Madrid, 10 abr (EFE).- El juez que investiga una segunda posible estafa al Ayuntamiento de Madrid en la compra de mascarillas durante la pandemia ha ordenado la detención del sospechoso del fraude, Philippe Haim Solomon, que también responde al nombre de Philippe Víctor Chaim Hababou, y tiene pasaporte israelí, de Guinea Bissau y francés.
A través de un auto fechado en febrero, al que ha tenido acceso EFE, el magistrado del Juzgado de Instrucción número 30 de Madrid ha dictado orden europea de detención, con una vigencia de diez años, y ha comunicado la actuación a Interpol para que la orden se convierta en una orden internacional.
El magistrado ha acordado así la presión preventiva comunicada y sin fianza del directivo de la empresa Sinclair and Wilde, por una posible estafa al Ayuntamiento de Madrid de 1,25 millones de euros en la compra de 500.000 mascarillas en marzo de 2020.
El magistrado indica en el auto que "el investigado se encuentra en paradero desconocido" y que ante la gravedad de los hechos y las penas con los que están sancionados es obligado dictar una orden europea de detención, que cuenta además con informe favorable de la Fiscalía.
Considera que Solomon, con domicilio en Nueva York o Londres, es el presunto autor del "engaño que condujo finalmente a que la Empresa Municipal de Servicios Funerarios y Cementerios de Madrid a transferir la cantidad total de 2.500.000.- euros, por un producto que no cumplía con las exigencias requeridas para su uso y destino".
El Ayuntamiento de Madrid comunicó la presunta estafa a la Fiscalía respecto a una compra por valor de 2,5 millones euros aprobada en marzo de 2020 y de la que se transfirió la mitad del importe, sin que se produjese el segundo pago porque sus servicios jurídicos detectaron que faltaban las certificaciones de calidad reclamadas en varias ocasiones.
El Ayuntamiento reclamó la devolución del importe abonado sin obtener respuesta.
Además, la Policía Municipal de Madrid intentó dar con Solomon a través de la Policía Metropolitana de Nueva York, que en la supuesta sede de Sinclair and Wilde encontró al señor Fong, el verdadero inquilino, que relató que como por un favor dejó a la compañía su oficina y se quejó porque desde entonces recibía correo de diferentes jurisdicciones que buscaban a Phillipe Haim Solomon. EFE