Nueva York evalúa un programa piloto de pavimento frío para combatir olas de calor

Un proyecto de ley en el Concejo Municipal propone invertir millones en recubrimientos especiales para calles, buscando reducir temperaturas y proteger a comunidades vulnerables durante los veranos más intensos

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Trabajadores repavimentando una calle urbana,
Trabajadores repavimentando una calle urbana, representando obras viales en zonas residenciales.

La posibilidad de que Nueva York implemente un programa piloto de “pavimento frío” en sus calles ha cobrado fuerza tras la reciente presentación de un proyecto de ley en el Concejo Municipal. La iniciativa, que contempla una inversión de USD5,5 millones, busca transformar la experiencia urbana durante los meses más calurosos, al reducir la temperatura de las superficies viales y mitigar los efectos del asfalto tradicional, que suele intensificar el calor en la ciudad.

El proyecto, impulsado por la concejala Sandy Nurse de Brooklyn, propone que el programa piloto tenga una duración de dos años y que, antes de septiembre de 2026, se aplique en al menos un barrio de cada uno de los cinco distritos de la ciudad. La selección de estos barrios se basará en dos criterios fundamentales: que presenten altas temperaturas superficiales en verano y que cuenten con bajos ingresos medios. De este modo, la propuesta apunta a beneficiar especialmente a las comunidades más vulnerables frente a las olas de calor, que suelen verse más afectadas por la falta de espacios verdes y la abundancia de superficies asfaltadas.

Workers grind down the asphalt
Workers grind down the asphalt on Willow Street in Chelsea to minimize the amount of heat absorbed and reflected from the surface. (Jesse Costa/WBUR)

El concepto de pavimento frío se fundamenta en el uso de materiales y recubrimientos de colores claros, o incluso césped, que reflejan la luz solar en mayor medida que el asfalto convencional. Según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, esta tecnología permite que las calles permanezcan a temperaturas más bajas, lo que contribuye a reducir el fenómeno conocido como “isla de calor urbana”. Este efecto, característico de las grandes ciudades, se produce cuando las superficies oscuras absorben y retienen el calor, elevando la temperatura ambiente y agravando los riesgos para la salud durante los picos de calor.

El costo de aplicar el sellador especial para pavimento frío es aproximadamente 0,60 USD más por yarda cuadrada (0,50 m²) en comparación con los selladores tradicionales, de acuerdo con la Sociedad Estadounidense de Ingenieros Civiles. Aunque este incremento puede parecer significativo a gran escala, la concejala Nurse sostiene que los beneficios superan ampliamente la diferencia de precio. En declaraciones a PIX 11, Nurse afirmó que “el pavimento frío ofrece beneficios adicionales, como la disminución de la escorrentía de aguas pluviales, la mejora de la calidad del agua, el aumento de la seguridad vial y una mejor visibilidad nocturna, dependiendo del tratamiento”.

Ilustración técnica de recubrimiento de
Ilustración técnica de recubrimiento de pavimento de alta reflectancia aplicado en una calle.

La edil también subrayó el impacto que el asfalto tradicional tiene sobre el microclima urbano, señalando que “el asfalto convencional absorbe el calor y puede hacer que la ciudad se sienta hasta ocho grados más cálida”, según sus declaraciones recogidas por PIX 11. Esta diferencia térmica no solo afecta la comodidad de los residentes, sino que también puede tener consecuencias en la salud pública, especialmente para personas mayores, niños y quienes padecen enfermedades crónicas.

Además de los beneficios ambientales y de salud, Nurse destacó el potencial económico de la iniciativa. Según explicó a PIX 11, “los tratamientos de pavimento frío también podrían mejorar la actividad comercial en las zonas donde se logre el efecto de corredor fresco”. La creación de estos corredores podría incentivar el tránsito peatonal y la permanencia en espacios públicos, favoreciendo así a los comercios locales y dinamizando la vida urbana en los barrios seleccionados.

Vista aérea de un complejo
Vista aérea de un complejo urbano en el que se aplicaron recubrimientos reflectantes para reducir la temperatura del suelo. Estos proyectos, similares al plan que estudia Nueva York, buscan mitigar el efecto de “isla de calor” y mejorar la habitabilidad de las zonas densamente pobladas.

La ejecución del programa piloto requerirá la colaboración de varias agencias municipales. El Departamento de Transporte, el Departamento de Salud, el Departamento de Protección Ambiental y la Oficina de Planificación y Sostenibilidad a Largo Plazo serán los encargados de coordinar la implementación y el seguimiento de los resultados. Esta estructura interinstitucional busca garantizar que la evaluación del proyecto contemple tanto los aspectos técnicos como los impactos sociales y ambientales.

Una vez finalizado el piloto, el Departamento de Transporte deberá presentar un informe detallado al alcalde y al Concejo Municipal en un plazo de 180 días. Este documento recogerá los resultados obtenidos, permitiendo valorar la eficacia de la tecnología y su viabilidad para una posible expansión a otras zonas de la ciudad. La decisión final sobre la adopción a gran escala del pavimento frío dependerá de los datos recogidos y del análisis de los beneficios observados durante el periodo de prueba.

Un vehículo especializado aplica una
Un vehículo especializado aplica una capa de recubrimiento frío sobre el pavimento en una calle residencial de Phoenix, Arizona, como parte de un programa piloto de mitigación del calor urbano.

El proyecto de ley será examinado próximamente por el comité de transporte del Concejo Municipal, que celebrará una audiencia para debatir la propuesta y escuchar las opiniones de expertos, funcionarios y representantes de la comunidad.