El fiscal asegura que el autor del atropello múltiple en La Rioja tenía intención de matar

El juicio por el atropello en Haro examina la intención de matar del conductor, con un fallecido y cinco heridos, mientras se debaten responsabilidades y medidas de seguridad ante su enfermedad mental

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Logroño, 26 may (EFE).- El fiscal ha asegurado este lunes la intención de matar que tenía un conductor de 24 años, contra el que este lunes ha comenzado un juicio con jurado como presunto autor de un delito de asesinato y de otros cinco en grado de tentativa por el atropello múltiple ocurrido en Haro (La Rioja) en 2023.

La Audiencia de La Rioja ha celebrado la primera sesión del juicio por este suceso, ocurrido en el aparcamiento del centro de salud de Haro a las 22:00 horas del 4 de septiembre de 2023 y en el que murió un técnico sanitario y otras cinco personas resultaron heridas.

El fiscal pide para el acusado, residente en Vizcaya, una sentencia absolutoria y que se le imponga la medida de seguridad de internamiento para tratamiento médico adecuado al tipo de anomalía o alteración psíquica que padece durante un plazo máximo de 25 años.

La defensa aboga por la absolución con una medida de libertad vigilada por su enfermedad; y las acusaciones particulares han solicitado penas que oscilan entre 74 y 12 años de prisión, con 5 de libertad vigilada.

El fiscal ha constatado que la intención del acusado, al pisar el acelerador y arremeter contra las personas que estaban junto al centro de salud, era “matar”; actuó “con velocidad y sorpresa” y no pudieron esquivarlo.

Ha justificado su petición de absolución en su enfermedad mental, que provocó un brote o descompensación que “anuló su capacidad de entender y obrar”, según confirmaron los psiquiatras que le trataron después de los hechos.

El abogado defensor ha reconocido los hechos y ha puntualizado que el acusado tuvo en 2020 su primer ingreso por esquizofrenia paranoide, tras lo que ha sufrido varias descompensaciones.

En agosto de 2023, su doctora de Bilbao le subió la medicación, pero, el día de los hechos, sus padres le llevaron desde el municipio riojano de Leiva, donde estaban, al centro de salud de Haro, a unos 20 kilómetros, para que le pusieran la medicación correcta porque decía que le estaban persiguiendo, veía coches con las lunas tintadas y creía que le intentaban matar.

Por su parte, algunos de los letrados de los cinco heridos han resaltado que el acusado hacía vida normal, vivía solo, tenía un trabajo y conducía, ya que estaba “compensado” de su enfermedad con la medicación.

La abogada de la madre y hermanos del fallecido ha subrayado que “la muerte fue un acto consciente y voluntario”, por lo que padecer una enfermedad mental no es un motivo para exculparle.

Además, la acusación particular que ejerce la novia del sanitario muerto también ha reclamado una indemnización de 300.000 euros, ya que ambos habían iniciado un tratamiento de fertilidad para tener un hijo en común.

Un médico que resultó herido en este atropello ha relatado que el acusado entró “a matar” con una “violencia descomunal”, pero él no vio llegar el coche hasta que notó “un impacto tremendo”.

“Escuché muchos ruidos, voces, el sonido de los cristales y el sabor de la sangre”, ha indicado este facultativo, para quien el atropello fue "muy repentino".

La defensa ha pedido que el procesado se ausentase de la sala hasta que su declaración, prevista este jueves, 29 de mayo, lo que la magistrada ha autorizado con la oposición de las acusaciones particulares. EFE

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