Julieta Prandi declaró en el juicio contra su ex marido Claudio Contardi: “Me iba a matar si no tenía relaciones”

El empresario es juzgado por abuso sexual reiterado. En su indagatoria, él sostuvo que la modelo miente. Ella relató detalles de la violencia intrafamiliar: “Lo único que quería era estar muerta”

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Julieta Prandi, en los tribunales
Julieta Prandi, en los tribunales de Campana. Foto: RS Fotos

El juicio contra el empresario Claudio Contardi, acusado por el abuso sexual reiterado de Julieta Prandi, su expareja y madre de sus hijos, empezó con la declaración indagatoria del imputado: “Fue todo consentido”, sostuvo ante los jueces, y afirmó que él es víctima de una falsa denuncia. Luego fue el turno de la modelo: “Era un infierno”, definió al relatar los ataques y contar los detalles de la violenta relación.

Contardi fue el primero en prestar testimonio ante el Tribunal Oral en lo Criminal N° 2 de Campana. Estuvo separado de su ex por un biombo, ya que ella pidió no cruzárselo ni tener contacto visual con él. No se logró ubicarlos en salas contiguas dentro del mismo edificio.

Según manifestó el empresario, no considera a Prandi “una mala mujer, mala madre o perversa”, pero sostuvo que en lo que respecta a la causa judicial “miente” para perjudicarlo, con una presunta intencionalidad económica. Y agregó: “Nunca tuve una relación con Julieta que no fuera consentida”.

La calificación en su contra es la de abuso sexual con acceso carnal agravado por causar un grave daño en la salud mental de la víctima, con una serie de hechos reiterados durante al menos tres años.

El juez Luciano Marino, que elevó el caso a juicio tras la investigación del fiscal Christian Fabio de la UFI N° 4 de Escobar, determinó que Contardi llegue al debate con prisión domiciliaria y monitoreo electrónico.

Julieta Prandi, junto a sus
Julieta Prandi, junto a sus abogados, en la sala de audiencias de los tribunales de Campana

Luego de un cambio en su defensa, a primera hora el nuevo abogado de Contardi pidió la nulidad de múltiples actos procesales, en un intento por demorar o impedir el inicio del juicio. El tribunal desestimó la queja luego de un cuarto intermedio.

La tensión que se vivió durante la primera jornada quedó evidenciada en un insólito cruce cara a cara que tuvieron los abogados de las partes en la puerta de los tribunales, quienes discutieron frente a los móviles televisivos presentes en el lugar.

Tras un cuarto intermedio, los jueces le cedieron la palabra a Prandi, que habló durante casi dos horas. Contó que sufrió tormentos varios: “Si fueses hombre no tendrías los huesos sanos” y “No vas a cumplir más años”, fueron solo algunas de las amenazas que, según la mediática, soportó durante años.

Además, la denunciante sostuvo que el padre de sus hijos “ejercía un control absoluto” sobre ella. Lo graficó en episodios donde la llevaba y traía hasta el trabajo sin permitirle estar sola, le hacía “cambiar el número de celular” o la “dejaba incomunicada”.

“Yo ya estaba anestesiada en vida. Me daba todo lo mismo, si me mataba me hacía un favor”, expresó Prandi, quien reconoció además que los abusos se prolongaron durante varios años porque “sentía que me iba a matar si no tenía relaciones”.

El caso

Julieta Prandi y Claudio Contardi
Julieta Prandi y Claudio Contardi

La causa comenzó tras la denuncia de Prandi ante la UFI N° 4 de Escobar en 2021. Contardi fue acusado por Prandi de someterla mientras convivían en un barrio privado de esa localidad bonaerense, “entre el 28 de julio del año 2015, fecha posterior al nacimiento del hijo mayor de ambos y el mes de marzo del año 2018, fecha en que se mudan a la localidad de Martínez”, según consta en el expediente. La pareja se separó finalmente en 2019.

La cantidad de abusos, así como las fechas exactas de los hechos, no pudo ser determinada por Prandi, un punto que la defensa de Contardi atacó y que el juez Marino no consideró relevante: la falta de precisión es propia del trauma del abuso sexual.

Según el relato de la modelo, Contardi la tomaba del cuello para forzarla. La modelo se negaba, a viva voz, “ejerciendo el sindicado Contardi violencia psicológica, refiriéndole que era su mujer y que era su obligación tener relaciones sexuales”, continúa el documento. En algunas oportunidades la habría atacado mientras dormía.

Así entraba Julieta Prandi al
Así entraba Julieta Prandi al primer día de juicio, junto a su abogado. Foto: RS Fotos

En su relato, la actriz y conductora detalló cómo tras la mudanza tras el country a Escobar, Contardi “comenzó a controlar su vida y alejarla de todos sus seres queridos, no permitiéndole manejar”, continúa un extracto del expediente.

Julieta Prandi fue sometida a una pericia oficial, realizada por una psicóloga de la Asesoría de la Procuración. Las conclusiones, en base a su relato, fueron determinantes para la acusación.

“Dicha producción discursiva resulta coherente y consistente y asimismo presenta un concomitante afectivo acorde con las manifestaciones vertidas”, escribió en su reporte posterior la perito. “De la observación, escucha y análisis de la evaluación realizada, surgen indicadores compatibles con victimización sexual y violencia familiar”, continuó la experta.

Rafael Herrera Milano, otro perito psiquiátrico que evaluó a Prandi, declaró este miércoles ante el tribunal y ratificó que las secuelas de salud mental que sufre Prandi sin compatibles con las agresiones sexuales que denunció.

Declararon amigos y familiares de Julieta Prandi

Como testigos de la violencia intrafamiliar, también declararon Eduardo Daniel Prandi (padre), Cristina Caballero (madre) y Natalia Prandi (hermana).

Todos ratificaron que Contardi tenía una conducta violenta y controladora por la que se distanciaron de la modelo y actriz. Incluso vincularon al empresario con cuestiones espirituales, ya que sospechan que fue Pai umbanda, un líder de esa religión.

Eduardo Prandi contó además que le entregó a Contardi más de 30.000 dólares para abrir una franquicia de un local gastronómico, pero en lugar de tratarlo como socio terminó “de mozo, o haciendo repartos”.

“Él provocó un distanciamiento cada vez más profundo. Llegó un momento donde no teníamos dónde llamar a nuestra hija”, dijo el padre de la modelo.

Luego siguieron Mariano Peluffo y Sebastián Waizer, ambos amigos y compañeros de trabajo de Prandi, quienes relataron como ella veía su vida alterada por sus problemas matrimoniales. También ratificaron que sufría violencia económica.

El debate oral continuará el jueves, con la declaración de más testigos.