Detienen a César Hernández, el fugitivo estadounidense que mató a jefa de Enlace Internacional en Tijuana

Se encontraba prófugo desde diciembre de 2024, cuando escapó de una corte en EEUU y se refugió en México

Guardar
César Moisés Hernández, prófugo de
César Moisés Hernández, prófugo de la justicia estadounidense hasta este jueves, asesinó a una agente durante un fallido operativo en Tijuana. (X/@DavidWolf777)

Tras nueve días de búsqueda ininterrumpida, fue capturado César Moisés Hernández, el ciudadano estadounidense de 35 años que se encontraba prófugo y que es acusado de asesinar a Abigail Esparza Reyes, la jefa del Grupo de Enlace Internacional de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana (FESC). La detención tuvo lugar la noche del jueves 17 de abril en un operativo especial desplegado en la colonia Lomas del Matamoros, al este de Tijuana, Baja California.

La operación estuvo a cargo de un grupo táctico de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y personal del Ejército Mexicano, quienes trabajaron en un cerco de vigilancia en zonas donde se había detectado movimiento vinculado al fugitivo.

De acuerdo con fuentes consultadas por San Diego Red y Zeta, la ubicación del prófugo fue posible gracias a labores de inteligencia que incluyeron análisis de cámaras públicas y privadas, monitoreo de telecomunicaciones, y entrevistas a vecinos que reportaron movimientos inusuales. Durante al menos 48 horas previas a la detención, los agentes mantuvieron vigilancia encubierta en la zona para confirmar su presencia y evitar una nueva fuga.

Miembros de las fuerzas de
Miembros de las fuerzas de seguridad trabajan cerca de la escena de un crimen donde un ciudadano estadounidense disparó y mató a Abigail Esparza Reyes, de 33 años, una alta oficial de la policía estatal mexicana en una unidad de élite conocida como "Cazadores de Gringos", que rastrea y arresta a fugitivos estadounidenses en México, en Tijuana, México, el 9 de abril de 2025. REUTERS/Stringer

Hernández fue encontrado solo, desarmado y no puso resistencia. El lugar donde fue encontrado era una habitación improvisada de madera y lámina, sin acceso vehicular directo. Hernández fue ubicado recostado en una cama, sin camisa y sin equipo electrónico a la vista. No se detectó que contara con ayuda directa al momento del arresto, aunque las autoridades investigan si recibió apoyo logístico para moverse entre distintas zonas de la ciudad durante su huida.

Muerte de la jefa de los Cazagringos

El 9 de abril, el fugitivo mató a Abigail Esparza Reyes, de 33 años, durante un operativo conjunto de la unidad también conocida como los “Cazagringos” y el Servicio de Marshals de Estados Unidos. El equipo había logrado localizar al fugitivo en el fraccionamiento privado Barcelona Residencial, donde se ocultaba en una vivienda de dos niveles. Según los reportes, al notar la presencia policial, el hombre disparó desde una planta alta con un rifle, hiriendo en el cuello a la comandante.

La oficial fue trasladada a un hospital de la Cruz Roja, donde falleció poco después. Su muerte provocó indignación dentro y fuera de la corporación.

Así fue el operativo del que escapó el prófugo de EEUU que se encontraba en Tijuana. (@DavidWolf777)

Abigail Esparza contaba con formación especializada en inteligencia transfronteriza y lideraba desde 2023 el Grupo de Enlace Internacional, una unidad encargada de coordinar operativos binacionales para localizar y capturar fugitivos estadounidenses en México.

Durante su gestión, Esparza participó en múltiples acciones conjuntas con agencias como el FBI, la DEA y el HSI, y su unidad era pieza clave en la estrategia de cooperación México-Estados Unidos contra el crimen organizado y los delitos transnacionales.

Una fuga cinematográfica

Después del ataque, Hernández logró evadir a más de un centenar de elementos que rodeaban el fraccionamiento. Cámaras de videovigilancia mostraron que primero escapó en ropa interior por una calle privada. Luego se le vio cambiarse a un traje verde fosforescente, similar al de trabajadores de recolección de basura, lo que le permitió pasar desapercibido.

César Moisés huyó de la casa, "encontró" ropa y se fue de la zona caminando, al parecer tenía todo planeado como se puede ver en el vídeo. (@Eco1_LVM)

Posteriormente, las grabaciones captaron al fugitivo caminando por una vialidad principal y abordando un vehículo de transporte público con dirección a la zona comercial de “5 y 10″, en la delegación La Mesa. Desde ese punto, su rastro se perdió durante varios días, hasta que fue ubicado nuevamente en el oriente de la ciudad.

Las autoridades consideraron que utilizó rutas peatonales, lotes baldíos y casas abandonadas para esconderse, y que su habilidad para mezclarse entre la población fue clave para evadir la vigilancia durante más de una semana.

Fugitivo de alta peligrosidad

Antes del homicidio de Esparza, César Moisés Hernández ya era considerado un prófugo peligroso. El 2 de diciembre de 2024 escapó de la custodia del Departamento de Correcciones y Rehabilitación de California (CDCR) mientras era trasladado a una audiencia en la Corte de Delano. De acuerdo con reportes oficiales, aprovechó un descuido en el estacionamiento del tribunal, corrió y saltó una reja sin que los custodios pudieran detenerlo.

Desde 2019 cumplía una condena de 25 años a cadena perpetua en la Prisión Estatal de Kern, por el homicidio de un hombre en Los Ángeles, ocurrido en junio de 2018. Además, había sido sancionado en prisión por posesión de drogas, fabricación de un arma artesanal y consumo de alcohol ilegal.

César Moisés Hernández. (Departamento de
César Moisés Hernández. (Departamento de California)

Tras su fuga, el Gobierno de Estados Unidos envió una alerta a las autoridades mexicanas, indicando que se trataba de un individuo con “tendencias violentas” y alto riesgo de escape. La ficha fue recibida por la FESC a través de su Coordinación de Enlace Internacional, donde trabajaba Esparza.

El asesinato de la comandante provocó la activación inmediata de un protocolo binacional de alto nivel. La Embajada de Estados Unidos en México publicó la ficha oficial del Servicio de Marshals, en la que ofrecía 35.000 dólares [más de 700.000 pesos mexicanos] como recompensa por información que permitiera su recaptura.

El caso fue asumido como prioridad por la unidad “Cazagringos”, un grupo especial de la FESC que trabaja de manera directa con agencias estadounidenses para identificar, ubicar y detener a fugitivos en territorio nacional. La presión diplomática y mediática llevó a que se reforzaran los operativos con recursos estatales y federales adicionales, incluyendo tecnología de rastreo y drones.

¿Será deportado?

Tras su detención, Hernández fue trasladado a una instalación bajo resguardo de la Fiscalía General del Estado de Baja California. Aunque enfrenta una sentencia activa en California, su deportación no es automática. El proceso deberá ser canalizado por el Instituto Nacional de Migración (INM), que será responsable de coordinar la entrega con el gobierno estadounidense.

Al mismo tiempo, se analiza si se le imputarán cargos en México por el homicidio de Abigail Esparza, delito que, de ser judicializado, podría retrasar su salida del país. Las autoridades no han revelado si existen investigaciones abiertas por otros delitos cometidos durante su estancia en Baja California.

Por ahora, permanece bajo vigilancia especial mientras se determina su situación legal. El caso continúa generando atención pública, tanto por el perfil del detenido como por el nivel de coordinación binacional que activó su búsqueda.