Hong Kong regulará pisos subdivididos desde marzo de 2026 para combatir infraviviendas

El Gobierno de Hong Kong implementará regulaciones para registrar pisos subdivididos y mejorar las condiciones de habitabilidad, buscando erradicar infraviviendas y garantizar estándares mínimos de vivienda básica desde 2026

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Hong Kong, 20 jun (EFECOM).- El Gobierno de Hong Kong anunció un plan para registrar los pisos subdivididos, algunos conocidos como "viviendas jaula", bajo el esquema de “unidades de vivienda básicas” a partir de marzo de 2026, en un esfuerzo por eliminar espacios “deficientes” que no cumplen con los estándares mínimos de habitabilidad establecidos.

Según el plan, presentado este jueves, que incluye inspecciones y regulaciones más estrictas, toda unidad subdividida deberá registrarse y someterse a reformas específicas, como garantizar acceso a agua potable, ventilación adecuada y medidas contra incendios, para ser considerada una “unidad de vivienda básica” y poder alquilarse legalmente.

La medida busca abordar el grave problema de las condiciones de vida en esta ciudad de 7,5 millones de habitantes, donde se estima que unas 200.000 personas residen en este tipo de pisos, según datos de la oenegé Society for Community Organization.

Estos alojamientos, a menudo de menos de 10 metros cuadrados, carecen de ventilación adecuada, ventanas o instalaciones sanitarias propias, perpetuando condiciones de hacinamiento y precariedad.

El Ejecutivo hongkonés, enfrentado a una crisis habitacional crónica en una ciudad donde el precio medio de la vivienda alcanza los 123.000 dólares por metro cuadrado (unos 15.700 dólares estadounidenses, 13.500 euros), según la guía Global Property 2025, apuesta por un enfoque gradual para evitar desalojos masivos.

Sin embargo, persisten dudas sobre la financiación de las reformas y el apoyo a los inquilinos más vulnerables.

Las autoridades han establecido que, desde marzo de 2026, los dueños de propiedades fraccionadas tendrán tres años para hacer las reformas necesarias y cumplir con las normas que las homologuen como residencias básicas.

Cumplidas las adaptaciones, los propietarios deberán tramitar la certificación oficial, un procedimiento con un costo de 3.000 dólares hongkoneses (unos 382 dólares estadounidenses, 331 euros), según informó el Ejecutivo. Esta acreditación tendrá una vigencia de cinco años.

Con el propósito de estimular una pronta optimización de estas construcciones, se contempla dispensar del pago de esta tarifa durante los primeros dos años y medio posteriores al arranque del programa.

A partir de marzo de 2027, alquilar estas unidades sin registro ni homologación como residencias elementales será delito, con penas de hasta tres años de cárcel y multas de 300.000 dólares hongkoneses (unos 33.150 euros, 38.200 dólares estadounidenses).

No cumplir con las órdenes de corrección o dar información falsa puede llevar hasta dos años de cárcel y multas diarias. También habrá más sanciones si no se informan cambios que afecten los requisitos de una unidad.

Los precios de las viviendas en la región cayeron un 7,76 % en el primer trimestre de este año frente al mismo periodo de 2024, sumando ya 13 trimestres seguidos de bajas, según el Departamento de Tasación y Valoración.

Este panorama golpea a un mercado inmobiliario que, pese a ser uno de los más caros del planeta, enfrenta una presión sin precedentes por la incertidumbre económica global y los altos costos que ahogan a los compradores. EFECOM