¿Realmente funciona el truco del gis blanco para ahuyentar a las hormigas?

Aunque los gises blancos son más populares por utilizarse en el sector educativo, las aplicaciones que tienen van más allá del pizarrón, pues también se ocupan para limpiar metales, en algunas ocasiones se utiliza para hacer pinturas de fácil lavado e incluso para restaurar superficies, ya que es un mineral de uso industrial de alta calidad, lo que lo hace ideal para restauraciones de superficies con imperfecciones.

Sin embargo, otra de las áreas en las que se utiliza es en el hogar, pues se cree que contribuye a reducir la humedad y a ahuyentar pequeños insectos como las hormigas.

De acuerdo con información compartida por el INEGI, la materia prima de un gis es el yeso, un mineral común que se forma por el sulfato de calcio hidratado en rocas sedimentarias, desiertos y cuevas, por lo que incluso es posible hallarlo en el fondo del mar o de otros cuerpos de agua.

Cuando el yeso se mezcla con agua, se forma una sustancia cremosa que se puede vaciar en moldes para obtener gises o figuras así como para cubrir las paredes de las casas e inmovilizar huesos fracturados.

De acuerdo con la Universidad Veracruzana, “las hormigas tienen glándulas que secretan feromonas al exterior, para intercambiar información como cuál es el camino a la comida, cuándo comienza el apareamiento, si hay que defender el nido, hasta dónde se extiende una colonia y quiénes la integran”, señaló el portal oficial de la institución.

La Universidad señaló que las feromonas se transmiten por el aire o mediante contacto directo y que en ambos casos son percibidas por células receptoras ubicadas en las antenas de estos insectos, quienes las “huelen” si se trata de sustancias volátiles, o las “saborean” al tocar a sus pares.

“Para que las feromonas cumplan su razón de ser en la naturaleza como parte de los seres vivos se necesita de un emisor que la libere a la atmósfera, de que el aire la lleve y de que transmita un mensaje a un receptor potencial que se encuentra a corta o larga distancia de la fuente, formándose así el canal de comunicación entre los individuos”, compartió la institución en su sitio web.

Además, las hormigas tienen glándulas que secretan feromonas al exterior, para intercambiar información como: cuál es el camino a la comida, cuándo comienza el apareamiento, si hay que defender el nido, hasta dónde se extiende una colonia y quiénes la integran.

Incluso existe una “feromona funeraria” que secreta una hormiga cuando muere, y les indica a sus hermanas que deben llevarla al lugar de los desperdicios. Las feromonas son transmitidas por el aire o mediante contacto directo.

Sin embargo, Rentokil, una empresa de control de plagas, mencionó que una de las soluciones caseras más comunes es una forma “efectiva” de eliminarlas, pero los especialistas señalaron que esto sólo funciona porque el carbonato de calcio enmascara el rastro de olor de las hormigas, lo que provoca que se dispersen en diferentes direcciones al perder el rastro.

Sin embargo, después de un corto tiempo, las hormigas restablecen su rastro y vuelven a la acción, lo que hace que este método sea ineficaz para eliminarlas o su nido.

De acuerdo con Rentokil, una de las técnicas más utilizadas para eliminar hormigas es verter agua caliente o hirviendo sobre las áreas infestadas. Aunque este método puede matar a algunas hormigas por contacto y eliminar temporalmente su rastro de olor, no logra erradicar el problema de raíz, pues el hormiguero suele permanecer intacto, lo que permite que las hormigas regresen con el tiempo.

Además, el uso de agua hirviendo presenta riesgos significativos, pues existe la posibilidad de sufrir quemaduras o escaldaduras durante su manipulación. Por otro lado, el agua derramada puede generar humedad en el hogar, lo que podría filtrarse en estructuras de madera y atraer a otras plagas, como las termitas.

El uso de especias como canela, chile en polvo, cayena y pimienta negra es otra alternativa popular para repeler hormigas pero aunque enmascara los rastros de olor y las desorienta temporalmente, este método no elimina la infestación, ya que no afecta al hormiguero ni a la raíz del problema.

Además, el uso de especias puede tener consecuencias no deseadas, pues otras plagas domésticas, como las cucarachas, podrían sentirse atraídas por estas sustancias si se dejan dispersas en el hogar, lo que podría agravar la situación, obligando a los propietarios a lidiar con múltiples problemas de plagas en lugar de resolver el inicial.

El bórax, también conocido como ácido bórico o tetraborato de sodio, es otro método casero ampliamente utilizado para combatir hormigas. Este compuesto se emplea como cebo mezclándolo con sustancias dulces como azúcar o miel, lo que atrae a las hormigas. Al ingerir el cebo, las hormigas mueren debido a la toxicidad del bórax.

Sin embargo, este método presenta un riesgo significativo para la seguridad de los hogares, especialmente aquellos con niños pequeños o mascotas, además de que se está afectando a una especie animal, por lo que se sugiere hablar con expertos que puedan reubicar el hormiguero y evitar picaduras de estos insectos.