de extranjeros en el CJNG y como generadores de violencia en el país

El Gobierno de Michoacán alertó sobre el reclutamiento de extranjeros por parte del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) para intensificar la violencia en la región.

Según declaraciones del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, se identificó la participación de ciudadanos colombianos y salvadoreños en actividades delictivas vinculadas al crimen organizado en el estado.

Investigaciones periodísticas han revelado que el CJNG ha implementado estrategias para atraer a exmilitares y exguerrilleros colombianos, especialmente aquellos con experiencia en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Carlos Torres Piña, secretario de Gobierno estatal, agregó que algunos operadores extranjeros, no solo vienen a generar violencia, sino también entrenan a sicarios para armar artefactos explosivos e implementarlos en drones para enfrentar a otros grupos delictivos e incluso fuerzas federales.

“Tanto en los operativos que han sido detenidos con armamento, como en los mismos enfrentamientos donde ha habido abatidos de origen colombiano, eso es lo que nos da a nosotros la referencia de que sin contratados, participan y trabajan para la delincuencia organizada de Michoacán”, señaló el gobernador.

Estos individuos son reclutados mediante ofertas de empleo falsas, prometiéndoles trabajos como escoltas o en la vigilancia de huertas de aguacate. Una vez en México, son trasladados a campamentos de entrenamiento en zonas serranas de Michoacán y Jalisco, donde son obligados a participar en actividades criminales, incluyendo enfrentamientos armados y la fabricación de explosivos.

Por su parte, el titular de la Fiscalía General del Estado, Adrián López Solís, resaltó que solo en Michoacán se han detenido a 10 operadores; ocho venezolanos, un hondureño y uno guatemalteco. De esos detenidos, la mayoría pertenecían al CJNG, resaltó el secretario de Seguridad Pública local, Juan Carlos Oseguera Cortés.

Uno de los casos más notorios es el de Elkin Pérez Loaiza, alias “El Tigre”, un exmilitar colombiano con conocimientos en inteligencia militar y explosivos. Pérez Loaiza operaba bajo las órdenes de Nicolás Sierra Santana, líder de “Los Viagras”, y se encargaba de adiestrar a sicarios en el manejo de drones cargados con explosivos utilizados contra grupos rivales y fuerzas de seguridad en municipios como Apatzingán, Buenavista y Tepalcatepec.

Además, se han documentado testimonios de excombatientes colombianos que lograron escapar del CJNG. Estos relatos describen condiciones de coerción extrema, donde los reclutas eran obligados a cometer actos violentos bajo amenaza de muerte. Uno de ellos relató que, tras negarse a asesinar a un campesino inocente, fue amenazado de muerte por sus superiores.

La presencia de extranjeros en las filas del CJNG ha intensificado los enfrentamientos en Michoacán. En agosto de 2024, ocho miembros de las autodefensas de Coahuayana fueron asesinados en una emboscada atribuida al CJNG. Los atacantes utilizaron un “camión monstruo”, un vehículo blindado artesanalmente, para perpetrar el ataque.

El gobierno estatal reconoció la necesidad de reforzar las medidas de seguridad y ha solicitado apoyo federal para combatir la creciente influencia del CJNG en la región. Sin embargo, la infiltración de extranjeros en las estructuras del cártel representa un desafío adicional para las autoridades, que deben enfrentar no solo la violencia local, sino también las tácticas y conocimientos militares traídos por estos reclutas internacionales.

En conclusión, la estrategia del CJNG de reclutar extranjeros, especialmente exmilitares colombianos, ha contribuido a la escalada de violencia en Michoacán. Esta situación subraya la necesidad de una respuesta coordinada y efectiva por parte de las autoridades mexicanas para enfrentar las amenazas que representan estos grupos criminales transnacionales.