Barcelona, 31 ene (EFE).- El Ayuntamiento de Barcelona comenzará a multar a partir de mañana, entre otros, a los conductores de patinetes que circulen sin casco o que lo hagan por las aceras, con sanciones que pueden oscilar entre los 50 y los 500 euros.
La primera teniente de alcaldía de Barcelona, Laia Bonet, ha subrayado este viernes que el inicio las sanciones supondrá un "cambio de hábitos" que protegerá a los actores de movilidad de la ciudad que son "más frágiles".
En declaraciones desde el ayuntamiento, ha explicado que la entrada en vigor implica que sea obligatorio el uso del casco para los usuarios de patinetes, que tanto estos como las bicicletas no puedan circular por las aceras, y que las motos no puedan aparcar en accesos de centros hospitalarios y educativos.
Sobre las sanciones que puede implicar el incumplimiento de la ordenanza, ha relatado que las cuantías serán más bajas cuando lo que haga el infractor sea ponerse en peligro a sí mismo y aumentarán cuando la acción pueda afectar a la seguridad de un tercero. EFE
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